Hoy se cumplen 40 años desde que Lowell George, fundador y líder de Little Feat, fuera encontrado muerto en una habitación de un hotel en Arlington, Virginia. Fue a primeros de 1973, el año en que TOMA UNO comenzó su andadura radiofónica, cuando vio la luz Dixie Chicken, el tercer álbum de estudio de Little Feat, que definió aún más el sonido del grupo. Por eso hemos abierto nuestro programa de hoy con aquella banda sonora. Pero no podía falta “Willin’”, una canción que está en la leyenda de la música popular. Lowell George se la enseñó a Frank Zappa y permitió que el genial artista se fijara en el joven músico. Fue incluida por primera vez en el álbum de debut de la banda en Enero del 71 tal y como hemos escuchado hoy, con Ry Cooder en el slide guitar porque George tenía una mano herida. Sería regrabada en el segundo, Sailin’ Shoes. Little Feat se separaron en 1979. Lowell George, su líder, había intervenido esporádicamente en Down On The Farm, pero estaba mucho más interesado en su debut como solista, que terminó por llevar el título de I'll Eat It Here. Un recuerdo imborrable a las formas que hiciera muy popular por entonces Jackson Browne, con toques amorosos de evidente acento español en el arpa utilizada en “Cheek To Cheek”.
"Faithless Love"es una creación de J.D. Souther que su buena amiga Linda Ronstadt dio a conocer al llevarla a su álbum de 1974 Heart Like a Wheel. Dos años antes de que Souther la incluyera en Black Rose. Lo hemos recordado por que otro nuevo documental del que nos hacemos eco tiene como protagonista a una de nuestras artistas favoritas de siempre: Linda Ronstadt. Dirigido Rob Epstein y Jeffrey Friedman, se trata de The Sound of My Voice, título abreviado de "Still Within The Sound of My Voice", una canción compuesta por Jimmy Webb y grabada por Glen Campbell un par de años antes de que Linda la hiciera en 1989 para su álbum Cry Like a Rainstorm, Howl Like the Wind, producido por Peter Asher. Con intervenciones estelares de Jackson Browne, Emmylou Harris, Don Henley, Aaron Neville, Dolly Parton o Bonnie Raitt, The Sound of My Voice, estrenada en abril en el Tribeca Film Festival, permite recuperar parte de legado de la artista, desde su infancia en Tucson, Arizona, y material de archivo de fotos y actuaciones emblemáticas. La propia Linda interviene como narradora de su vida, que se vio truncada profesionalmente en 2011 debido al Parkinson.
Cuando hablamos del artista con más crecimiento exponencial dentro de la Americana, todas las miradas apuntan a Tyler Childers, un trovador de Kentucky cuyo próximo trabajo, Country Squire, que aparecerá en agosto, incluye una canción como "All Your'n", dedicada a sus compañeros de viaje, rememorando los problemas que surgen cuando dejas la carretera y pasas una larga temporada en casa. No solo es propio de los músicos, también les ocurre a los camioneros, los cowboys o los vendedores.
Country Squire ha sido coproducido por su paisano Sturgill Simpson, que nos ha dejado una nueva canción favorita. Desde su aparición en la banda sonora de la película The Dead Don’t Die, que ha dirigido Jim Jarmusch y en el que encontramos una loca colección de nombres célebres, el tema que lo da nombre se ha convertido en referencia para nuestro programa. El argumento tiene que ver con una pequeña localidad llamada Centerville donde todo está cambiando. Se luna ha crecido y está demasiado baja, las horas de luz del día se hacen impredecibles y los animales se comportan de forma rara. Pero lo que nadie consigue prever es que los muertos se levanten de sus tumbas y se alimentan de los vivos, como llega a suceder y que los ciudadanos deban luchar para sobrevivir.
“Going Down To The River” es la canción que sacó de la indigencia a Doug Seegers, convertida en No. 1 en Suecia gracias a ser descubierto por la televisión de aquel país, que andaba buscando músicos callejeros para un reportaje sobre la música de la Music City. Jil Johnson y Magnus Carlson, músicos presentadores del programa, no daban crédito cuando le escucharon cantar en la calle sobre sus propias miserias. Como ocurre en las canciones de country, llegó la redención y en mayo de 2014 apareció aquel álbum, Going down to the river, que era la historia de su vida convertida en un hermoso disco. Aquel álbum de Doug Seegers sería producido por Will Kimbrough en los legendarios Sound Emporium Studios de Nashville, con las colaboraciones de Buddy Miller, que le había conocido en sus años en Austin, y Emmylou Harris. La gran dama de Alabama cantó con él en “She”. Doug Seegers ha sido producido por Joe Henry en su álbum A Story I Got To Tell, el disco que ha sacado a la luz la vida de un neoyorquino de Long Island que era conocido como Duke The Drifter cuando militaba en Angels In Overdrive y que bajó literalmente a los infiernos para resucitar con 66 años desde el puente bajo el que vivía en Nashville.
Jason Hawk Harris, un nativo de Houston, en Texas, que formó parte de los Show Ponies, una banda de toques folkies afincada en Los Angeles. El primer toque de atención llegó hace dos años cuando publico su primer EP en solitario. Ahora está preparando su primer álbum para Bloodshot, Love & The Dark, para finales de agosto. Canciones como “Cussing At The Light” son un soplo de aire fresco en este caluroso verano recién iniciado.
