Martes a las 00.00 horas
Vamos a hacer un morteruelo.
Es una bomba.
-A ver qué nos encontramos.
Con esto vamos a hacer un ajoarriero que va a salir fuera de lo común.
En una hora está hecho.
-En un cocido siempre tiene que sobrar,
porque si te ponen un cocido y te quedas con hambre, dices,
"aquí pasa algo".
Aquí el domingo, codillo.
-Yo soy de Salamanca y sé de qué va la champaina.
El hornazo es una comida contundente que llevaban los pastores
y la gente del campo.
Se junta todo, que esté lleno de energía.
-El comer es un placer, hay que disfrutarlo.
Unos 300 de cada, que son...
-Hígado de cerdo, tienes la cabecera de cerdo
y tienes aquí el alma del cerdo.
-Mira qué bueno, qué rico.
Vamos a hacer un morteruelo.
Y la receta es de mi suegra Amparo, de su pueblo, Torralba.
Es como ella lo hacía.
Es una bomba, pero está muy bueno.
Vámonos para arriba.
El morteruelo sería por culpa de mi suegra,
pero yo vine a Cuenca por culpa mía, de casualidad,
en un viaje que hacía de mochila hace muchísimos años.
Llevo aquí viviendo desde el 75.
Y yo me enamoré de la piedra.
Esta es la catedral de Cuenca.
Sí, antiguamente esta fachada y la de al lado eran un palacete.
La hija de Velázquez, el pintor, vivió aquí.
Este es el comedor y tenemos la terraza.
La vista que tienen es espectacular.
Venga, vamos a ponernos manos a la obra.
De jamón, la liebre, el cerdo.
Tiene que estar todo muy bien picado.
En la olla exprés pueden ser hasta dos horas y media,
antiguamente lo dejábamos puesto toda la noche.
Oro líquido.
Salen para unas 25 o 30 raciones de morteruelo nuestro.
Sí, poco a poco y le vamos dando vueltas.
Vamos echando ese maravilloso caldo aquí.
Si, toda la carne.
Algo así.
En inglés tenemos una expresión que es que se te pega a las costillas,
y este es un plato de ese tipo.
Exacto, esta que vemos aquí forma parte de la cimentación de la casa.
Esto es el mal vivir de Cuenca.
Este morteruelo en esta carta, la ración vale siete euros.
Toda esa carne cociendo, son piezas que tienen cartílago.
Pero no resulta fuerte de sabor,
creo que ese es el secreto de este morteruelo.
Jessica, buenos días.
Me voy a llevar los cachelos, los de siempre.
En primer lugar el bacalao, las patatas, el aceite,
un poco de pan para poder homogeneizar la pasta,
y muy poquito ajo de las Pedroñeras.
Es lo mismo, pero se diferencia de una cosa,
que al ajoarriero no le ponemos huevo cocido
y el atascaburras si lo lleva.
-2,35. Ángel. -Muchas gracias, Jessica.
Sí, es muy conocida aquí, en Cuenca.
Por ejemplo, de lo más relevante, en el New York Times de Nueva York,
es el periódico con mayor tirada del mundo.
Buenos días, Alberto. ¿Cómo está hoy el bacalao?
Este es un bacalao muy especial
que lo trae Alberto exclusivo de las islas Feroe.
Con esto vamos a hacer un ajoarriero que va a salir fuera de lo común.
Mira el brillo que tiene, es la propia grasa del pez.
Sí, auténticos y genuinos.
Porque está criado en tierra de secano.
Le cortamos el culete y le quitamos el tallo,
para que luego no se repita la comida que vayamos a hacer.
No, porque sabemos que tiene que tener estas características,
que la piel siempre sea muy morada.
A 2,95 el kilo.
Vamos para adentro, por favor.
Sí, está inspirado en la serie.
Son los torreznos auténticos, los de papada de cerdo ibérico.
Se deshidrata mucho a la hora de freír el tocino
para que luego quede la corteza crujiente,
como si estuviésemos comiendo un hojaldre.
Buenos días.
Sí, un bacalao.
-La propia agua del caldo del bacalao
es donde se hierven las patatas y este es el resultado.
-Se echa el ajo, se machaca bien, se echa un poco de sal y aceite.
No, no porque haces como un puré,
y esto, cuando lo cojas con el tenedor,
ves las hebritas del bacalao.
Esto se tiene que hacer como lo hacían las abuelas antiguamente.
No, nada.
No, esto es una historia que hay que saberla.
Al estar mucho tiempo dándole con el mazo, para machacar el ajo,
la patata y el bacalao, se hacen como unas vejiguitas,
y a esto se le llama burras, por eso no lo quiere hacer la gente,
porque es muy laborioso.
Esto alimenta mucho porque lo que lleva es contundente.
Súbelo, júntalo...
-Espera un momento que le eche un poco de esto por encima.
Míralo, disfruta.
Dame pan tostado para el ajo.
Vamos a brindar por el ajoarriero de Cuenca.
Un poquito de ajo, Ángel, para probarlo.
Nosotros la vendemos a 10 euros la ración.
-Riquísimo.
Son las tripas del cordero, el intestino delgado.
Ya está asado, así lo puedes comer.
Sí, en agua caliente, mira, les voy haciendo así, bien lavadas.
Un zarajo que amarga es que no está bien lavado.
Aquí mi Goyo los va haciendo, pero como yo vivo aquí,
le echo una mano porque me sirve de relajamiento.
Mira, echo ajo picado y con la sal procuro echar así, un puñado.
Esto es el palillo del gamonito.
A últimos de agosto, primeros de septiembre,
ya se pueden coger porque están secos. Los vamos cortando.
Eso es.
-Un poquito de mollejas...
Y hago así.
La terminación es esta, ya tenemos uno.
¿Qué tal, Ángel?
-Son 25 zarajos, esto se vende por unidades.
La pongo a tres euros.
Os alarma mucho que sea una tripa,
pero el chorizo y la morcilla lo llevan igual,
pero esto no va relleno.
Tú dale, que no pasa nada.
Eso es, con un trozo de pan.
Como veréis, reduce bastante por el sebo que lleva dentro.
No hay que hacerlos mucho, porque si no se reducen mucho.
Mirad cómo han quedado.
Sí, todo esto es lo que vamos a utilizar para el marmitako,
tenemos patata,
es muy importante para la base de elaboración
de todos los marmitakos.
Era el puchero y la cazuela que cocinaban los pescadores
en los barcos.
Cuando salían a la mar, una forma de llevar un producto
era la patata que se le añadía el pescado que había en esa temporada
o que estaban pescando en ese momento.
Ellos son los pescadores.
Han llegado y en seguida vamos a empezar a preparar el verdel.
Antonio es el propietario del barco que sale en la peli
"Ocho apellidos vascos"
Urristi, Isasti, Iribar, Aipuru, Andonegui, Uranga, Aizpuru y Sasti.
En una hora está hecho.
El verdel es un pescado proteínico porque tiene grasa.
La grasa le da fuerza para trabajar y poder seguir funcionando.
-Rehogo la cebolla y pimiento verde.
-Le estamos echando un caldo con puerro y lomos de verdel,
para no mojarlo con agua sino con un caldo de pescado
y ya tiene sabor. Listo.
Es muy importante echarlo al final,
sino el verdel hubiera estado mucho tiempo cociendo
y se hubiera quedado seco, de esta manera,
se deshace con el propio calor
que va a tener la temperatura de la patata,
dejamos que entre el calor, dejamos reposar
y en un minuto está el plato hecho.
-Muy rico.
He probado otros pescados como atún, bacalao.
De verdel lo como muchas veces pero como chicharro.
¿A cuánto está la alubia, Javier? -Está a 12.
-A 12.
Producimos 25 t.
25 t al año de alubias.
La alubia es negra y pequeñita, la piel es muy fina,
no hace falta ponerla en remojo.
-Llega un momento en que gran parte de las celebraciones
se hacen en torno a la alubia,
se organizan "alubiadas" para reunir a los amigos,
la familia, en las fiestas.
Se cogen las alubias y se llevan fuera
porque es algo nuestro, nos identifica.
"El Chueco".
Sí.
Mimarlas con un poco de cariño.
Exacto, morcilla, costilla y chorizo.
Esto se llama langostinos de Ibarra.
Sí.
Sí.
Es otro plato típico.
-Luego, chuletón a la brasa.
Vamos a hacer un postre, unos merlitones.
Son unos pasteles de hojaldre
que llevan una crema de yema de huevo,
mantequilla y azúcar glas.
Nosotros les llamamos merlitones luego cuando los pruebes
me dices cómo se llaman. ¿Vale?
Exactamente.
De los sacramentos no hay que abusar mucho
pero un cachito de cada queda muy bien.
-Esta es nuestra casa.
Todo esto lo puedes usar, tranquilamente.
100 millones
Sí, 3000 euros.
Es que son muy finas, y ya ves,
que cambia completamente el color del negrito quedan amarronadas.
La sal se le echa después de cocer porque sino se encallan las alubias.
Ahí va la morcilla... el chorizo...
Costilla.
Sí.
Sí, aquí se repite hasta llenarse.
-Tiene todo preparado ya. Qué bonito.
Es que he llegado...
Tiene verdura. ¡Qué tocino más gordo! Qué rico.
-Ponme estas dos piezas -Dos laconcitos.
Sí señor.
Esto es lo más importante, es lo que primero se come
es lo que más llena,
y como decían los maragato mejor dejar la sopa
que dejar la carne.
El sabor ahumado es fundamental en el cocido, esa es la diferencia
y más importante que tiene con el resto de cocidos de España.
-El chorizo es fundamental. Un cocido sin chorizo...
Sí, sí. En un cocido siempre tiene que sobrar.
Si te ponen un cocido y te quedas con hambre dices,
coño, aquí pasa algo.
-Es muy barato comer un cocido y te sobra siempre.
Yo creo que es comida de subsistencia,
pero ahora mismo la hemos profesionalizado.
Totalmente, es la capital del cocido maragato.
Su origen de la popularización fue aquí por Maruja, una vecina.
Generalmente las casas están hechas hacia adentro.
Si os fijáis en esas ventanas, son muy pequeñas.
Las casas tienen unos patios y los balcones están hacia adentro.
Ser maragato significa ser el arriero de la casa,
el dueño del negocio.
Digamos que es el estandarte.
(Llama a la puerta)
37 o 38.
Nada más y no a todos, a la gente que conozco.
Esto no es un restaurante, es la casa de uno.
Es mi vida toda, es un museo.
Me traen cosas cuando vienen a comer.
Pues este sitio que no lo he industrializado
ni lo he comercializado.
Viene la gente como si fuera su casa.
No tengo letrero y me conoce toda España
y parte del extranjero.
Yo lo cocino por la mañana muy temprano
y la segunda fase la hace él.
A la gente le gusta que el cocido sea auténtico.
Los pusimos aquí anoche y como veis ya han crecido
y han cogido el tamaño.
Son los garbanzos de los que os hablé,
tienen la forma de la cabeza de un gorrión.
-Verdura fresca del tiempo.
Esto es el desengrasante
y lo que ayuda a digerir un poco todo lo que lleva el cocido.
-No todo puede ser grasa en la vida. Esta es la pata como veis.
Si hay que dejar algo, se deja la sopa.
Primero nos aprovechamos y llenamos el buche con la carne.
Ahora mismo no tiene mucho sentido, pero hace 300 años seguro que sí.
Son los rellenos, pan rallado y huevo.
-Aquí tenéis el principio.
Cuando queráis repetir carne, me lo pedís.
Ahora sí, pero antes era desde noviembre,
que empezaban las matanzas, hasta el martes de carnaval,
que se comía el último botillo
porque antes no tenían dónde conservarlos.
Es un producto de fiesta.
El botillo es algo que nos representa.
En otros sitios se comerá cocido, se come paella y aquí el domingo,
botillo.
-Lleva rabo, costilla y huesos de espinazo.
-Contundente, pero muy rico.
Sobre dos horas o dos horas y media.
Media hora más o menos.
Es una zona en la que se come bien. Hay mucho plato y bien elaborado.
Es una zona de paso del Camino de Santiago.
La gente se asentaba y dejaba sus recetas.
En una comarca tan pequeña como el Bierzo
hay seis figuras de calidad. Es la comarca más pequeña de España
con más las figuras de calidad por metro cuadrado.
Comer es un placer. Hay que disfrutarlo.
Él solo. Es la comida más fácil de hacer.
De atún.
Es la de acelgas con chorizo o con panceta, patatas, cebolla...
Era una comarca en la que el invierno era muy largo
y había que comer y cuidarse para poder aguantar el frío.
Lacón asado con pimientos asados del Bierzo,
también muy típico de la comarca.
Se prepara en otoño que es cuando se recogen los pimientos.
Cinco minutos.
-Es delicioso, mantequilla pura.
-Qué van los toros. Chicos, a cenar.
(HABLAN TODOS A LA VEZ)
Ahora mismo estamos aquí 16 personas.
Un repollo, cuatro chorizos, patatas...
Podemos salir aquí por 40 euros para los 16.
-Yo también quiero chorizo.
Una buena berza gitana. Sus orígenes son gitanos.
Sí, porque donde mejor se mezclaron los gitanos
con los payos fue en Jerez. Eso era un plato de los gitanos
y empezamos a echarle más carne y más pringue todavía.
Un cardo silvestre.
El sonido te pone los pelos de punta.
Terminamos de limpiarlas y las preparas que me las llevo.
Cuidado, no te vayas a cortar que la carne ya se la echo yo.
Llena la bolsa, despacha bien a tu sobrino.
Vamos a entrar a ver a Perico.
Un colega mío, amigo y compañero de fatigas de pesca.
Un compañero de fatiga de pesca.
Vamos a cerrar esto no se vaya a escapar el perro.
Perico
¿Qué pasa pisha?
-Aquí un chozo para el tiempo.
Esto es el tambor de una lavadora.
Ahí está, esto es campechano.
-Me tienes que coger unos cardillos Perico,
que estamos preparando las berzas,
Esta es la lechuga nuestra, la aceitosa.
Esta es la lechuga fina esto es un manjar.
A 2 km del centro de Jerez.
Esto de los que la cultivan.
Son tierras del ayuntamiento, le hemos cogido cada uno
una parcela y la vamos aviando.
No, esta es mi vida porque ahora mismo no tengo trabajo,
aquí hecho la mañana y me distraigo.
A la construcción, soy encofrado.
-Perico, eres una bruja cómo va lo del cardillo.
Mira.
Ese era el cruce romano el auténtico.
Aquí vienen todos los animales.
Esta es la prueba de que esto es ecológico.
Yo y un compañero un cacho, otro lo tengo yo.
Aquí todo es a mano, aquí no hay tractores.
¡Compañero!
Mira, otro agricultor con su chimenea al lado.
¡Compañero que friolero estáis!
¡Ya está!
-Se han puesto las papas en dos días preciosas.
A los vecinos, a particulares y a gente que viene.
Mira.
El secreto es este, estiércol de caballo.
No hay mejor abono.
Con los compañeroes, yo les doy patatas
y ellos me dan estiércol, un cambio.
Un trueque.
A lo antiguo.
-Échele un amarrecito bueno.
-Sí, como a un caballo.
-Que no se escape ninguno que las vamos a cocer ahora.
-Venga esto ya esta.
-Pues dámelo y vámonos compadre.
-Aprovecharlas compañero.
-Ya te llamaremos para que la cates.
Los avíos de la berza.
Un kilo de lagartillo ibérico 4,95.
-Esto es una costilla de cerdo ibérico
a la que le quitamos el hueso y la tira que tenemos de carne,
a esto se le llama lagartillo.
Esto en una barbacoa y con una buena cerveza fresca es lo mejor amigo.
Lo mejor que se puede comer.
-Pon ahí el tocino.
-Este es el tocino ibérico, es fundamental.
Por la pringue que suelta y el vetado que tiene
Corta ahí un trozo.
Eche ahí más o menos sobre un kilo.
Ahora le vamos a echar un trozo de costilla ibérica también.
Echa un kilo de la parte buena, de la que tú sabes.
¡Ahí!
-La morcilla de manteca, eso no veas cómo es.
¿El chorizo también? -Del normal.
Para adentro.
Hay quien le echa también las orejas.
-Antiguamente se echaba la oreja, no había morcillas,
había pero no había dinero carne, o el hocico del cochino.
No había dinero.
Costillas de cerdo ibérica. -Un kilo y medio.
-27,26.
Con esto vamos a hacer por lo menos 15 o 16 raciones.
50 euritos y mira por él.
-Lo que sobra al bote.
Vamos a gastarlo en el albero.
Al bote ponle dos remos que el tiempo está de agua.
La venta que es de todo el mundo.
No es mía, es de los clientes que vengan a comer.
A las buenas. -Buenas.
Ya estamos aquí. -Ya era hora.
Sí, esta es mi familia.
A la olla.
Estas son las tagarninas que ya están lavadas y todo.
Se mueve todo.
Y la ponemos en la candela.
-Mira qué olla de croquetas, por favor esto es una delicia.
La costilla.
Y ahora la morcilla.
Por lo menos tres horas.
De Perico.
Sí, cualquiera no sabe partirlo, quitar las hebras, y hebras.
-Vamos a ver que nos encontramos.
¡Qué maravilla!
Mira que pedazo de boda se está celebrando aquí adentro.
Aquí están todos que no veas.
Esto es un lujo barato, no me digas a mi que esto...
Te puede salir sobre 6 euros o 6 euros y medio.
Tres días y te acordaste el cuarto.
Garbanzos con cola de toros.
-Se echa los garbanzos, la cola entera
y se guisa todo de una vez.
Por ejemplo Steven Spilberg, si hablamos de gente conocida.
Cuando rodó la película del "El imperio del sol".
Durante 52 días que estuvieron.
Pues mira, te voy a decir una cosa de verdad.
Me alentaba a que me fuera a California
a montar algo de esto porque iba a tener un futuro que no veas.
El tocino de papá y el chorizo.
Vamos a empezar con berza.
Menudo, garbanzos con cola de toro,
berzas con chorizo, salmorejo, sangre con tomate,
riñones al jerez, cola de toro, carrillada en salsa.
-Ponme mejor eso.
-¿Te has fijado en el brillo que tienen las cucharas?
¿Quién ha pedido una berza por aquí?
Como me levantáis las manitas.
-Es muy buena. Es la hora.
¡Otra berzita para el caballero!
¡Cómo te vas a poner primo de mi alma!
¿Cómo ha ido la cosa por aquí?
-Como siempre sensacional.
Hace más de 30 años que venimos a comer aquí a casa de Juan Pedro.
Yo siempre digo que si habéis comido bien,
habéis tenido suerte y si no habéis comido bien,
venís otro día y lo intentáis.
En las bodegas de jerez, son más antiguas
que todos nosotros juntos, cogían las claras de los huevos.
Para clarificar el vino lo utilizaban.
No sabían qué hacer con las yemas,
se la daban a los conventos y las monjas
comenzaron a inventar cosas y entre ellas
sacaron el tocino de cielo.
-Yo lo voy a probar.
Eso es lo que pega después de la berza.
¿No te entra un calor por aquí?
(Campanas)
(Campanas)
Soy Raúl.
Bueno, algunas lenguas.
Espera que me quito el guante.
-Lo dices tú.
Es embutido muy típico de aquí de Salamanca.
Esta repartida con gordura de cerdo ibérico se mezcla con pan,
con pimentón, cebolla y anís.
Esta es la gordura del cerdo ibérico,
que es con lo que elaboramos el farináceo.
Vamos a echar el pimentón, que se sofría un poco.
Esta mezcla, que huele tan maravillosamente,
es la que vamos a unir al pan con los anises y la sal.
Pan, pan.
Pan de pueblo, pan de hogaza.
No llega a los 6 euros.
Era, era.
Claro, claro, es que tiene energía el farinato.
-Hola, buenos días. -Hola, buenos días.
-Le traigo el pedido.
Esto, simplemente, vuelta y vuelta a la sartén.
Lo he dejado doradito para que estén crujientes por fuera.
Tienes que tener un buen estómago.
-Huevos con farinato. -Gracias. Vamos para allá.
-Gracias. -Buen provecho.
- Gracias. Muy rico.
También se puede partir, como hacemos aquí en Salamanca
toda la vida, así, tipo revuelto, mira, se junta todo.
Esto es pura energía.
Bueno, pues la chanfaina es un estofado de cordero.
Eso es la sangre del cordero.
Pues la chanfaina, unos 30 años o así.
El arroz viene a durar 20 minutos.
Ahora ya echamos el arroz, el callo y las patitas troceadas,
todo ya troceado.
Echamos la sangre.
- Vamos a ver qué tal ha salido hoy. Va para allá la chanfaina.
Una de chanfaina.
Sí, claro, patitas de cordero, callos, sangre ...
Yo soy de Salamanca y sé de qué va la chanfaina.
Ya no hay. -Y no está igual.
-Mira lo que ha durado, nada.
Está exquisita, además, lo último siempre lo mejor.
Sí, lo he intentado, pero no me queda tan rica como esta.
Yo hago algo muy típico de Salamanca y muy rico de Salamanca.
Este es un tamaño mediano, es alrededor de un kilo y medio.
Este es un hornazo grande, son de los que tengo que llevarme ahora.
Chorizo, lomo, el huevo cocido y un poco de jamón encima.
El hornazo es como una empanada de carne,
es una comida contundente que se llevaban los pastores
y la gente del campo, porque se iban dos o tres días al campo
y la masa les aguantaba, no se les estropeaba.
Pero luego, la historia de Salamanca que se cuenta es diferente.
A finales del siglo XV, en Salamanca se hizo
el primer prostíbulo de toda España.
Al rey Felipe parecía que aquello le gustaba.
El rey Felipe II, cuando vino a Salamanca
y vio todo el jaleo que había dijo: madre mía, esto es un jolgorio
que no puede ser. Entonces, en la época de Cuaresma,
puso la abstinencia ...
Entonces, ¿qué hicieron?
El llamado padre putas, que era el que se encargaba del prostíbulo,
cogió a todas las prostitutas y las pasó a la otra orilla del río
hasta el lunes siguiente al domingo de Pascua,
es decir cuando ya se podía...
Las fueron a buscar en barcas, se juntaba toda la gente
en la orilla del río, con las meriendas, y entonces
la merienda era un hornazo. Y se sigue haciendo:
el lunes de Aguas todo el mundo, en Salamanca, come un hornazo.
Este es muy típico de la Sierra.
Tocando con Portugal.
Esto es un bollo, es un hornazo, lleva montones de cosas,
cantidad de ingredientes. Es muy rico.
Lleva huevo, leche, azúcar, aguardiente, aceite ,...
no es un bollo normal, es un hornazo.
Prueba primero este.
Se ve bien las tres capas: lomo, huevo cocido y jamón.
Ese es el típico de aquí, de Salamanca, está buenísimo.
Vamos a llevarles pan al equipo de paddle.
Me han dicho que eran unas 20 personas.
Hola, buenas tardes, preguntaba por Martín.
- Está en la pista siete si no me equivoco.
- Juntar ahora el hornazo, que es un producto típico de Salamanca,
con paddle, pues la gente enseguida dice que sí.
Esto es un hornazo bien cortado. Esto se hace así, se corta así.
Entra estupendamente, después de tantas horas de deporte ...
Hornazo y cerveza, perfecto.
Sí, nos reservamos para el lunes de Aguas, normalmente, en Salamanca.
Este ganado es importantísimo tanto para queso,
como para uno de los platos más típicos de la gastronomía,
que es la caldereta, que si no tienes un buen cordero, no podrías.
Vamos a ver si le damos un lavado al caldero.
Claro, efectivamente.
Este ya tiene unas pocas.
Sí, efectivamente, es un plato típico porque aprovechaban
normalmente alguna oveja que se había lesionado o dañado.
Torta de la serena.
-Tráete un poquito de morcilla patatera,
que esta es muy típica de aquí, además es casera,
la hacemos nosotros. Eso se hace con carne y con patata.
Aquí la que utilizamos, que es la más autóctona,
es la de la encina, que es la que tenemos cerquita.
Todos los años talamos unas pocas encinas
y es la que tenemos para hacer la leña y calentarnos en casa,
que es para lo que la utilizamos.
-Vamos a pelar unos ajitos, los sofreímos un poquito
para luego hacer un majao, que es lo que le dará un saborcito
a la caldereta, a la salsa de la caldereta.
No va a llevar más que un poco de pimiento colorado, ajo y laurel.
Ni más más, ni más menos.
Sí.
Esto es muy típico, se ha abierto...
Sí. Esto hoy en día ya no lo hace nadie,
eso está hecho a mano con una berruga de una encina.
Esto siempre acompañado de un vinito de pitarra
se hacen las cosas mejor.
Sí, esto es más consistente que el andaluz.
A este se le suele echar también huevo.
Cuanto más espeso está mejor. Hay que poner la barreña boca abajo
y que se quede en el fondo, sin que se caiga.
Echa. -Tú me dices.
Echa.
Sí, sí, a esto hay que echarle más de medio litro de aceite.
Vamos a echarle el agua.
Venga, toma, relévame.
Vamos a ir para allá, a ver si vemos por ahí unas esparragueras.
Hombre, esto es muy complicado, por eso tengo los guantes.
Mira, hay que ser un poco experto para dar con ellos.
Este es mi hobby favorito,
tengo una afición por cogerlos...
No, con los que se cultivan no tiene ni punto de comparación,
ni en el sabor ni en nada.
Aquí, la verdad es que sí.
Mira, unas ponen en el ponedero, otras en el suelo,
cada una donde les parece.
Ya han puesto unos poquitos.
Todavía es pronto, tiene que poner algunos más.
Están sucios, pero la calidad...
Señora, los huevos.
Luego lo que nos pasa es eso: llévate tú que ha sobrado,
llévate tú que ha sobrado.
Mañana, como es domingo, volveremos a comer las sobras.
El pan, el ajo y el hígado.
Este es el majao que va a hacer que espese la salsa
y le da también sabor.
-Vamos, señores, cada uno con su plato.
Toma, verdura, que te gusta a ti. -Echa.
Verdurita, toma. -A mí poco.
porque estamos viendo que las cantidades son importantes.
No creas, no creas.
Hacerla con mucho amor y con mucho cariño.
Y un buen borrego de la tierra.
El color se lo ha dado el pimiento.
¿Está buena? -Está buenísima.
-Exquisita.
Comiendo no puedes hablar.
La ensalada también estará buena,
nos la teníamos que haber comido antes.
-Postre, postre. Y de los nuestros.
Esto es flan de turrón.
Repáparos.
-A la salud de todos nosotros y a la de los demás.
-Nosotros lo hacemos en la olla express,
a partir de 45 o 50°, hasta los 70 o 75.
-Por vosotros.
-Que vengáis muchas veces por Extremadura.
No están pensados para la mesura ni para dietas equilibradas pero son imprescindibles de vez en cuando. Se inventaron para soportar condiciones extremas de frío, trabajo o economías de subsistencia, pero hoy esos antiguos potajes, marmitakos, chanfainas, morteruelos y botillos son la cumbre de la gastronomía sin complejos. Cada región tiene los suyos y para ellos son seña de identidad.
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