Bienvenid@s a un bosque que ejerce las políticas alimentarias locales. Sí, porque desde los movimientos sociales y las organizaciones campesinas se está poniendo de nuevo en valor la gobernanza local y el respeto por la naturaleza. Hasta tal punto que defendemos una especie en extinción: la de nuestr@s agricultor@s. Tenemos que actuar urgentemente para que los principales proveedores de salud física, mental y espiritual, es decir, l@s cultivador@s de la tierra y lo que nos hace vivir y crecer, no desaparezcan. Y lo están haciendo a un ritmo más vertiginoso aún que la extinción de nuestros pueblos.
Dice Gustavo Duch que toca abordar las políticas alimentarias locales para corregir injusticias, para favorecer la conexión con un medio rural cercano y vivo y la soberanía alimentaria. Los habitantes de las ciudades ya superamos con creces y más creces a la gente del medio rural y nuestras decisiones marcarán la diferencia. Gustavo Duch es el Contador del Bosque, activador de conciencias verdes y solidarias, autor de “Mucha gente pequeña” y parte del equipo editor de la revista “Soberanía Alimentaria”. Gustavo Duch es pegamento entre las iniciativas rurales con sentido común y el sentido común de los ciudadanos que se inician en él.
Hablaremos del Pacto de Milán, de la Carta por el Municipalismo a favor de la Soberanía Alimentaria, de la utopía que está comenzando a ser realidad, aparte de Milán, en Madrid, Zaragoza, Barcelona, Valencia y otros muchos municipios más pequeños. Del compromiso con la ciudadanía, de espacios participativos, de consejos alimentarios, de cocinas municipales, de mesas de trabajo. Y para ello, Gustavo nos presenta a Marijó, de una Ciudad Ecológica: Orduña, modelo de interesantes y realistas propuestas para un cambio integral hacia la soberanía alimentaria.
Nos anima el trabajo desarrollado en el "X Foro por un mundo rural vivo", que termina de celebrarse hoy en Minglanilla, Cuenca. Eso y el aniversario de la muerte de Berta Cáceres, que perdió la vida en un atentado contra la misma naturaleza por defender territorio indígena y derechos indígenas. Porque tod@s reconocemos nuestro indigenismo y a tod@s l@s activistas que pierden la vida impunemente. Nos ayudarán los textos de Gustavo Duch, también los de Ignacio Abella y José Eduardo Gimeno y los Ecos del Bosque de Óscar Prada Campaña. Todo ello concienzudamente envuelto en el despertar de conciencias que produce en nosotras las canciones de Enric Montefusco. Hoy nuestra “Meridiana”.
Así que convierte tu nevera en una herramienta definitiva para la transformación del paisaje, come los productos más locales y cercanos del territorio en el que vives, guarda tus semillas, defiende a tus agricultores y practica la soberanía alimentaria hundiendo tus raíces en un territorio conmovido donde todo lo vivo sube y celebra: ¡Arriba las ramas!
