Miniaturas   No pudieron colgarlo 06/03/2012 02:04

En 1884 una anciana fue asesinada en Inglaterra, acusaron del crimen a su empleado de 20 años, John Lee. Lo sentenciaron a la horca, pero murió de viejo a los 81 años.

El día fijado para la ejecución le pusieron la soga al cuello pero la trampilla no se abrió. Cuando se reparó la avería volvieron a intertarlo, de nuevo fue imposible. Y todavía hubo una tercera vez.

El ministro del Interior le conmutó la pena capital por la de cadena perpetua, y en 1907 fue liberado de la cárcel.

Miniaturas
Más opciones