'Documentos TV' estrena 'Latinos, la nueva cara de América'
- Martes 8 de noviembre, a las 00:50 horas en La 2
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'Latinos, la nueva cara de América' es el reportaje que estrena esta semana 'Documentos TV'. En 2050 una de cada tres personas residente en Estados Unidos será hispana. Cincuenta y cinco millones de latinos protagonizan una revolución imparable y ganan influencia en el futuro político del país. Los expertos aseguran que ya nadie puede llegar a la Casa Blanca sin el voto latino.
“Cada treinta segundos, un latino cumple dieciocho años. Significa que son más de sesenta y seis mil cada mes. Este es el futuro del país”, explica Cristóbal Alex, presidente de la asociación 'Proyecto para la Victoria Latina', quien justifica así la revolución demográfica que se está produciendo en Estados Unidos y cuya consecuencia, a medio plazo, será que esos jóvenes latinos puedan alcanzar sus sueños y llegar a convertirse en líderes políticos y de opinión.
En 2012 el voto hispano fue decisivo para que Barack Obama lograse un segundo mandato. “Sin el voto latino, nadie puede llegar a la Casa Blanca”, asegura Jorge Ramos, presentador de Univisión, que se encuentra entre las cien personas más influyentes de EE.UU. También en la última campaña electoral han tenido un protagonismo inédito. Mientras la demócrata Hillary Clinton se ha comprometido a tomar medidas para impedir las extradiciones y facilitar la obtención de la ciudadanía, el candidato republicano, Donald Trump, ha insistido en la estrategia del miedo y ha anunciado la deportación de millones de indocumentados si llega a la Casa Blanca. Ante la evidente indignación del colectivo hispano, Trump ha tenido que matizar su discurso.
El documental cuenta historias de viajes peligrosos en busca del sueño americano y también muestra cómo, superando dificultades y prejuicios, millones de personas pertenecientes a este grupo demográfico han contribuido durante años, y siguen haciéndolo, a sostener la economía estadounidense. Los hijos de esos inmigrantes, nacidos ya en América, no se conforman con ser ciudadanos de segunda clase y reclaman el sitio que les corresponde en una sociedad en la que están cada vez más integrados.
