El conflicto de Iraq y la amenaza yihadista vuelve a suponer una preocupación para la estabilidad mundial y en especial para Europa que depende en buena medida del suministro energético de la zona. Jesús Núñez, economista y militar, codirector del Instituto de Estudios sobre Conflictos y Acción Humanitaria, apuesta en Europa Abierta por un cambio de modelo ."Ese cambio sólo puede venir cuando la dependencia energética desaparezca y pasemos a utilizar otras fuentes como el hidrógeno. Mientras, seguimos atrapados en este juego, apoyando a regímenes dictatoriales. Decir que el terrorismo islamista es la gran amenaza del siglo XXI, como ha hecho el Ministro del Interior, es de un alarmismo exagerado. Las pandemias, los flujos migratorios, la exclusión o el hambre, son amenazas reales que cuestan muchas más vidas al año".
