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Chris Claremont ('La Patrulla X'): "Mi interés es llegar al mayor número de lectores"

  • El guionista que llevó a la gloria a los X-Men es la estrella de Viñetas desde o Atlántico
  • Claremont asegura que sus famosos personajes femeninos están basados "en mujeres reales"

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Chris Claremont en A Coruña
Chris Claremont en A Coruña

El responsable de llevar a la fama a la "Patrulla-X", Chris Claremont, ha asegurado hoy que su "esperanza" es "que el mercado se recupere" y ve como "reto, mantener las cifras", para lo cual desarrolla un "trabajo continuo e inacabado de forma prolongada en el tiempo" con el que trata de "mejorar" cada día.

Con motivo de su participación en el salón internacional del cómic Viñetas desde o Atlántico, el guionista de cómics y escritor británico ha señalado en una rueda de prensa que no quiere hablar de un "legado" porque eso significa su "muerte", al menos como creador.

"Me considero en un trabajo continuo e inacabado de forma prolongada en el tiempo. No trato tanto de satisfacer las expectativas sino de buscar fórmulas nuevas para tratar de hacerlo mejor", subraya.

Uno de los mejores guionistas de cómic de la historia

Claremont (Londres, 1950) ha reconocido que hay mucha diferencia entre 1990, cuando la Patrulla-X estaba en "su punto más alto" y vendía "en torno a medio millón de ejemplares cada número, lo que se mantuvo durante diez años", y la actualidad.

"Cuando empecé a escribir en 1975, si un cómic no alcanzaba una tirada de 100.000 ejemplares, se retiraba del mercado. En cambio, hoy en día es difícil que los libros superen los 20.000 ejemplares en ventas", argumenta.

Ha incidido, asimismo, en que para los autores es fundamental "encontrar y saber mantener el pulso del público y saber lo que le interesa" y eso lo busca "a través de personajes importantes para el público, es decir, que sienta simpatía y afecto por ellos y por sus historias y que vuelvan una y otra vez a ellos".

Ve así en "Doctor Who", en "Juego de Tronos" o en "Harry Potter" el "anhelo de todo autor", que es "encontrar la historia, hablarle a la historia y que esa historia le hable al público", algo que se produce tanto "en libros en prosa como en el cómic".

Los protagonistas de 'La Patrulla X' de Claremont y el dibujante John Byrne

Los protagonistas de 'La Patrulla X' de Claremont y el dibujante John Byrne

Es famoso por sus personajes femeninos

Durante su carrera ha apostado por los personajes femeninos que están basados en "mujeres que conoce de la vida real" y que le han impactado.

Su madre fue piloto durante casi cincuenta años y participó en la Segunda Guerra Mundial, tiene una amiga que fue corresponsal de guerra en Sarajevo y otra que llegó "al centro de África para buscar al virus del ébola".

"Cuando conoces a gente con ese nivel de inteligencia y valor en el mundo real. ¿Cómo no puedes hacerles justicia en la ficción? Además, pueden ser más hermosas con cuerpos perfectos y ningún sentido de la modestia. En ese sentido los cómics son autoindulgentes", bromea.

Ha apuntado, en el apartado de confesiones, que el "mayor elogio" que ha recibido es cuando un seguidor le dijo que había mantenido con un amigo una conversación reflejada en un libro: "La ficción y la realidad se habían encontrado", añade.

"Me interesa llegar a un gran público"

Para él lo más importante es "llegar a una gran variedad, a una gran diversidad de lectores" y en ese sentido ha sido capaz de conectar con personas "homosexuales, de color y que pertenecían a religiones sin la popularidad de otras", todos "lectores que podían identificarse con los personajes".

"Lo hacen a través de sus luchas, de sus triunfos. Se sienten identificados y encuentran un eco de sus vidas, en sus historias. Es un reconocimiento y un elogio magnífico y, a la vez, un reto de grandes dimensiones", ha abundado.

A pesar de haber creado el universo de la Patrulla-X, no cobra por las numerosas películas, pues sus únicos ingresos de ahí llegan de un pequeño papel en "X-Men: Días del futuro pasado" e ironiza con que tiene un "plan B" si tiene "problemas como autor".

"Para poder hacer ese papel era parte del sindicato de actores y pude cobrar. Recibo pequeños porcentajes por la película de vez en cuando, con cheques de 35 dólares. Es la parte que me llevo de cientos de millones que tuvo como beneficio la película", ha concluido.