En víspera de Nochebuena hemos viajado hasta el Real Sitio de San Lorenzo de El Escorial, en Madrid. Allí hemos compartido los ensayos que realizan los niños de la Escolanía del Monasterio de cara a la Misa del Gallo de mañana. Hemos conocido el día a día de los chavales que integran uno de los coros infantiles más prestigiosos del mundo, fundado en 1567 por el Rey Felipe II. Además nos hemos deleitado con el sonido envolvente de los cuatro impresionantes órganos de la Basílica del Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial. En total son quince mil tubos -controlados desde una única consola- los encargados de inundar de música el templo. Una oportunidad única que hemos aprovechado también para conocer a los agustinos, la orden religiosa que da vida al Monasterio. Nuestro recorrido ha terminado en el archiconocido restaurante El Charolés, donde se come uno de los mejores cocidos del mundo.
