¿Será porque la soledad en un reino extranjero ha unido a estos dos personajes? ¿Será porque el idioma, el francés, les hace sentir que por fin alguien les entiende? ¿Será porque ella busca el favor del nuevo rey para que su futuro esté garantizado? ¿Será por qué de verdad se han enamorado el uno del otro?
Mientras el joven rey se dedica a descansar y a cazar, Chièvres y Ultrech son los encargados de gobernar Castilla. Nombramientos, favores y castigos que lo único que hacen es encrespar todavía más los ánimos de los castellanos. Su última ocurrencia tiene que ver con Fernando...
Padilla no está dispuesto a permitir que un extranjero mande en Castilla. Por eso intenta convencer a Fernando de que él sería el rey perfecto...El digno sucesor de Los Reyes Católicos