En la filmación de películas
de animales...
...hay que resolver muchas veces
las cosas sobre la marcha.
Se presentan problemas
que no están previstos...
...en las técnicas
de la cinematografía normal.
Resulta apasionante trabajar
con los ingeniosos operadores...
...con los técnicos cinematográficos
Estábamos tratando de adaptar
una cámara sencilla...
...para la filmación subacuática
en un río de montaña.
Un cristal, un buen pegamento
y un armazón metálico...
...construido por el herrero
del pueblo próximo...
...nos iban a permitir resolver
el problema muy lejos...
...de cualquier gran ciudad
donde nos hubieran podido dotar...
...de un material más sofisticado.
La verdad, es que toda esta historia
había comenzado unos meses antes.
Era un historia en la que íbamos
a averiguar de una vez para siempre
...matices de un determinado animal
que raramente habían sido observados
...por el ojo humano.
Empezó a la aventura en la isla
de Cabrera.
Navegábamos una horrorosa mañana
de primeros de marzo...
...con un mar verdaderamente fuerte
para tratarse del manso Mediterráneo
Cada uno de los miembros
de nuestro equipo...
...se ocupaban de sus cosas.
Rafael Onieva, el fotógrafo,
cumplía ese día años.
Joaquín Araujo,
el ornitólogo del grupo...
...tomaba notas infatigablemente
mientras uno...
...de nuestros colaboradores
no podía aguantar el mareo.
Para el equipo
de El hombre y la tierra...
...estas cosas son frecuentes,
largos viajes, por tierra y por mar
...hasta llegar a los puntos
donde vamos a trabajar.
Y mientras tanto, unos piensan,
otros miran...
...otros preparan el material.
Todo el mundo trabaja.
El ornitólogo evidentemente
mirando a todas partes...
...descubrió un pájaro en el mar.
Hay tantos pájaros en el mar,
podía ser seguramente, un cormorán.
Observando con más detenimiento
al pájaro...
...comprobamos que era
un pobre náufrago...
...un pollo joven de cormorán
totalmente calado...
...que en aquella mañana fría
estaría condenado a morir...
...si no conseguíamos salvarle.
Joaquín, además,
de un buen ornitólogo...
...es un excelente nadador
y desafió sin la menor vacilación...
...en el frío del mar
y la bravura de las aguas...
...en aquella mañana
del mes de marzo.
Todos estábamos pendientes
por el desenlace de la aventura.
El payés que conducía
esta embarcación...
...en el subarchipiélago de Cabrera
puso la nave en condiciones...
...de que nuestro bravo naturalista
trajera su trofeo.
Repuesto del chapuzón
y tras recuperar sus lentes...
...pudo comprobar Joaquín
que el náufrago salvado...
...era un polluelo
de cormorán moñudo.
Y como aquel día, Rafael Onieva,
cumplía años...
...pusimos a nuestro nuevo pupilo
a nuestro amigo el cormorán...
...el nombre de Rafael.
Pero la misión del equipo
de El hombre y la tierra...
...no es únicamente
la de salvar náufragos en el mar...
...aunque pertenezcan a una especie
con un nombre científico tan bonito
...y tan impresionante como
Phalacrocorax aristotelis.
La misión del equipo
de El hombre y la tierra...
...es hacer películas y en este caso
estábamos filmando una serie...
...acerca de la fauna
del subarchipiélago de Cabrera.
Rafael, que en pocos minutos
se había transformado...
...en un miembro más del grupo,
mientras secaba su plumaje...
...sobre una roca,
me ofrecía la oportunidad...
...de tomar algunas notas
y de observar determinados detalles
...de estos interesantes pájaros
llamados cormoranes moñudos.
Pertenecen a una familia ornítica
verdaderamente próspera...
...con más de 30 especies
se distribuye...
...por todos los mares del mundo.
En Europa Occidental solamente
podemos encontrar al cormorán común
...al cormorán moñudo
a cuya especie pertenecía...
...nuestro amigo Rafael.
Y el cormorán pigmeo, mucho más
pequeño que los dos primeros.
Llama la atención los cormoranes
sobre todo, por el gran desarrollo..
...de sus extremidades inferiores.
Los cuatro dedos están unidos
por grandes palmas...
...lo cual demuestra
que son poderosos nadadores.
El plumaje incipiente de Rafael
nos demostraba que estas aves...
...están perfectamente capacitadas
para permanecer...
...mucho tiempo en el agua.
No, evidentemente,
antes de que el plumón...
...caiga del todo.
Por esta razón, Rafael hubiera
muerto de frío...
...si Joaquín Araujo
no hubiera aceptado a salvarlo.
Pero se nos presentaba
un nuevo problema...
...a los miembros del equipo
de El hombre y la tierra.
Era necesario sustituir
a los padres de Rafael...
...para sacar al polluelo
adelante...
...y no sólo observándole
con cariño, jugando con él...
...proporcionándole todo nuestro
amor paterno...
...sino también lo que era
mucho más difícil, alimentándole...
...porque Rafael se podía comer
perfectamente un kilo...
...o un kilo y medio de peces
al día.
Improvisando sencillos útiles
de pesca con algunas líneas de nylon
...que aparecieron en nuestro
equipaje...
...el operador Teodoro Roa
y el naturalista Araujo...
...se transformaron
en dos diestros pescadores.
Afortunadamente, las aguas
de Cabrera, son ricas en peces...
...en peces de roca
que constituyen precisamente...
...la dieta preferida
de los cormoranes moñudos.
Pronto comprobaríamos que el apetito
de Rafael era insaciable...
...y que sus capacidades
para tragar peces grandes...
...absolutamente asombrosas.
Para nosotros, Rafael se había
transformado ya...
...en un miembro más del equipo.
Pero la idea de transformarse
en un miembro del equipo...
...parece que había arraigado
también en la mente...
...del pequeño Rafael.
Pese a su evidente y cómica torpeza
para desplazarse en la tierra firme
...estaba absolutamente dispuesto
a seguir a nuestro equipo...
...a donde quiera que fuera.
No sabíamos si sus padres
hubieran podido llegar...
...a localizar a Rafael en la isla
pero lo cierto es que el polluelo...
...prefirió quedarse con nosotros.
Terminada la jornada de trabajo
se nos volvía a plantear el problema
...de alimentar a nuestro cormorán.
Afortunadamente, Joan,
el payés, era mucho mejor pescador..
...que nosotros y podía surtir
a nuestro pupilo...
...de los hermosos serranos
que constituyen precisamente...
...una de las presas naturales
favoritas de los cormoranes moñudos.
Joaquín, bajo el peso
de la responsabilidad...
...de haber rescatado de las aguas
a aquel pequeño monstruo...
...comedor de peces,
no perdía de vista a su nuevo amigo.
Mientras las preciosas gaviotas,
pescaban muy cerca...
...de nuestro barco,
nosotros cambiábamos impresiones...
...o pensábamos en esta sorprendente
especie...
...llamada cormorán moñudo
y también cuervo marino.
Esta denominación popular
debe tener mucho que ver...
...con el aspecto oscuro,
tornasolado...
...de los individuos adultos
del cormorán moñudo...
...y también del cormorán común
que no nidifica en nuestras costas.
En el subarchipiélago de Cabrera
existe una colonia...
...de unas 300 parejas
aproximadamente...
...de cormoranes moñudos.
Nidifican también estas aves
en el Cantábrico...
...con poblaciones más nutridas.
En el Mediterráneo,
los cormoranes moñudos...
...pescan sobre todo, peces de roca
que llegan a capturar...
...incluso a profundidades máximas
de 20 metros.
Se ha podido observar
que los cormoranes moñudos...
...son capaces de permanecer
hasta un minuto y medio...
...debajo del agua.
Había indudablemente
mucho que aprender...
...acerca de los cormoranes.
Pero había sobre todo,
secretos que desvelar...
...respecto a su sistema
de locomoción subacuático.
Y eso era concretamente
lo que yo estaba pensando...
...con mi amigo Rafael
dormitando tranquilamente...
...entre mis piernas,
una mañana de sol...
...horas antes de partir
para la Península.
Si Rafael se viene con nosotros
si somos capaces de adaptarlo...
...a las condiciones de vida
en un río de montaña...
...quizá nuestras cámaras
puedan desvelar el secreto...
...de la natación
de estas prodigiosas criaturas...
...en sus expediciones de pesca.
Y eso es, amigos,
lo que nos ocupaba aquella mañana...
...en la Hoz de Peregrina
en el río Dulce...
...montando nuestro artefacto...
...para filmar finalmente
a Rafael bajo el agua.
Aunque parezca milagroso,
el chisme preparado por el herrero
...del pueblo, el cristal pegado
de una manera artesanal...
...daba excelentes resultados
con la cámara protegida...
...veíamos perfectamente
el fondo del río.
Entretanto, habían pasado
muchas cosas.
Llevaba ya, Rafael, varios meses
en nuestro campamento...
...de tierra firme y hay
una sorpresa para los seguidores...
...de nuestra historia.
Cerca del ocelote...
...nuestra mascota de los lobeznos
que cría nuestro amigo, Luis Cardano
..Rafael aparece con dos espléndidos
compañeros que habíamos traído...
...del subarchipiélago de Cabrera
para que lo hicieran compañía.
Nos resistíamos a pensar que no iba
a tener más amigos...
...que los hombres de un equipo
de cine...
...siempre empeñados en el trabajo
o tan agotados...
...que tienen poco tiempo para jugar
con un joven pájaro.
Como cada mañana, Rafael
y sus compañeros los cormoranes...
...saludaron a su cuidador,
Javier Ceña.
Y como cada mañana, el ocelote
sintió estar sujeto por una cadena
...y no poder comerse a Rafael
y a sus compañeros.
Los lobeznos empezarían pronto
a trabar amistad gastronómica...
...con nuestro amigo Rafael.
Los cormoranes son
extraordinariamente protocolarios...
...y después de llevar a cabo
la observación, las salutaciones...
...a todos los miembros del equipo
particularmente al naturalista...
...que ahora se dedicaba a ellos
lentamente, parsimoniosamente,...
...como hacían en los paseos
por la isla de Cabrera...
...se dirigen al río.
Y nosotros, nos disponemos
a no perder un solo segundo...
...en las actividades subacuáticas
de nuestros amigos.
Vamos a filmarles por primera vez.
Y esto es, amigos, lo que comenzaron
a ver nuestros asombrados ojos.
Las máquinas perfectas
tanto para nadar en superficie...
...como para deslizarse
debajo del agua.
Las primeras observaciones
nos permiten comprobar...
...que los cormoranes
utilizan muy poco las alas...
...para impulsarse bajo el agua.
El trabajo corresponde
casi por entero...
...a las extremidades posteriores.
Sin embargo, las alas tienen
la misión de estabilizarles...
...en el agua y actúan también
como timones de profundidad.
Estos formidables buzos
captando mayor o menor...
...cantidad de agua, bajo el cuenco
que hacen las alas con el cuerpo...
...profundizan o emergen
con mayor facilidad.
La cámara de alta velocidad
nos permite comprobar...
...con todo detenimiento
la técnica de natación subacuática
...del cormorán moñudo.
Pero estos torpedos no pescan
por deporte.
No se han transformado
en lo más rápido de los buzos...
...exclusivamente para divertirnos.
Nadan y bucean para pescar.
Y resulta tan eficientes
como pescadores...
...que son capaces incluso
de capturar con toda facilidad...
...a las truchas en nuestros ríos
de montaña.
Contemplando la secuencia de pesca
de los cormoranes...
...se comprende que en Oriente
se han adiestrado por el hombre...
...para utilizarles como formidables
colaboradores en la pesca.
Se limitan los domadores
de cormoranes...
...a colocarles una anilla
en el cuello para que no puedan...
...tragar el pez y después
del trabajo, viene el premio.
Para los cormoranes, el baño.
Y se preguntarán nuestros seguidores
...que cómo es posible
que unas criaturas que pasan la vida
...en el agua, tengan también
la necesidad de bañarse.
Concretamente, porque como todas
las aves acuáticas...
...defienden muy bien sus epitelios
con las plumas del contacto del agua
Por esta razón, el bullicioso baño
de los cormoranes...
...consiste sobre todo, en ahuecar
las pequeñas y escamosas plumas...
...para que el líquido elemento
entre en contacto con sus tejidos.
Y esta particularidad
nos permite también desvelar...
...otro relativo secreto
en la fisiología del cormorán.
Se decía y se dice, que el cormorán
carece de la secreción oleosa...
...de la glándula uropigia.
Ciertamente, no disponen
de una secreción oleosa...
...tan abundante como otras aves
pero al menos, las plumas...
...que protegen el dorso
y la parte central...
...están convenientemente oleadas
cubiertas del producto protector...
...mientras que las plumas rémiges
y las rectrices...
...es decir, las de las alas
y la cola, se mojan.
Con lo cual, los cormoranes
resultan más densos.
Adquieren lo que podríamos llamar
un lastre acuático.
Pero terminada la jornada de pesca
desvelamos los secretos natatorios
...de los cormoranes
por nuestra parte.
Es necesario volver a trabajar.
Rafael y sus compañeros
recibirán otro premio en el interior
...de la tienda para que no dejen
de permanecer ligados a nosotros.
Entretanto, tomamos algunos datos
acerca de una culebra de agua.
Y Rafael que es el dominante
entre sus compañeros...
...se dirige a su cuidador
con las mismas pautas de conducta...
...con que lo haría en la lejana
isla de Cabrera...
...a un miembro de la colonia.
A Javier Ceña
le toman el pelo los naturalistas
...y le dicen que Rafael
le está haciendo la corte.
Los etólogos explicarían el singular
comportamiento del joven cormorán
...diciendo que éste estaba
impregnado de otro clan.
Fue capturado tan joven
por los hombres...
...que él se considera
un hombrecillo con plumas...
...o quizá piensa que los cormoranes
tienen el aspecto de Javier Ceña.
La verdad es que él dirige
a sus compañeros...
...que fueron capturados más viejos.
Él es el único que está
absolutamente integrado al grupo.
Y pensamos que nos va a resultar
sumamente difícil convencerle...
...de que los cormoranes viven
en el mar...
...y de que él no es técnico
cinematográfico.
Y así, cuando decidimos cambiar
el emplazamiento...
...de nuestro campamento
cuando decidimos avanzar...
...por la abrasada estepa,
Rafael a la cabeza de sus compañeros
...los cormoranes,
marchan detrás de nosotros...
...incapaz de separarse
de nuestra compañía.
Tal vez algún día
vivamos una nueva aventura...
...con nuestro amigo Rafael.
Subtitulación realizada por
Paloma Masa Barroso.