China manifestó hoy su "firme oposición y profunda insatisfacción" con respecto a la visita realizada hoy por tres ministras del Gobierno japonés al polémico santuario tokiota de Yasukuni -ligado al pasado militarista del país- coincidiendo con el 70 aniversario de la rendición de Japón en la II Guerra Mundial. "El tempo de Yasukuni es un símbolo de la invasión lanzada por los japoneses durante la guerra", dijo hoy en un comunicado Hua Chunying, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino. "Las ministras han visitado un santuario que honra a criminales de guerra convictos y maquilla la invasión en el aniversario del día que Japón anunció su rendición incondicional. Representa de nuevo la errónea actitud de la parte japonesa sobre los asuntos históricos", añadió. La titular de reforma administrativa y activación de la mujer, Haruko Arimura, fue la primera en acudir, seguida de la ministra de Interior, Sanae Takaichi, y de la ministra a cargo de gestión de desastres, Eriko Yamatani. No es la primera vez que las tres acuden al controvertido santuario sintoísta: lo hicieron el pasado 23 de abril con motivo de la celebración del festival de primavera en el recinto. No obstante, la visita de hoy es especialmente delicada para vecinos como China o Corea del Sur, invadidos por Japón durante la II Guerra Mundial, ya que se trata del día en el que el emperador Hirohito anunció la capitulación poniendo fin a la II Guerra Mundial y a su dominio sobre ambos países. Hua urgió a Japón a que ponga en marcha su "solemne compromiso con China y la comunidad internacional y lo acompañe con acciones auténticas para gestionar de forma adecuada los conflictos, de manera que recupere la confianza de sus vecinos asiáticos y de la comunidad internacional". Yasukuni honra a los caídos por el país entre finales del siglo XIX y 1945 (entre ellos 14 criminales de guerra de clase A) y es una fuente de fricciones entre Japón y los países que sufrieron su dominio colonial el siglo pasado. 15/08/15
