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La Policía Nacional ha detenido en Vitoria a un marroquí retornado a España de la zona de conflicto en Siria que captaba y adoctrinaba a jóvenes, y en Alicante a una mujer española que colaboraba con la organización terrorista Dáesh. El hombre detenido en Vitoria, de 41 años, es un retornado instruido militarmente por el grupo terrorista Al Nusra, filial de Al Qaeda, y se dedicaba a la captación de jóvenes en la comarca guipuzcoana de Tolosaldea. Uno de sus adeptos realizó en 2013 un viaje a la zona de conflicto sirio-iraquí, donde falleció dos años después. Por su parte, la mujer arrestada en Alicante, de 36 años, colaboraba con Dáesh e intentó desplazarse con sus cuatro hijos menores de edad a la zona sirio-iraquí para unirse a las filas de la organización terrorista.

El asesino de María del Carmen Martínez, viuda del expresidente de la extinta Caja del Mediterráneo (CAM) Vicente Sala, empleó una pistola con silenciador para cometer el crimen -descerrajó dos tiros en el lado izquierdo de la cabeza-, lo que apunta a que éste fue un profesional que, incluso, podría haber huido ya de España, según fuentes de la investigación.

Aunque tras conocerse las imágenes la víctima decidió denunciar, después cambió de opinión. La existencia de la grabación ha permitido a la fiscalía y a la guardia civil actuar de oficio para que este caso de violencia machista sea juzgado. El vídeo que grabaron las cámaras de seguridad del edificio donde reside la víctima ha sido la principal prueba en este juicio. La mujer apenas da unos pasos cuando aparece su pareja y sin mediar palabra empieza a golpearla. La agresión presuntamente habría continuado pero ya lejos de la cámara que decidió instalar la comunidad de vecinos por los robos. El acusado ha evitado ver el vídeo bajando la mirada y se ha acogido a su derecho a no declarar. Al no denunciar la víctima, la grabación se ha convertido en la principal prueba. La mujer, de 38 años, también se negó a ser reconocida por un médico. En el juicio no ha querido testificar. La fiscal ha elevado la petición de pena desde los 9 meses iniciales hasta 2 años y 3 meses de cárcel por un supuesto delito de lesiones. Ella acudió a urgencias supuestamente por una caída de una escalera y consta ese informe.