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Las cartas a Theo son la fuente fundamental
para el estudio de la obra de Van Gogh.
Son más de 600 cartas que...
una relación epistolar que empieza Van Gogh en 1872...
también es cierto que escribe a otra gente,
a Van Rappard, escribe a Paul Gauguin, a Émile Bernard,
pero la regularidad con que escribía a Theo es impresionante.
En algunas ocasiones y temporadas
llegó a escribir más de una carta al día.
En estas cartas se rebela su pensamiento...
su pensamiento personal, su pensamiento religioso,
su pensamiento vital, pero también su pensamiento estético,
su pensamiento artístico, cómo va evolucionando.
Realmente sí puede decirse que su vida es una desdicha perpetua,
está plagada de momentos infelices, tristes, de insatisfacciones...
es una desdicha y, además, se inscribe en ese malditismo
característico de muchos artistas del siglo XIX.
Van Gogh nace en una localidad del norte de Brabante,
es hijo de un pastor protestante de la Iglesia Reformada.
Pasa sus primeros años de formación en internados, en pensionados y...
es una época que él recuerda como...
triste e inútil, por decirlo así.
Sus primeros momentos son, además... de tristes, indecisos, inseguros,
indecisos a la hora de encontrar un oficio... una meta profesional,
y tristes porque, realmente, él tenía...
un carácter tímido, introvertido, incluso huraño,
que acabará siendo un carácter totalmente asocial,
con una falta de sociabilidad... tremenda.
Esa búsqueda, esa constante insatisfacción por encontrar...
la verdad, la esencia de la pintura,
recorre toda su trayectoria, toda su vida, es decir...
nunca va a estar satisfecho.
En las cartas se ve que...
muchas veces está contento con sus cuadros,
pero siempre, digamos, la búsqueda es algo como insaciable.
Son cuadros de color... pardo, de color oscuro,
que reflejan ese interés que él tenía
y esa solidaridad con... la gente oprimida, con los pobres,
con los trabajadores, con los mineros,
con los campesinos, con los recogedores de patatas.
La producción de Van Gogh, la obra pictórica,
se desarrolla en la última década de su vida,
desde 1880 a 1890.
Son diez años, y es una década crucial en la plástica europea.
Puede decirse que, en esa década,
todavía campa la pintura impresionista en Francia,
puede decirse incluso que es el momento de la aceptación
y del triunfo de los impresionistas.
Cuando llega a París, en 1886, Corot, Millet, Daumier han muerto.
El panorama artístico de París ha cambiado.
Ahora son otros artistas los que se encuentran en alza:
Monet, Sisley, por ejemplo, Pissarro...
son artistas a los que va a poder conocer gracias a que su hermano,
Theo, trabaja en una galería y le va a proporcionar esos contactos.
Evidentemente, el contacto con el impresionismo le va a influir,
no puede sustraerse a la pintura... al nuevo estilo impresionista.
Pero uno de los grandes descubrimientos que tiene Van Gogh
es contemplar la obra de Georges Seurat y Paul Signac.
De esos dos artistas,
que inauguran el neoimpresionismo, el puntillismo.
Algo que, evidentemente, también le va a influir mucho.
Se ve en la pincelada,
en los pequeños toques de muchas de sus producciones en París.
En París, evidentemente, cambia la temática,
a los campesinos, a los mineros,
le sustituye ahora un nuevo ciudadano,
es el paseante de los bulevares...
es... bueno, también hacía paisajes,
paisajes urbanos, paisajes de los suburbios,
de los molinos de Montmartre, huertos, jardines...
y, también, se interesa por temas como los interiores de los cafés,
los comercios y, sobre todo, sus variopintos personajes.
Van Gogh nunca paró...
en su búsqueda por encontrar una pintura que le satisfaciera.
En esos diez años que dura su trayectoria,
el pintor siempre estuvo explorando, ensayando...
precisamente, para encontrar un estilo.
Empieza con los dibujos en 1880.
En París, a partir de 1886, encuentra el impresionismo,
varía el estilo, se ilumina y se hace más colorista,
descubre el color y una nueva técnica.
Pero en París... las relaciones con su hermano se hacen difíciles,
en París se decepciona, se desanima, se deprime...
considera que los artistas que conoce no son honestos,
no son buenas personas, no son religiosos, incluso.
Entonces, él lo que llega a escribir después es que, dice:
"para triunfar hay que ser ambicioso",
y él consideraba que la ambición era absurda.
Entonces, su nueva escala va a ser en la Provenza,
coge el tren, y en 1888 llega a Marsella.
Lo primero que le llama la atención es la luz,
el sol, el cielo, la atmosfera...
Se instala en Arlés y empieza una nueva temática, ahora más campestre,
de granjas, de prados, de canales, de huertos, de jardines,
de árboles, de flores, de frutos, de escenas, de naturalezas muertas...
en el que, poco a poco, va olvidando la realidad descriptiva
y va potenciando el color.
El amarillo se convierte...
toma carta de naturaleza en su pintura, recordemos "Los girasoles"
o todos los paisajes que tienen ese amarillo, amarillo brillante...
Utiliza el color, además, según el estado anímico,
con lo cual hace una manipulación... consciente,
una manipulación en esa búsqueda de intentar expresar las emociones.
Estamos en "Van Gogh Alive - The Experience",
la exposición multimedia más visitada del mundo.
Tras recorrer 40 ciudades, en cuatro continentes,
ha llegado por fin a España.
Primero visitó Sevilla, después Alicante y, ahora,
desde el pasado 26 de diciembre,
estamos en Madrid, en el Círculo de Bellas Artes,
donde permanecerá hasta el próximo 26 de febrero.
Aquí, en esta exposición,
podemos disfrutar de un sistema denominado "Sensory4",
desarrollado por la empresa australiana Grande Exhibitions,
en donde... 40 proyectores de alta definición,
3.000 imágenes y gráficos en movimiento y...
un sonido envolvente multicanal de calidad cinematográfica,
nos van a envolver en una experiencia inmersiva
tanto en el universo como en la obra de Van Gogh.
Lo que pretende esta exposición,
no es sustituir la visita al Museo Van Gogh de Ámsterdam,
sino el huir del concepto expositivo del museo tradicional,
que plantea un recorrido rígido.
Lo que nosotros pretendemos es que el visitante se sienta libre,
recorra la sala, se siente o, incluso, se tumbe,
y así disfrute del arte que le rodee
y, como digo, sea una experiencia de...
sumergirse dentro del universo del pintor holandés.
Este trabajo ingente de digitalización...
lo que nos aporta es...
una sobredimensión de la parte plástica del artista.
A través de estos pantallazos y de esta ampliación de los lienzos,
podemos ver la importancia del color,
podemos ver la aplicación matérica de la pintura, es decir,
cómo es generoso en aplicar la pasta,
cómo es densa,
cómo la aplica con una generosidad que deja incluso huella en el lienzo,
imprime una huella que se puede visualizar gracias a este montaje.
También se puede ver la evolución de su pincelada,
desde los toques puntillistas de su etapa parisina
hasta la pincelada ondulante, serpenteante,
característica de sus últimos cuadros,
de "La noche estrellada", por ejemplo.
Cuando visitemos la obra de Van Gogh en su museo,
o en sus museos, donde está representado,
no vamos a escuchar la música de Debussy, de Satie...
o la marcha fúnebre de un músico romántico.
Tampoco vamos a ver girar las estrellas en el cielo,
como ocurre aquí,
no vamos a ver cómo circulan los trenes,
ni vamos a ver cómo los cuervos revolotean por la sala...
saliendo del cuadro de "Los trigales amarillos".
En este sentido, hay que ver que esto es una experiencia interesante,
es una puesta en escena que gusta a grandes y a pequeños,
pero que está muy alejado de la contemplación de la pintura,
y esto no debe olvidarse.
Contemplar un cuadro, como ha visto la crítica reciente,
es dar una prevalencia fundamental al aspecto físico,
real, tangible, de un cuadro,
porque realmente ninguna manipulación digital o virtual...
puede, cómo diría, es decir, puede sustituir...
a la realidad física de una obra de arte.
Hay una frase...
que escribe Van Gogh en una de sus cartas a Theo,
que dice: "en el color busco la vida",
y creo que es significativa
del interés por el color que tiene en su época de Arlés,
creo que es significativa para entender muchas de sus obras,
cómo no, ese cuadro emblemático de la habitación del pintor,
su habitación en Arlés, un auténtico derroche de colorido:
de naranjas, amarillos, verdes, azules... en un espacio imposible,
con una perspectiva fragmentada o inexistente,
con una luz que no produce sombras,
con unas oblicuas que convierten... el cuadro o la composición,
en algo distorsionado, en algo alejado de la realidad.
Esto va a ocurrir, a partir de ahora, en toda su obra.
En Auvers-sur-Oise es donde realiza sus últimas composiciones,
ese cuadro premonitorio que es...
"Campo de trigo con cuervos", el campo de trigales.
Un cuadro que mientras realizaba...
también escribía: "en el trabajo arriesgo mi vida"
y, efectivamente, su demencia, su locura...
su creible capacidad de captar la realidad de otra forma,
le llevó a arriesgar su vida,
pero también cambió el rumbo de la pintura contemporánea.
¡Bang! (Sonido de un disparo).
Una de las líneas prioritarias para nuestra universidad es...
fomentar todas las actividades relacionadas con la investigación,
la trasferencia del conocimiento y la divulgación científica.
Y en este contexto se encuadra perfectamente
la revista Teoría y Realidad Constitucional.
Una revista, que no solo se hace eco de los grandes problemas
y desafíos que nos plantea la sociedad,
sino que, al hacerlo, cuenta con destacados colaboradores,
que no solo comparten su magisterio, sino que, además, nos ha permitido
que esta revista adquiera un sello de excelencia del EFQM
y tenga un reconocimiento
en los índices bibliográficos más relevantes.
El número ha salido estupendo,
pero no por el director, sino por el equipo de...
el subdirector, los secretarios, el vicesecretario...
que son unos magníficos profesores
y, además, por las colaboraciones,
que ha habido un aporte de colaboraciones de gran calidad,
entre las cuales hemos tenido que seleccionar,
porque no podíamos publicar todo lo que recibíamos.
Es un número de recomendada lectura,
y el que no tenga un ejemplar en papel, a mano,
puede entrar en la página web de la revista
Teoría y Realidad Constitucional
y, en abierto, tiene acceso a este número,
que es de lectura muy recomendable.
El monográfico versa sobre el Tribunal Europeo de Derechos Humanos,
que es una institución de tutela de los derechos fundamentales,
de las libertades esenciales de todas aquellas personas
que están bajo la jurisdicción
de alguno de los 47 Estados que forman parte del Consejo de Europa
y, concretamente, mi aportación en este número
han sido los casos piloto,
que es una técnica que utiliza el Tribunal Europeo de Derechos Humanos
desde hace relativamente poco tiempo,
para, a través de un único caso,
de una única sentencia, de una única decisión,
resolver un volumen, más o menos grande,
de casos que versan sobre la misma cuestión,
lo que el tribunal conoce como casos repetitivos.
De manera que, adoptando una sola sentencia, en principio,
se dota al Estado condenado de la solución que debe adoptar
para poner fin a la vulneración de derechos, en esos casos.
Se trata, este monográfico,
del primero de varios que se van a referir a la Unión Europea,
pero éste me parece que tiene un sentido más amplio,
puesto que va bastante más allá de las cuestiones meramente económicas.
Se refiere, ya digo, a un nivel de convivencia,
a un nivel de integración que empezó ya en 1946,
justo después de la Guerra Mundial,
y que se ha mantenido, hasta este momento,
a pesar de bastantes dificultades.
Yo creo que como juristas tenemos que congratularnos,
porque la revista Teoría y Realidad Constitucional
haya tomado la iniciativa de publicar un número monográfico
dedicado al Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
El material con el que hoy cualquier licenciado en derecho,
cualquier abogado, cualquier juez,
cualquier académico profesor de universidad,
trabaja en Europa en materia de derechos humanos,
no puede prescindir, en ningún caso, de la tarea del Tribunal Europeo,
del Tribunal de Estrasburgo, que lleva ya 50 años...
interpretando el Convenio Europeo de Derechos Humanos.
Lo que el tribunal hace...
tiene un impacto muy evidente en todos los Estados parte del sistema
y, por eso tiene todo el sentido del mundo,
que los que nos dedicamos al derecho prestemos una singular atención
a lo que el Tribunal de Estrasburgo hace,
precisamente, interpretando los derechos humanos.
Hoy es un día festivo para la universidad,
un día en el que celebramos la ciencia
y reconocemos el valor de la investigación,
y, al hacerlo, investimos doctor Honoris Causa
a dos personas especialistas
y de reconocidísimo prestigio en sus respectivos campos.
También investimos a los nuevos doctores y doctoras de la UNED,
que han logrado la consecución del más alto grado académico.
Y, finalmente, reconocemos la labor investigadora
de todos nuestros investigadores e investigadoras
de los grupos de investigación, de las cátedras internacionales,
de los centros de investigación de nuestros institutos.
Y, evidentemente, también,
no quiero olvidar a quienes hacen posible toda la parte administrativa,
que es el personal de administración y servicios.
En definitiva, hoy es un día de gozo, de festividad,
porque la universidad hace su gran celebración
a la ciencia y a la investigación.
¿Puede haber algo mejor que tener la oportunidad de elogiar
a quien para mí y para muchos de nosotros,
ha sido referencia insustituible
a lo largo de nuestra carrera profesional?
Desde luego, complicado no es, su trayectoria lo hace muy sencillo
y, además, me hace mucha ilusión poder hacerlo.
Esta universidad es para mí algo muy especial,
tengo parte de mi familia aquí
y, sobre todo, muchísimas amistades, compañeros...
y muchísimos años de trabajo,
así que yo, en cierta manera, ya formaba parte de la UNED,
pero hoy la UNED ha tenido la extraordinaria gentileza
de unirme a su claustro y, bueno, pues todo emocionado y feliz.
Se trata de una mujer científica de prestigio internacional
que abrió nuevas líneas de investigación
en diversas áreas de la catálisis.
Además, la profesora Maria Ziólek,
quien actualmente es catedrática de Química Inorgánica
en la Universidad Adam Mickiewicz de Poznań, en Polonia,
ha trasmitido el valor del esfuerzo y el conocimiento
como medios de progresar en la vida
a todos los discípulos y compañeros.
La lectura para un antropólogo es, ante todo, una práctica...
que constituye a los sujetos que la hacen.
Nuestra manera de ser quiénes somos
tiene que ver con las formas de leer que tenemos,
con cómo ponemos el cuerpo, con el gesto lector,
con los momentos de lectura, con las ocasiones de la lectura,
con si la lectura se comparte o no, y con una gran pregunta que es...
¿cómo entra el hecho de leer en el sistema de nuestras prácticas?,
¿cómo se relaciona, por así decirlo, con la vida cotidiana que tenemos?
Esa es la gran pregunta
que las antropologías o las etnografías de la lectura,
que queremos impulsar, se está haciendo.
Uno de los cambios más radicales que introducen las nuevas tecnologías,
las tecnologías digitales, es la interactividad.
Y eso impacta directamente sobre la textualidad y sobre la lectura.
¿Por qué?, pues porque la lectura ha dejado de ser sólo lectura,
en todo caso, es siempre lectura y escritura.
Es una nueva cultura de "red & raid", dicen los ingleses,
porque desde el mismo momento en que queremos leer en la red,
estamos obligados a inscribirnos en ella
a través de ejercicios escritores.
Con lo cual el "book", por ejemplo,
aparece como una herramienta fundamental de comunicación
donde uno es, al mismo tiempo, escritor y lector.
Y, en general, esto ha ido generalizándose
para toda la blogosfera.
Antes estaban bien separados los autores y los lectores,
los emisores y los receptores, los productores y los consumidores.
Ahora la red, sobre todo la Red 2.0,
que permite que exista tanto un diálogo
como una capacidad de creación muy sencilla,
porque todo el mundo tiene en su móvil una cámara de video estupenda,
un editor de textos, una serie de herramientas que...
si bien quedan limitadas a qué sabes hacer con ellas
y que tienen, a veces, unos espacios más reducidos,
permiten que todo el mundo pueda crear sus propios contenidos.
Al igual que tenemos que leer y escribir
como parte de una misma operación cognitiva,
en general, yo diría que hoy día estar en la red y existir en la red,
es ser prosumidor, es decir,
al mismo tiempo, producir contenidos para la red y consumirlos.
En esa medida, no sólo se ha desdibujado la separación radical
entre producción y consumo, sino, de manera más general,
ha aparecido una nueva manera de producir cultura,
mucho más vinculada a la idea del amateur o de la persona vocacional,
o la persona apasionada, que no necesariamente es un profesional.
Con esa distinción, la distinción canónica del siglo XX,
entre los escritores o los productores culturales
y los consumidores o los lectores, por otro,
se ha desdibujado enormemente
en muchos de los sectores de la producción.
Las escrituras y, en consecuencia, la lectura,
se han vuelto más personales, más individualizadas,
como el proceso de la vida social, en general,
que tiende a considerar al individuo
como la institución fundamental de la cultura.
Por tanto, las exigencias de hoy,
no sólo pasan por saber leer y escribir como antaño
para relacionarse con el mundo a partir de una alfabetización básica,
no basta con que uno sepa leer y escribir como cualquiera,
existe también la voluntad, por ejemplo, en la escuela,
de desarrollar las escrituras personales,
de que uno sea capaz no sólo de repetir algo o de interiorizar algo,
sino, además, de hacerlo suyo, de expresarse.
Y esa necesidad de expresión, por ejemplo,
la encontramos muy marcadamente en la red, hoy día,
con la voluntad muy firme de la gente que postea,
o que participa en foros, o que tuitea,
de tener una voz propia, de escribir de una manera particular.
Tenemos unas lecturas más fragmentadas, muchas veces en la red.
También tenemos vidas más fragmentadas, en mi opinión.
Fragmentamos desde nuestro día a día hasta nuestra narrativa vital.
Si bien hubo un momento en el cual...
la gente podía ver grandes bloques en su narrativa, en su vida,
ahora mismo creo que todo está muy fragmentado.
Esa idea perenne de la flexibilidad
y esa necesidad de estirar el tiempo hasta lo infinito
para que quepan todas nuestras identidades,
que hay que desarrollar todas y cada una de ellas,
ha llevado a una fragmentación que también se ve en la lectura.
Los cambios en nuestra manera de leer
son reveladores de otros cambios más generales
en el régimen cultural contemporáneo.
Cuando hablo de régimen cultural,
lo que quiero decir es que, en realidad,
nuestras prácticas no sólo vienen determinadas tecnológicamente
por los dispositivos nuevos que tenemos,
o, económicamente, por el acceso a la cultura
y el sistema de producción y distribución de los textos,
no es sólo eso, es algo que tiene que ver con...
en realidad, lo más íntimo de las disposiciones de lector
en relación con aquello que busca.
Es fácil entender que si la cultura, en su conjunto,
está sometida a estas trasformaciones, a estas mutaciones,
que han desdibujado los límites de la cultura letrada,
de la cultura legitima, y los han vuelto mucho más porosos
a la diversidad cultural y a las lógicas de la vida cotidiana,
nuestras lecturas lo reflejan también.
-¿Qué está usted leyendo?
-Pues, aquí, un libro de cocina de hacer dulces y eso.
-Si ese lo tiene mi madre también... -¿Sí?
¿Cómo son los lectores que siguen amando el libro material
y están lejos todavía de los dispositivos electrónicos?
Son un tipo de lectores que hemos llamado, en nuestra investigación,
en nuestra reflexión, lectores primigenios,
que viven en un entorno que lo hemos llamado, metafóricamente,
el entorno de Analogia.
¿Cómo son los lectores primigenios en Analogia?
Son un tipo de lectores que,
de alguna manera, subliman la relación con el libro,
tienen un vínculo de amor, no lo maltratan, saben...
son lectores que están en pequeños pueblos, tienen pequeñas bibliotecas,
pero saben perfectamente todos los libros que tienen,
saben lo que les ha podido ayudar cada uno de los libros,
saben incluso lo que les ha costado.
La idea de no maltratarlos,
y, en ese sentido, la humanización del libro
se expresa en que no les gusta doblar páginas,
que inmediatamente que llegan los libros a sus casas los forran,
que los tienen colocados con un tipo de cariño que va más allá
de la consideración de una materia sin alma.
Básicamente, en Analogia, hemos trabajado con dos personas,
una peluquera que se llama Ángela y un pastor que se llama Eusebio,
y hemos trabajado con sus dos bibliotecas.
-En vez de cubalibres, pues a mí me ha dado por esto, por los papeles.
Para cuando vaya a Ciudad Real, gastarlo en libros.
-¿Sí?, lo guardas ahí.
-Bueno, no, ahora lo tengo aquí,
pero lo escondo en la mesita, ahí entre los papeles y ya está.
-Yo, cuando dicen "el libro electrónico"...
sí, porque te los puedes bajar, es verdad, te puedes bajar...
todo y no te cuesta dinero, pero yo prefiero tocarlo.
Lo que más me gustaría es tener un sitio...
ves, por eso los tengo todos cerrados,
porque no me gusta tenerlos al aire.
-Lo que nos ha demostrado esta experiencia en Analogia
es que cualquiera puede sentir el amor intenso,
la gravitación de los libros, que decía Jorge Luis Borges...
resulta curiosa esa metáfora de la gravitación
que usa Jorge Luis Borges,
quizás, el lector más culto de la historia de la relación hombre-libro
con la relación de Eusebio con los libros.
Para Eusebio sus libros también gravitaban
y creaban un tipo de atmosfera que le construía...
exactamente igual que lo que había dicho Jorge Luis Borges,
aunque fuesen lectores tan diferentes en sentir la gravitación.
Hasta el punto que Jorge Luis Borges decía...
que él, siendo ciego, todavía le gustaba comprar libros
y seguía ampliando su biblioteca,
porque la presencia de la materia libro gravitando,
por una especie de osmosis,
se impregnaba en su cuerpo y llenaba de aura mágica su vida,
pues algo así pasaba con... en la distancia tan grande,
con Eusebio, el pastor de Abenójar.
Frente a lectores de Analogia,
que entienden que la relación con los libros precisa una digestión,
precisa una ritualización en el proceso de leer,
tranquilidad, mesura y digestión.
Para el caso de Digitalia,
la lectura está fundamentada en contactos múltiples con los libros,
lecturas parcializadas, lecturas fragmentarias,
lecturas que se lee un poquito y se rebotan inmediatamente
y, como en el caso de la alimentación,
los sociólogos de la alimentación han hablado de full contact,
para referirse a la nueva situación de la relación de los jóvenes,
sobre todo, con las comidas.
Si en el pasado, digamos, en un pasado culinario en Analogia,
una persona tiene cuatro contactos con la comida a lo largo del día;
el desayuno, el almuerzo, la comida y la cena,
en la modernidad culinaria en Digitalia,
uno puede tener 20 contactos con la comida, 20 full contact,
y uno puede tener 100 contactos con las letras,
con libros, con tuits, con facebook... 100 o 200 o 500,
y ante esto cabe la reflexión de decir...
"¿ya no se digiere la lectura?".
La experiencia de leer en pantallas
es distinta a la de la lectura en papel, eso es obvio.
No solamente, digamos, por los componentes...
sensoriales o táctiles de esa experiencia, sino, fundamentalmente,
por esto que el tropo fundamental de la web
señala al llamarlo "navegar".
Navegar significa, de alguna manera, dejarse llevar, perder el control,
no seguir un hilo necesariamente determinado
solamente desde tu capacidad lectora
y desde el guion que ya viene dado en el texto,
sino crear un texto, saltando o navegando, moviéndose...
en ese bosque de referencias textuales que es Internet.
Esa es una experiencia tremendamente placentera para mucha gente
y tremendamente desafiante, la primera vez que la has hecho,
esa lectura hipertextual, pero...
también conlleva los temores o las ansiedades de perderse...
en un marasmo sin referencias,
esa especie de sensación de autoabandono
que a veces tenemos cuando estamos leyendo de esa manera.
Hemos pasado de un texto plano
a un texto, que a mí me gusta decir, poliédrico,
poliédrico y, además, no lineal.
En este sentido, en realidad los textos que ahora leemos,
que pueden ser también audiovisuales, por ejemplo,
o en imágenes, o de otro tipo,
acaban de hacerse, acaban de escribirse con la mirada del lector,
porque es el lector el que va a decir cuál es el orden,
dónde empiezan, dónde acaban, cómo navegan.
En este sentido, vamos a viajar por ese hipertexto
y cada texto va a ser distinto dependiendo de ese lector,
porque los viajes posibles empiezan a ser infinitos.
Si hablamos de nuevas formas de lectura,
es inevitable hablar de las nuevas formas de producción del libro
y, en particular, del negocio editorial.
Las nuevas formas de edición, vinculadas con la red,
han traído consigo toda una revolución
por el abaratamiento de costes,
por la multiplicación de posibilidades y, sobre todo,
por la multiplicación de los actores que realizan esa mediación,
digamos que hay una pérdida de poder de mediadores tradicionales,
hay un debilitamiento y una precarización
de parte del tejido industrial y económico
que estaba vinculado a la distribución del libro en papel,
y ahí, la irrupción de grandes actores
como pueden ser, hoy día, las plataformas digitales,
como son los buscadores, como puede ser Google,
como puede ser Amazon, con la distribución on-line, etc.,
de modo que hoy día asistimos a un mundo digital de edición
que es tremendamente complejo, económicamente, tecnológicamente,
pero que también ofrece múltiples posibilidades
de imaginar nuevas formas de circulación del texto.
La posibilidad de que todo el mundo pueda acceder a ciertos contenidos
y pueda producir, pueda emitir mensajes, pueda escribir...
nos lleva a nuevas lógicas,
en las cuales deja de ser patrimonio exclusivo de algunos
la posibilidad de emitir mensajes,
de decir "esto se publica y esto no se publica",
y se democratiza, o eso parecía, la posibilidad de hablar,
y eso es cierto, todos podemos hablar en la red,
sin embargo, no todos vamos a ser escuchados, por varias razones:
la primera, porque no se puede oír a todo el mundo;
la segunda, porque, probablemente,
ni siquiera te interese escuchar a todo el mundo;
y la tercera, porque, realmente, lo que uno ve
y lo que a uno le llega en la red no es ajeno, tampoco,
a ciertas manipulaciones...
que tienen que ver con dónde vamos a ver las cosas y porqué.
Si tú consultas un término en un famosísimo buscador,
probablemente, tus resultados y los míos,
sean ligeramente diferentes o muy diferentes.
En la red hay mucho texto y hay muchos textos,
hay mucha letra y hay mucha imagen,
y hay muchas combinaciones posibles que suponen otros lenguajes,
que requieren otras habilidades para leer
y para poderlas... no sólo decodificar, sino...
principalmente, hacer una lectura crítica de las mismas
y entender qué es lo que nos están planteando, quién y porqué.
Si, se supone, que la alfabetización es aquello
que nos lleva a poder interactuar con el mundo
y a poder ser ciudadanos y ciudadanas libres,
y que puedan participar de la construcción de la realidad,
no podremos hacerlo si...
no somos capaces de manejarnos en esos entornos digitales,
pero, además, de manejarnos de manera crítica.
Hay un término que apareció
y al que se le siguen dando muchas vueltas,
que es el de "los nativos digitales".
El problema es que se ha supuesto que ser nativo digital,
que básicamente era una cuestión de tanta edad tienes,
naciste con pantallas, si, no, pues entonces eres nativo digital,
se ha llevado a creer que un nativo digital comprende...
o sabe, o puede leer críticamente el mundo en el que vive,
y eso no es así, es una falacia.
El pensamiento crítico es la parte más básica
de esa lectura crítica del espacio de los medios,
y no basta con saberse manejar o mover por una interfaz.
Los que auguran la muerte del libro como materia,
los que auguran que Analogia desaparecerá,
entienden que todas las lecturas y todos los lectores
se decantarán hacia lo digital.
Esa pérdida que entendemos,
nos lleva a pensar que los placeres y las utilidades
de los dos modos de leer y relacionarse con las lecturas
deben caminar, pues la acción pública y política, hacia la suma.
No hay que pensar que...
un tipo de libro tiene que estar en combate con el otro,
un tipo de lectura en combate con la otra, sino sumar.