Un cómic nos descubre al auténtico Jaume Sisa

Sisa. Los años galácticos es obra de J.M. Polls y Manu Ripoll
“Su estilo único construye una galaxia propia y a la vez universal”, asegura Polls

30.07.2019 09:35 horas

Por JESÚS JIMÉNEZ

Detalle de la portada de 'Sisa. Los años galácticos'

Icono viviente de la cultura underground catalana de los años 60 y 70, el cantautor Jaume Sisa (Barcelona, 1948), es uno de los músicos más influyentes de los últimos años. Y también uno de los más inquietos, como demuestra los muchos alías que uso durante su carrera y que son el punto de partida del estupendo cómic Sisa. Los años galácticos (Norma), del guionista Josep Maria Polls y el joven dibujante Manu Ripoll, que nos deslumbra con su original estilo.

Polls resume así el argumento del cómic: “Los alter-ego creados por Sisa: Solfa, Mestres y Llamado, acuden a casa de este convocados por El Viajante, la última transformación del cantautor. La reunión propone poner luz definitiva al origen de todos ellos”.

“Pese al escepticismo de unos y la inicial negativa de otros -añade-, finalmente acceden a viajar al pasado, reconstruir la vida de Jaume Sisa en los años en que el cantautor forjó su personalidad musical y de este modo resolver el misterio que les une”.

Un mito vivo de la contracultura barcelonesa de los 60

En cuanto a qué significa Sisa para la cultura catalana, Polls cree que: “Es un ejemplo vivo y muy significativo de la contracultura barcelonesa de finales de los 60 y principios de los 70”.

“Experimenta todo el proceso de transformación musical de esa década -continúa-, desde los despreocupados sonidos del pop británico hasta el folk y el rock vanguardista Norteamericano cuyas voces y letras constituyen la punta de lanza de los movimientos sociales que agitan las conciencias de la época”.

“Sisa pasa por todos los estadios, y los carga de poesía beat de matices caseros –añade Polls-. Su música adquiere conciencia propia, un estilo personal, único, construye una “galaxia” próxima y la vez universal. Es inimitable. Si hiciésemos un barrido musical a los 60 o 70 de este país, tal vez encontrásemos cantantes o bandas con estilos similares, pero no otro Sisa”.

“No quería escribir una biografía al uso”

Pero este cómic es mucho más que un recorrido por la vida de Sisa. “Tenía muy claro que no iba a escribir una biografía al uso –asegura Polls- Quería darle un toque de ficción, algo que representase el universo de Sisa y al mismo tiempo que ofreciese varias líneas de lectura”.

“La primera e inevitable –añade-, la de los hechos históricos donde descubriríamos la vida del personaje, y una segunda que hiciese participar al lector, una historia de tintes fantásticos, que, alimentada de cierto suspense, nos llevase hasta el final del argumento. Una especie de misterio a resolver… La verdad es que tardé muy poco en darme cuenta que las personalidades de Sisa iban a ser los perfectos conductores del argumento”.

“Como anécdota –concluye Polls- diré que he sido el primero que ha puesto voz a Armando Llamado y a Ventura Mestres. Hasta esta historia nunca habían hablado “en público”.

“Escribir sobre Sisa ha sido como revisar mi adolescencia”

Aunque fue Norma quién le propuso el proyecto, Polls confiesa que: “La idea de escribir sobre la vida de Jaume Sisa me seduce de buen principio. Solo les pedí libertad para desarrollar el argumento, tanto en el fondo como en la forma. La editorial no me puso ningún problema y a partir de ese instante asumí toda la responsabilidad y lo convertí en un “proyecto propio”.

Y es que Polls admiraba al cantante desde su juventud: “La primera vez que sé de la existencia de Sisa es durante el 1er Festival Canet Rock, en 1975. Yo tenía 15 años recién cumplidos. Sisa era uno de los artistas que figuraban en el cartel, pero su actuación fue prohibida por la censura de la época. A la hora prevista de la actuación la organización del festival colocó una solitaria silla y un micrófono frente a ella. Un foco estuvo iluminando ambos elementos mientras por los altavoces del festival sonaba la canción “Qualsevol nit pot sortir el Sol”.

“Aquella noche ¡viajé por primera vez a la “Galaxia” de Sisa! Por eso, escribir sobre Sisa significó revisar mi adolescencia, una época en que la música lo fue casi todo para mí”.

Sisa ha colaborado en el cómic

No siempre se puede contar con la colaboración del protagonista de una historia biográfica. Pero en esta ocasión Polls ha tenido el apoyo del propio Sisa. “Nos reunimos varias veces a lo largo del proceso de escritura. Antes de empezar a trabajar a fondo con el guion, le presente la sinopsis y le explique cómo enfocaría el relato. Quería que él estuviese de acuerdo”.

“Me dijo que le gustaba mucho la idea –añade-, que si él la hubiera sido el autor lo habría hecho de la misma forma. ¡Fue todo un elogio!”

“A partir de ahí nos vimos dos o tres veces más para revisar la documentación y cada movimiento del guion. Siempre estuvo muy dispuesto a participar y a dar ideas” –concluye Polls-.

Los años galácticos

El subtítulo del tebeo alude a unos años irrepetibles, como nos comenta Polls: “El cómic retrata cuatro décadas distintas: Arranca en la segunda mitad de los 60, la década de los 70, y la de los 80 hasta la primera mitad de los 90. Como cronista circunstancial, y adolescente en los 70, creo que fue un momento donde todo nos parecía posible, el régimen anterior fenece y occidente, el occidente que nos prohibieron durante años, entra por todos los poros del país”.

“La música se convirtió bandera colectiva de la libertad, en todos los sentidos –añade el guionista-. Era algo que nos conectaba a todos. Y lo mejor es que no había límites musicales. Escuchabas rock, pop, folk, blues, daba lo mismo la sub-etiqueta añadida; progresivo (sinfónico en la época), psicodélico, heavy…podías encontrarte a la misma gente, las mismas caras, en casi todos los conciertos del estilo que fuesen. Lo importante era la comunicación con la buena música”.

“Sisa formó parte de un movimiento musical llamado “Ona Lietana”, que se creo en torno a la Sala Zeleste –continúa-. Un local fundamental en la vanguardia musical de la época y que de alguna forma es ejemplo de lo que he comentado anteriormente”.

“Formados en Zeleste podría destacar a Secta Sónica, grupo del eterno Gato Pérez, o a la Orquesta Platería, o la Mirasol (Una banda de jazz-rock con músicos excepcionales que habían colaborado con Chick Corea). Me llegan nombres como Pau Riba, Oriol Tramvia, Iceberg, Máquina, Om, La Dharma, Musica Urbana, Blay Tritono y varias decenas más…” –concluye Polls-.

Un cómic con su propia banda sonora

El cómic incluye una lista de casi 50 canciones, no solo de Sisa sino también de otros autores, que nos ayuda a retroceder a esa época. “Antes era casi imposible añadirle una banda sonora a un cómic –afirma Polls-. En los años 80 el autor Fernando de Felipe había llevado a cabo un “experimento” novedoso para su época, grabando un cassette cuya música podía ser escuchada con el álbum S.O.U.L. ”.

“Hoy en día, con plataformas de música por streaming las posibilidades son infinitas. –añade el guionista-. Por eso el libro contiene un QR con el que conectar directamente con la playlist”.

“No se trata de una banda sonora generalista sobre las “canciones de una época”, sino de una selección directamente ligada a la vida de Sisa. Un listado musical cuyo orden cronológico nos describe desde la música que influyó al personaje, hasta la que él creo”.

“La idea –concluye Polls- es que mientras leemos el cómic podamos incluir a cada escena la canción que le corresponde, y de este modo entender un poco más la personalidad creativa de Sisa”.