Domingo a las 09:15 horas
Durante los últimos siglos, si quieres,
la mujer judía nunca ha sido analfabeta
en comparación con el resto del mundo.
Fue algo muy especial.
Entonces, también hablamos de un país superjoven,
de menos de 70 años, tiene toda esta tradición
que las mujeres son parte de los textos,
son parte de la cultura, son parte de la educación.
El otro lado es un lado superinteresante,
aunque muy diferente.
La mujer judía, la mujer israelí, no la mujer judía,
fue crecida con un básico de socialismo.
Los pioneros que han venido a Israel durante todo el siglo XX,
todo el principio del siglo XX, han llegado de Europa central,
de Rusia, Polonia,
y la histórica imperio austrohúngaro.
Entonces, estos pioneros eran socialistas
y las pioneras también.
En el socialismo, la igualdad era un motivo superimportante
y las mujeres tenían
los derechos y también los deberes iguales como los hombres.
Tenían que dejar su casa, tenían que trabajar fuera,
participar en la agricultura, en todo,
en construir el nuevo país de Israel.
Entonces, de esto también nació una mujer nueva,
una mujer que ve su vida,
sus posibilidades son casi iguales que los hombres.
Digo casi iguales, porque siempre hay que decirlo.
La situación no es una situación ideal
y hay muchos cosas que hacer,
hasta que lleguemos a la igualdad total.
El ejército israelí es algo obligatorio.
Todo el mundo cuando llega a 18 años entra al ejército.
Las mujeres no participan durante tres años, sino dos,
y los hombres tres años,
pero el ejército es parte de lo que para cada uno de nosotros
su futuro redes sociales.
En el ejército, mucha gente conoce mucha gente,
la gente del sur conoce a la gente del norte, este y oeste,
la gentes de las grandes ciudades
conoce a gente de los pequeños pueblos.
Sirve para todo el mundo,
después para su entrada a la economía israelí, al mercado.
El hecho de que las mujeres también sirvan en el ejército
les da la igualdad básica
como a los hombres.
Por esto, sirve también para su contacto, para su conocimiento
y para sus amigos del futuro.
La situación de que las mujeres se quedan en casa
cuando los hombres van a la guerra o a la ejército o conflicto
es una situación que compartimos en todo el mundo,
y no es por esto una grande sorpresa
que, aunque no podemos ver de una manera positiva,
nadie de todas las guerras mundiales.
Han servido para la salida de las mujeres fuera de la casa,
porque en Inglaterra, casi del 80 % de los hombres
tenían que salir de casa para luchar contra los nazis.
Las mujeres tenían que entrar al mercado del trabajo.
Israel fue creciendo
entre diferentes guerras y conflictos.
Nosotros tenemos hoy en día vecinos que son amigos,
tenemos un acuerdo de paz con ellos.
Por ejemplo, Egipto y Jordania,
y tenemos también vecinos
que estamos en una situación de guerra con ellos,
aunque no estamos en una guerra cotidiana.
Por ejemplo, Siria y Líbano,
y tenemos conflicto actual con nuestros vecinos palestinos.
Entonces, esta situación tiene mucha influencia
a toda la sociedad israelí, y todas las mujeres también.
Las mujeres participan en esta situación
porque participan en el ejército,
pero las mujeres también tienen que apoyar
a los hombres que tienen que ir.
Si pasa una guerra o un conflicto o una ola de violencia,
las mujeres tienen que estar ahí protegiendo su casa,
protegiendo la economía israelí, protegiendo la sociedad.
Entonces, es parte de nuestra vida.
Las mujeres israelíes, por todo el movimiento sionista,
jugaban un papel superimportante,
y por esto no es una sorpresa que las mujeres israelíes
tenían, por ejemplo, organizaciones de mujeres
u organizaciones para apoyar los derechos de las mujeres.
Casi 10 o 20 años antes
del mundo más occidental,
antes de Inglaterra, por ejemplo, antes de Europa occidental.
Entonces, las primeras organizaciones
específicamente para apoyar a las mujeres,
para avanzar con los derechos de las mujeres
fueron establecidas en 1904.
Hablamos de muchos años
antes de que las mujeres en Europa
tuvieran derecho para votar.
Ya las mujeres israelíes o las mujeres sionistas
tenían organizaciones específicamente para las mujeres.
Israel, en el minuto que nació Israel,
nació con una democracia total, es decir,
que en las primeras elecciones ya han votado todas las mujeres.
Ahora, también nosotros teníamos una primera ministra mujer
y bastante importante.
Teníamos ministras mujeres
y tenemos hoy en día
la representación más alta de mujeres en el Congreso israelí.
La mujer israelí, en comparación con el mundo occidental,
todavía está casada en edad bastante joven.
Hablamos que la edad media para matrimonio
sea alrededor de 26 años.
La mujer israelí,
sea la mujer israelí judía o la mujer israelí árabe o rusa,
tiene más hijos que la mujer en el mundo occidental.
Hablamos de una cifra
casi tres niños por familia.
Pero tenemos un proceso,
como todo el mundo que cada año
la edad del matrimonio o la edad de tener hijos
convierte en más y más arriba, si lo puedo decir, más tarde.
Israel vive una situación superinteresante
que pienso que tiene que ver también con España.
Vivimos una sociedad que en un lado es sociedad moderna,
el mundo de la alta tecnología,
las mujeres entran al mercado del trabajo,
tienen que trabajar muchas horas,
cosas que están en contradicción con la familia.
En el otro lado, tenemos todo el estar influencia de la tradición.
La familia se queda igual como en España,
algo superimportante en la vida de una persona.
Parte de su identidad, por supuesto de las mujeres israelíes.
Entonces, hoy en día vivimos esta contradicción.
Por otro lado, las mujeres entran, entran por todo,
al mundo de los médicos, abogados,
directores, lo que sea.
Por otro lado, quieren cuidar a su familia
y vivir esta ambivalencia hoy en día.
Por eso, quería comentar que sí hay mucho que hay que trabajar.
En el mundo occidental ha cogido la revolución feminista
una dirección extrema.
¿Por qué es una dirección extrema?
Porque se dice que la mujer tiene que funcionar perfectamente
en un mundo cuyas normas
son normas de los hombres.
Entonces, si tú miras, por ejemplo, las horas de trabajo en España,
que es muy interesante todo el debate que hay sobre esto hoy en día,
las horas de trabajo en España son casi imposibles.
No digo para una pareja tener hijos
y ver a estos hijos, no solamente en fines de semana,
no solamente en domingo,
porque se obliga a la gente a salir de su casa antes de las nueve
y volver a las ocho.
No son horarios que puedas tener hijos
que van a conocerte al mismo tiempo.
Pasa igual para Israel.
Ahora, ¿cuál que es el paso que vamos a ver
si las mujeres van a entrar de verdad en el mercado de trabajo
y también tener una influencia sobre este mercado?
Una persona puede ser superefectiva,
puede trabajar
con las mismas obligaciones, necesidades,
que tiene un trabajo importante, influyente,
durante ocho horas al día.
Y volver, preparar la cena o no, su marido va a preparar la cena,
y cenar con sus hijos por la tarde
y bañarles y ayudarles con los deberes.
Esto es lo que va a pasar, pienso, en el mundo occidental,
ojalá en la década siguiente.
La mujer israelí es una mujer superoccidental.
Ve su futuro abierto, no ve ningún reto
que ella no puede pasar,
aunque tenga estos retos.
La mujer israelí es una mujer que busca su vida,
sin pensar en su género.
Está buscando en su vida, quiere cumplir todo,
tener la familia completa,
mantenerse romántica con su pareja,
quiere entrar al mercado de trabajo
y llegar lo más lejos posible.
Quiere tener todos sus amigos y toda su vida social.
La mujer israelí entra a la universidad
y sale normalmente no máster, sino con el doctorado.
Está muy avanzada en su imagen a ella misma.
Esto es algo positivo.
La mujer israelí no piensa ni por un minuto
que no es igual a los hombres,
aunque la realidad puede ser un poco diferente.
Es muy difícil hablar de una mujer israelí,
pero como el resto de la sociedad israelí
tenemos una mezcla total del sur y norte, este y oeste.
De la fiscal norte con Europa central,
de Francia con Estados Unidos,
de Medio Oriente igual que Etiopía.
La mujer israelí es un perfil o es un puzle
de toda esta mezcla de la sociedad israelí que tenemos.
La buena cosa que hay que decir sobre todo de este puzle
es que las mujeres tienen, según la ley y según la sociedad,
derechos iguales.
Toda esta mezcla y todo este puzle de las mujeres
pueden entrar a la sociedad y ganar su vida.
Por esto, es muy interesante,
voy a dar un ejemplos pequeñito de la minoría árabe dentro de Israel.
Las mujeres árabes participan más en el mercado de trabajo
si miramos los por cientos,
en comparación con el hombre árabe,
que las mujeres israelíes en comparación con el hombre israelí.
Las mujeres ultraortodoxas, por ejemplo, participan más,
no en comparación, participa más en el mercado de trabajo
que el hombre ultraortodoxo.
Entonces, quizás tenemos ahí un puente, si queréis,
para la igualdad entre mujeres y hombres.
Guía a estas diferentes mujeres de la minoría.
El rol de la mujer en la sociedad es uno de los que ha sufrido más transformaciones en los últimos años. Este domingo, conoceremos de la mano de Hamutal Rogel Fuchs, Portavoz de la Embajada de Israel en España, cómo es y cómo vive la mujer israelí.