'Héroes invisibles' es una serie documental cuyo protagonista es un español que abandonó su cómoda vida en España para intentar mejorar las condiciones de los más desfavorecidos en el extranjero. Violencia, narcotráfico, inmigración, terrorismo o pobreza extrema son algunos de los temas que se retratan en los diferentes destinos: Kenia, Camboya, Honduras, Mauritania, México, Costa Rica, Jordania, Nepal, India, Mediterráneo Central, el Líbano, Etiopía, Ecuador, Estados Unidos, República Dominicana y Zambia.
La serie de documentales está dirigida por Víctor Cerdán y cuenta con los reporteros, Merche Forner, Omar Razzak y Tábata Peregrín, y con los operadores de cámara, Elena Fernández y Alberto González. Un equipo con larga experiencia en la elaboración de este tipo de documentales bajo la dirección de producción de Marta Manzano y la producción ejecutiva del periodista y escritor Manuel Cerdán.
(CANTAN)
(Cánticos)
(ORAN EN SU IDIOMA)
(ORA EN INGLÉS)
Bueno, soy José Mari, soy jesuita y hace 2 años,
más o menos, hablando con una voluntaria
que pasó un tiempo en Battambang,
me contó que es una historia donde pensé:
"Esto hay que contarlo", pero, por ser una historia
que cualquiera de nosotros encontraría ecos de su propia vida.
No se trata, simplemente, de conocer relatos
sobre vivencias de gente
que no encuentras tan tremendas como el del camboyano,
atravesado por una guerra civil de 20 año, pasó por la mutilación,
por la guerra, por el exilio
y, después, encontró esperanza y respuestas y, bueno,
uno lo admira desde lejos, pero, en el fondo es una enseñanza
sobre la capacidad de la gente buena para hacer el bien,
pero, no la gente heroica, inhumana o espectacular
o especial, yo, como otras personas,
tenía mitificado a Kike,
oí hablar de él, lo he visto en sillas de ruedas
y, en ese sentido, había una sana y real admiración y, ahora,
eso no ha desaparecido, sigue siendo igual,
pero, lo que da el pasar 7 semanas con una persona,
verlo en el día a día con personas
con las que trabaja, las que cuida, pues te das cuenta
de que no es un superhéroe, sino un héroe más cotidiano.
Ver en lo que se esfuerza en dejar una huella buena.
(EMITE SONIDOS PARA COMUNICARSE)
(SE COMUNICAN POR SIGNOS)
(EMITE SONIDOS PARA COMUNICARSE)
Una cosa que, para mí, es muy significativa,
cuando Kike habla con una persona,
un niño pequeño, por ejemplo, y aparece otra persona,
Kike no deja de hablar
con el niño pequeño para atender al mayor,
porque Kike considera que cada persona es especial
y cada persona merece ese trato,
entonces, él no trata a unos por encima de otros
y para mí es bastante especial, ¿no?
Y creo que es un poco en torno a lo que gira
la historia de Kike en Camboya, el hacer ver que la gente,
a pesar de su situación difícil, en un país pobre,
y Kike les hace ver que todos son igual de valiosos
y ellos son válidos, capaces
y conseguirán cualquier cosa en la vida.
(CANTA)
(Aplausos)
(EMITE SONIDOS)
(Música)
(Aplausos)
(HABLA EN SU IDIOMA)
La primera vez que vi yo a Kike fue en aquel pasillo de allí,
ya vino a saludar: "Oye, tú eres nuevo", y tal.
Y mira, aquí pusieron todas las orlas.
-Aquí estamos, mira.
-Ahí estamos, sí.
Mira, ahí está, mira, ah, sí, ahí arriba está Kike,
¿lo ves?, ahí en la quinta fila.
Y, luego, yo estoy ahí arriba.
Los jesuitas siempre nos abrieron los ojos al mundo
y, aunque estudiamos en un momento
de que España, las libertades eran distintas a las de ahora,
nosotros en el colegio siempre tuvimos acceso a todo
y nos estimularon para pensar y hablar de todas las cosas.
Y a tener amplitud de miras, inquietudes y ahí es donde nació
la vocación de Kike y sintió la llamada del sacerdocio
y se quiso hacer jesuita y lo llevó muy en secreto.
-Sí, muy en secreto.
Kike siempre fue un niño muy alegre,
muy simpático, jugaba él solo, así de su cosecha,
después, ya jugaban a que él era un sacerdote
y que venía y a los muñecos de Ana los bautizaba
y les ponía,
bueno, nombres, este muñeco se llama Pepito
y Pepito venía y todos a adorar a Pepito.
A mí, no me pareció mal,
pero, a su padre no le entusiasmó la idea.
(HABLAN EN INGLÉS)
(HABLA EN INGLÉS)
(HABLA EN INGLÉS)
(HABLAN EN INGLÉS)
(HABLA EN INGLÉS)
(Sonidos de radar)
(HABLA EN INGLÉS)
(HABLA EN INGLÉS)
(HABLA EN INGLÉS)
La eliminación de las campañas de donación
y la enorme cantidad de minas antipersonas en el país,
hicieron que hubiese una enorme cantidad de casos
de mutilados de mina y de gente con polio.
Entonces, cuando Kike entró en Camboya,
vieron que una de las principales necesidades del país,
era ayudar a gente con esas discapacidades.
Así empezó. Creó el centro Banteay Prieb,
que aloja a gente con discapacidad, les dan formación profesional.
Fabrican las sillas Mekong,
específicamente diseñada para Camboya.
Barata y que se puede usar en los caminos complicados.
Todo alrededor de la gente con discapacidad.
(HABLA EN INGLÉS)
(HABLA EN INGLÉS)
(Suena un claxon)
A ver si lo encontramos a la primera.
A ver.
En 2013, el equipo Outreach conoció a un chico
que se llama Chen, que acababa de tener un accidente de mina.
Como consecuencia del accidente, perdió las dos piernas.
Entonces, se vio que necesitaba una silla de ruedas.
Desde el 2013, se le ha ayudado con las sillas.
El trabajo del equipo fue visitarle,
preocuparse por él, hablar con la familia,
hacerle muchísimo seguimiento.
Y ahora va al colegio, tiene muchos amigos
y está superfeliz.
Chen estará supercontento
de que le hayamos arreglado la silla.
A ver.
A ver.
(HABLAN EN CAMBOYANO)
Va fenomenal.
(HABLA EN CAMBOYANO)
(HABLA EN CAMBOYANO)
(HABLAN EN CAMBOYANO)
La primera vez que conocí a Kike, que vine a Camboya,
que conocí todo lo que había hecho, aluciné.
No me cabía en la cabeza que en 30-35 años
que lleva en Camboya, cómo una persona
podía haber hecho tantas cosas.
Es alguien a quien admiro mucho. Tiene una energía,
una alegría, una paciencia que he conocido
a pocas personas en mi vida así.
En el proyecto de Outreach, trabajan,
más o menos, 20 personas. Cuatro con discapacidad.
Que esto es el ejemplo de lo que quiere conseguir
el proyecto, que es que todo el mundo tenga un trabajo
y ayude, sea discapacitado o no.
(HABLA EN CAMBOYANO)
El trabajo del equipo de la Prefectura apostólica
de Battambang es sobre todo de acompañar a las familias.
Nos montamos en el coche todos los días,
nos vamos de pueblos, conducimos una o dos horas
y llegamos a la familia. Es mucho de acompañamiento,
de visita. Una vez que conoces a las familias
en cuando de verdad te cuentan los problemas que tienen,
cuando de verdad les puedes ayudar.
Ese trabajo es fundamental.
(HABLAN EN SU IDIOMA)
(HABLAN EN SU IDIOMA)
Les damos una vivienda, toda la comida,
financiamos la educación, todo el material escolar
para poder ir a la escuela, las clases extra,
clases de inglés, deportes... Y son niños que normalmente
vienen del proyecto de Outreach,
que va integrando cada vez más familias y en esa búsqueda
de nuevas familias de vez en cuando se encuentra
una familia con un niño discapacitado.
Y si reúne las condiciones adecuadas,
se le incluye en el centro.
El centro de salud de Pet Yei Chi fue fundado
en 1905 por las Hermanas de la Providencia.
Con la llegada de los jemeres rojos al poder,
la dirección del centro de salud
tuvo que ser cedida a los jemeres rojos.
Estos jemeres rojos que se instalaron en la zona
aprendieron todas las técnicas de las hermanas
y finalmente las asesinaron.
A día de hoy es un día principalmente de acogida
a enfermos sin recursos y a personas desamparadas.
Y además damos apoyo a familias con miembros de SIDA
en diferentes pueblos de la zona.
(HABLAN EN SU IDIOMA)
¿Qué tal, guapa? -Bien, ¿y tú?
Muy bien.
Tenemos otros casos como niños que han sufrido accidentes
de coche. Por ejemplo, tenemos una niña que acaba
de entrar y era una niña sin discapacidad
pero andando por la calle un día fue atropellada.
Que lo tome 3 veces al día con el estómago lleno.
Vale. (HABLAN EN SU IDIOMA)
(HABLAN EN SU IDIOMA)
El proyecto de Obrum es un proyecto de educación
en pueblos remotos. Obrum es la palabra camboyana
que significa "educación".
Es un proyecto que nace como una extensión
del proyecto de Outreach. Cuando en las visitas
que Outreach hacía a familias con discapacitados
en pueblos remotos, se detecta una falta de escuela.
Y a la vez un interés por parte de las familias
de esos pueblos, de esas zonas remotas
en que sus hijos estudien.
A raíz de eso se crea este equipo
que en los últimos 8 o 10 años aproximadamente ha creado
16 escuelas de educación primaria.
El proyecto Obrum, por tanto, está focalizado
principalmente en un valor que para Kike
y para todos los que trabajamos aquí es fundamental,
que es la educación.
(CANTAN EN SU IDIOMA)
Lo que queremos hacer es darles esas herramientas,
esas armas, esas posibilidades y que ellos, que son
quienes conocen el país y sus necesidades,
las implementen y desarrollen y saquen adelante el país.
Y yo creo que eso es lo que hacemos en Obrum:
construimos una escuela pero no damos clase.
Los profesores son locales que dan el temario local,
establecido por el gobierno que es el que se da
en todas las escuelas públicas del país.
La labor de todos los proyectos que hacemos va más allá
de la mera educación.
Yo creo que Kike insiste mucho en la importancia
del acompañamiento. Nosotros no damos clase,
pero venimos a los colegios diariamente.
Es importante venir y hablar con los profesores,
hablar con los alumnos, entender qué es
lo que necesitan. Entonces, muchas veces
la ayuda o el acompañamiento que hacemos va más allá
de la mera educación, ¿no? De los servicios de educación.
(HABLAN EN SU IDIOMA)
(HABLAN EN SU IDIOMA)
(Música)
Los Jemeres Rojos, básicamente, eliminaron cualquier cosa
que tuviese que ver con la vida moderna,
con la ciencia, la tecnología, la educación.
Mataban a los profesores, mataban a los médicos
o los echaban del país. A los que no mataban, se iban.
Todo lo que no fuese la vida del campo,
había que eliminarla.
Era una de las creencias de los Jemeres Rojos.
Lo que tenía que ver con la medicina moderna desapareció,
en concreto, las campañas de vacunación.
Volvió a aparecer la polio y hubo muchos casos de polio.
(HABLA EN INGLÉS)
(Voz en otra lengua)
(HABLA EN INGLÉS)
(HABLA EN INGLÉS)
(HABLAN EN INGLÉS)
(HABLAN EN INGLÉS)
(Piadas de pájaros)
Mi tío vino a Camboya en los 80, antes de que yo naciera.
Mi primer recuerdo que tengo con mi tío es él con camboyanos.
Entonces, yo conozco cómo Camboya era parte de su identidad,
cuando yo le conocí, y crecí con esa noción.
Entonces, yo he tenido la suerte, yo lo considero un privilegio
de haber crecido en España con una noción,
un conocimiento muy directo de una realidad
que no cabe en la mente de muchas personas
con las que yo he crecido. Y todo gracias a mi tío.
El tribunal en el que estamos es
el Extraordinary Chambers in the Courts of Cambodia,
tribunal híbrido entre el Tribunal Internacional
y el Ministerio de Justicia Camboyano,
que lo forman en 2007 para juzgar los crímenes de guerra
de los Jemeres Rojos en Camboya entre 1975 y el 79.
El primer caso fue el de Iew, el que era el director
de la prisión conocida como S-21 o Tuol Sleng.
(HABLA EN SU LENGUA)
(HABLA EN SU LENGUA)
(HABLA EN SU LENGUA)
(HABLA EN SU LENGUA)
(HABLA EN SU LENGUA)
(HABLA EN SU LENGUA)
Y Chum Mey en el juicio estuvo cara a cara
con el que fue su torturador, digamos, el director del S-21,
Kang Kek Iew. Entra dentro de la idea
de este juicio confrontar la historia,
de reconstruir un país.
(HABLA EN SU LENGUA)
(Murmullo)
(Aplausos)
-El libro que sobre esta historia maravillosa, de Kike Figaredo
y su presencia en Camboya, escribió José María Rodríguez Olaizola,
se llama "El corazón del árbol solitario".
Y detrás de esto hay una bonita historia.
-El árbol solitario, es real, existe,
está en un arrozal, es una metáfora que identifica
la labor de Kike y de otra mucha gente.
Por una parte, hay un punto de soledad que forma parte
de todas las vidas, de la del cooperante, del obispo;
pero echa raíces en una tierra, y en esa tierra te comprometes,
estás y permaneces. Entonces, esa metáfora
y ese encuentro en un país donde la vegetación es exuberante,
encontrarse un árbol solo es muy llamativo.
Ahí está contado cómo Kike lo encuentra
recorriendo el país y cómo lo va visitando, ¿no?
Y transmitiendo esa mística.
La idea es que todos somos árboles solitarios.
Kike Figaredo, apodado como "el obispo de las sillas de ruedas" en su labor humanitaria en Camboya. Uno de cada 250 habitantes está mutilado por las minas antipersona y los accidentes de tráfico.
Kike Figaredo, apodado como "el obispo de las sillas de ruedas" en su labor humanitaria en Camboya. Uno de cada 250 habitantes está mutilado por las minas antipersona y los accidentes de tráfico.
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Gracias por mostrarnos que cada persona puede ayudar a transformar la realidad y por animarnos a no desfallecer aunque las condiciones sean adversas. Gracias por dedicar amor, esfuerzo y sonrisas y por reavivar la esperanza en un mundo cada vez más justo.
Una persona admirable, una labor admirable por una gente que se merece vivir en paz y vivir mejor. Gracias por abrir una ventana a esta gente que lucha por un mundo mejor,...gracias a personas como kike figaredo, vicente ferrer, y a todos los misioneros y voluntarios porque son la voz de otros, que, sin ellos, no tendrian esa oportunidad pero sobre todo, porque nos permitis volver a creer en el ser humano y su capacidad, convuestra generosidad, alegria y sabiduria.