Yo soy Peppa Pig. (Gruñe).

Este es mi hermano pequeño George. (Gruñe).

Esta es mamá Pig. (Gruñe).

Y este es papá Pig. (Gruñe).

"PAPÁ PIERDE LAS GAFAS".

Risas y gruñidos

Papá Pig usa gafas.

Necesita usar gafas para ver correctamente.

Cuando papá Pig lleva sus gafas, lo ve todo bien.

Pero cuando papá Pig se quita las gafas...

no ve las cosas con claridad.

Todo está borroso y difuminado.

Por eso es muy importante que papá sepa dónde están sus gafas.

Risas

A veces papá Pig pierde las gafas.

Peppa, George, ¿habéis visto las gafas de papá Pig?

No las encuentra por ningún sitio.

No, mamá.

Peppa y George no saben dónde están las gafas de papá Pig.

¡Oh, vaya! Papá Pig no ve nada sin ellas y se vuelve muy gruñón.

Sin las gafas puestas, papá Pig no puede leer el periódico.

¡No sé por qué me empeño! ¡No veo nada!

Alguien tiene que haberlas puesto en algún sitio.

¿Te acuerdas de dónde las dejaste la última vez, papá Pig?

Cuando no las llevo puestas, me las guardo en el bolsillo.

Pero ahora no están ahí.

¡Papi! ¿Te ayudamos a buscar tus gafas?

Buena idea, Peppa.

Si las encontráis, papá dejará de estar tan gruñón.

Yo no estoy gruñón.

Peppa y George van a buscar las gafas de papá.

Peppa mira debajo del periódico.

Pero las gafas de papá Pig no están ahí.

Oh.

George mira encima del televisor,

pero las gafas de papá tampoco están ahí.

Oh.

Vamos a mirar en el piso de arriba, en su dormitorio.

Peppa y George van a buscar en el dormitorio de papá y mamá Pig.

George, ten mucho cuidado, no vayas a romper algo... ¡Ah!

Ríe

No tiene gracia.

Peppa mira debajo de las almohadas, pero las gafas no están ahí.

Oh.

George mira en las zapatillas de papá.

Pero las gafas tampoco están ahí.

Tose

¡Vamos al cuarto de baño!

Peppa y George buscan en el cuarto de baño.

Las gafas no están en la bañera.

Oh.

Las gafas no están en el retrete.

Oh. Hmm.

Esto es muy difícil.

Peppa y George no encuentran las gafas de papá Pig

por ningún sitio.

Buscamos por todas partes,

pero no encontramos las gafas de papá.

¡Ay, vaya! ¿Qué podemos hacer?

Supongo que tendré que aprender a vivir sin ellas.

Iré despacio, así no me tropezaré.

¡Aquí están! ¡Las gafas de papá!

Papá Pig, has estado sentado encima todo el rato.

Oh...

¡Qué tonto, papi!

(Ríe) (Gruñe)

No sé cómo habrán ido a parar ahí.

¡Vete tú a saber!

Ríen y gruñen

Puede que hayas sido un poco tonto, papá Pig,

pero por lo menos ya no estás gruñón.

Yo no estaba gruñón.

Ríen

“SEMBRANDO EN EL HUERTO”.

Peppa y George van a jugar

a casa de la abuelita y el abuelito Pig.

Ríen

¡Abuelo! ¡Cógelo!

¡Tuyo!

¿Qué es eso?

¡Dinosaurio! ¡Grrr!

¡Un dinosaurio! Oh, oh, oh.

Abuelito, ¿qué estás haciendo?

Estoy sembrando estas semillas.

¿Semillas? ¿Y para qué sirven, abuelo?

Las semillas crecen y se hacen plantas.

Hago un agujerito y meto la semilla dentro.

La tapo con tierra y después riego.

Todo lo que veis en mi huerto,

crece a partir de semillitas como esta.

¿Hasta el manzano grande? ¡Oh, sí!

Mirad, esta semillita se convertirá en un manzano pequeño como este.

¡Ohh! ¡Ohh!

Y este manzano pequeño crecerá y crecerá,

y se hará grande como este.

¡Oh!

Dentro de esta manzana hay más semillas.

¡Para hacer más manzanos!

¡Exactamente!

¡Abuelo, abuelo!

¡Yo quiero sembrar una semilla!

¿Te gustaría sembrar una semilla de fresas?

¡Sí, por favor!

Esta semilla se convertirá en una bonita planta de fresas.

Primero, haz un agujerito.

Después meto la semilla y la cubro con tierra.

¿Quieres que la riegue yo?

¡No! ¡No! Ya la riego yo.

¡Bien! Ahora esperaremos a que brote.

Peppa y George están esperando a que la semilla brote.

¡Pero no hace nada!

Tienes que tener paciencia, Peppa.

Tardará algún tiempo en brotar.

¡Peppa! ¡George! Es hora de irse a casa.

Pero estamos esperando a que crezca lo que he sembrado.

Quería fresas para merendar.

No te preocupes, Peppa.

La próxima vez que vengas, la semilla ya será una planta.

¡Y todos comeremos fresas!

Sí.

Vamos, Peppa.

Adiós, abuelito. Adiós, fresas.

Bocina

El abuelo cuida de la planta de fresas de Peppa.

Pasados muchos días,

el abuelo encuentra una pequeña plantita.

Día tras día, la planta va creciendo más y más.

Hasta que una mañana, el abuelo Pig encuentra algo muy especial.

¡Fresas!

¡Abuelito! ¡Hemos vuelto!

Peppa y George han venido a jugar otra vez.

¡Abuelito, abuelito! ¿Y mi planta? ¿Ha crecido?

¡Sí! ¡Mira!

¡Ohhh! ¡Ohhh!

¡Fresas!

(Ríe) (Ríe)

¡Gracias, abuelito!

Abuelo, ¿podemos sembrar algo más?

¡Sí! Pero ahora le toca elegir a George.

¡Sí! Elige tú, George. Elige... ¡zanahorias!

Abuelito, George quiere sembrar zanahorias.

George, ¿tú quieres sembrar zanahorias?

¡No!

¿Y sabes qué quieres sembrar?

George tiene claro lo que quiere sembrar.

¡Dinosaurio!

George quiere un árbol de dinosaurios.

¡Qué tonto, George!

Los dinosaurios no crecen en los árboles.

Ríen

¡Dinosaurio! ¡Grrr!

“HIPO”

Peppa, George, mamá y papá están desayunando.

Hace un precioso día de sol

y Peppa y George están deseando salir al jardín a jugar.

Mami, por favor, ¿podemos salir a jugar?

Podéis salir a jugar cuando os terminéis el desayuno.

¡George! ¡No bebas el zumo tan deprisa!

Hipa

George se ha bebido el zumo muy deprisa y ahora tiene hipo.

Ríen

¿Podemos salir a jugar ya, mami?

No mientras George tenga hipo.

Pero a George ya se le ha pasado el hipo.

¿A que sí, George?

De acuerdo, ya podéis salir a jugar.

Pero cuida de George.

Ríe. Ríe.

A Peppa y a George les encanta jugar en el jardín.

George, voy a lanzarte el balón y tú lo tienes que coger.

Hipa

George, para ya de hipar.

Hipa

¡George!

Ahora me lanzas tú el balón y yo tengo que cogerlo.

Hipa

¡George!

¡Caramba!, el hipo de George les está estropeando el juego.

George... yo sé cómo se cura el hipo.

Tienes que hacer lo que te diga.

Frótate la cabeza y la tripa a la vez.

¡Bien!, ya se te ha pasado el hipo.

Hipa

Parece que el remedio de Peppa no ha funcionado.

¡George! ¡Lo has hecho muy mal!

Sé otra forma de curar el hipo.

Primero tienes que saltar tres veces a la pata coja;

después mover los brazos arriba y abajo

y hacer pedorretas.

Y ahora, cerrar los ojos y dar tres vueltas muy deprisa.

Hipa

Esto tampoco ha funcionado y George sigue teniendo hipo.

¡Ya lo tengo! Para curar el hipo,

lo que hay que hacer es dar un susto.

George, voy a darte un susto.

Pero recuerda que sólo es un juego.

Lo hago para quitarte el hipo.

Acuérdate de que es un susto de mentira.

Llora

¡Peppa! ¡No deberías hacer el bruto con George!

Es pequeño.

Lo siento, solo estaba intentando quitarle el hipo.

¡A George se le ha pasado el hipo!

Aquí llega papá Pig con dos vasos de zumo.

¡George!, si bebes tan deprisa, volverás a tener hipo.

Yo no soy tan pequeña como George, puedo beber el zumo muy, muy rápido.

Hipa

Ríen

“BICICLETAS”

Hace un día precioso y soleado

y Peppa y George están montando en bicicleta.

¡Yupiii! (Ríe)

Qué calabaza más bonita, papá Pig.

Papá Pig está muy orgulloso de su calabaza.

Calabazas es lo único que sé cultivar.

Será porque me encanta la tarta de calabaza.

Vamos, George.

¡Danny, Suzy, Rebecca!

Peppa y sus amigos Danny Dog, Suzy Sheep y Rebecca Rabbit

montan en sus bicicletas.

George monta en su triciclo.

¡Qué despacito vas!

¡Una carrera hasta la calabaza de papá Pig!

Si vamos hasta la calabaza de papá,

debemos tener mucho cuidado para no chocar contra ella.

Papá se pondría muy triste, si la calabaza se rompiera.

No te preocupes, Peppa.

¡Empieza la carrera!

Peppa y sus amigos van hacia la calabaza de papá Pig.

¡Eh! ¡Cuidado con mi calabaza!

¡Gané!

¡Peppa! ¡Cuidado! ¡La calabaza de papá!

¡Ay! ¡Lo siento, papi!

Mirad a George, ¡qué despacito va!

George todavía monta en triciclo.

Tu bici también es de niña pequeña, Peppa.

¡Mira, si aún lleva ruedines!

Yo ya sé montar sin llevar ruedines.

¡Y yo!

¡Y yo!

¡Vamos a subir otra vez!

¿Vienes con nosotros, Peppa?

No, mejor me voy a quedar aquí.

¡Hasta luego!

Adiós.

A Peppa le gustaría no llevar ruedines en su bicicleta.

Papá, ya no quiero montar con ruedines.

¿Crees que puedes montar sin ellos?

¡Sí!

Está bien, Peppa, vamos a quitarlos.

Papá Pig ha decidido quitar los ruedines

a la bicicleta de Peppa.

¿Estás segura de que quieres montar sin ruedines?

¡Sí!

Pero no lo has hecho nunca.

Puedo hacerlo, sé que puedo.

Ríe

¡No tiene gracia!

Montar sin ruedines no es nada fácil.

¿Quiéres que te ayude, Peppa?

Sí, papi, por favor.

De acuerdo. ¿Preparada? ¿Lista? ¡Ya!

¡No me sueltes, papi!

Tranquila, te estoy sujetando.

Lo estás haciendo muy bien, Peppa.

¡No me sueltes, papi!

Tú sigue pedaleando.

¡Peppa está montando sola y sin ruedines!

¡Papi! ¡Me has soltado!

¡Llevas un buen rato pedaleando tú sola!

¿Ah, sí?

¡Sí! ¡Y se te da de maravilla!

¿De verdad? ¡Oh, puedo hacerlo sola!

¡Miradme! ¡Miradme!

¡Ya he aprendido a montar en bicicleta!

¡Danny! ¡Suzy! ¡Rebecca! ¡Mirad!

¡Ya no llevo losruedines, no los necesito!

¡Miradme!

¡Hurra!(Todos)

¡Os echo una carrera hasta la calabaza de papá!

¡Yupiii!

¡Peppa! ¡Cuidado! ¡Mi calabaza!

¡Voy a ganar la carrera!

¡Peppa no mira por dónde va!

¡Huy!

¡Oh, vaya! Pepa ha despachurrado la calabaza de papá.

Siento haber despachurrado tu calabaza, papi.

La calabaza da igual.

Lo importante es que tú estés bien.

De ahora en adelante, debes mirar por dónde vas.

Te lo prometo, siempre miraré.

Bien. En fin, ahora que la calabaza está rota,

puedo hacer una tarta con ella.

¡Me encanta la tarta de calabaza!

Y como la calabaza de papá Pig es tan grande,

podemos hacer una tarta enorme para todos.

¡Bieeeeen! (Todos).