Mientras el joven rey se dedica a descansar y a cazar, Chièvres y Ultrech son los encargados de gobernar Castilla. Nombramientos, favores y castigos que lo único que hacen es encrespar todavía más los ánimos de los castellanos. Su última ocurrencia tiene que ver con Fernando...
Padilla no está dispuesto a permitir que un extranjero mande en Castilla. Por eso intenta convencer a Fernando de que él sería el rey perfecto...El digno sucesor de Los Reyes Católicos
Pero Fernando no presta atención a los cantos de sirena. Sabe que ha de respetar la ley. Sus abuelos quisieron que Carlos fuera el heredero y él le prometió a Cisneros que no sería un obstáculo en la carrera de su hermano