Sinopsis
El ser humano, según Adam Smith, ha tenido una tendencia espontánea a realizar trueques y cambios, por lo que el propio Smith atribuye una cierta espontaneidad al surgimiento del Capitalismo. Esta fórmula sería sistematizada a lo largo del Siglo XVII. La decadencia del feudalismo y el auge de una burguesía vinculada a una incipiente y cada vez más rentable actividad industrial sentó las bases de un modo de entender el comercio que, con escasas variaciones, ha perdurado hasta nuestros días.
Durante décadas, el llamado Primer Mundo, garante y promotor del Capitalismo, ha vivido de espaldas a estas consecuencias pero la reciente Crisis económica ha puesto en cuestión un modelo que ya había demostrado su crueldad y su poder de devastación en los conocidos como países en vías de Desarrollo.
Tras un breve periodo de incertidumbre en el que los dirigentes de los países afectados por la brutal recesión, abogaron por recuperar el papel del Estado como garante de los derechos sociales y del Estado de Bienestar, los mercados volvieron a retomar el pulso de la situación proponiendo como solución a los problemas causados nuevos paquetes de las mismas medidas que los habían provocado.
INTERVIENEN:
Ignacio Ramonet, Director Le Monde Diplomatique;
Jaime Pastor, Profesor Titular de Ciencia Política UNED.
