El papa Francisco saluda sonriente a los fieles que le esperan. El mal tiempo ha provocado que se desplazara en avión al santuario, y no en helicóptero, como estaba previsto.
El papa Francisco besa a un niño durante su recorrido, que ha realizado en papamóvil.
La lluvia no ha sido problema para los fieles que se han congregado en el Santuario Nacional de Nuestra Señora de Aparecida.