-¿Estáis listos? (TODOS) -Sí, Capitán.

-No os oigo. (TODOS) -¡Sí, Capitán!

-¡Uh!

-¿Quién vive en la piña debajo del mar?

(TODOS) -Bob Esponja.

-Absorbe de todo y puede explotar. (TODOS) -Bob Esponja.

-Si queréis un mundo al revés. (TODOS) -Bob Esponja.

-Limpiad la cubierta y coged vuestro pez.

(TODOS) -Bob Esponja.

Bob Esponja. Bob Esponja. Bob Esponja.

-¡Bob Esponja ya llegó!

EL DÍA DE LOS INOCENTES

(RONCA)

-¡Despierta, Gary!

Hoy nos mudamos, nos vamos de casa.

Vamos a ser campesinos.

No más comida. Lo siento, sólo comeremos cáscaras de almejas.

(LLORA)

-¡Inocente! Aquí tienes, amigo.

Tengo sed. ¡Es una sed extrema!

Estoy exhausto. Estoy impaciente por beberme todas estas bebidas.

¡Inocente! Yo mismo. (RÍE)

(RÍE)

-¿Por qué estará tan contento?

¡Uno de abril! En Bikini es el día de los Santos Inocentes.

El día favorito de Bob Esponja.

Don Cangrejo, hoy no puedo ir. Me ha pasado algo horrible.

-¿Qué te ha pasado? -He visto el calendario.

-Espera, Calamardo. Ha venido alguien a verte.

Dice que viene del Museo de Arte de la Bahía del Percebe y quiere...

...nombrarte artista del mes.

(RÍEN) -Ya he llegado.

(RÍEN) -¿Qué es tan gracioso?

¿Dónde está el del museo? (RÍEN)

-Acaba de irse. -Nos dijo que te dijéramos...

-¿Que me dijerais qué?

-Que te dijéramos... inocente.

-Ha sido bonito trabajar aquí. Gracias por todo, Don Cangrejo.

-Calamardo, espera. -Envíeme el último cheque...

...por correo, Don Cangrejo. -Era sólo una broma.

Hoy no te gastaré ninguna broma más. Lo prometo.

-¿De verdad? -Claro, hay montones de...

...posibles víctimas. ¿Verdad, Don Cangrejo?

(Pedo)

-Mientras no sea yo.

-Disculpe. Me puede decir dónde están los tenedores.

-Están ahí mismo, señora. -Pero esto es una cuchara.

-Inocente. -Ja.

(RÍE)

-Bienvenido al Krustáceo Krujiente, ¿puedo ayudarle en algo?

-Quiero dos de patatas grandes y una burger Cangreburger.

-¿Qué es eso?

-Yo no he visto nada. ¿Adónde ha ido el otro tipo?

-Inocente, estoy aquí. (RÍE)

-Eso ha estado bien, tío. (RÍE)

-¿Qué haces detrás del mostrador?

-Disculpe. Me puede poner un par de cubitos de hielo.

-Por supuesto. Un par de cubitos, marchando.

Aquí tiene. -Gracias.

(RÍE)

-Inocente.

-¿Qué le ha hecho a mi bebida? -Yo... Yo...

-Tú, ¿qué?

-Pidió un par de cubitos y sólo le puse uno. (RÍE)

-Eso es bastante gracioso. (RÍE)

(RÍE)

(RÍEN)

-Tienes los zapatos desatados. Inocente. No llevas zapatos.

(RÍE)

(RÍE)

¡Inocente!

-Se acabó Bob Esponja y sus estúpidas bromas.

Yo le enseñaré lo que es una broma de verdad.

(RÍE)

-¡Oh, vaya! Algo que limpiar.

-¡Inocente!

-¡Ah! (RÍE)

-¡Ah!

(RÍE)

(RÍE)

-¡Ah!

(RÍE)

-¡Oh!

-¡Oh! -¡Oh!

-Yo te cogeré, Bob Esponja.

-¡Ah!

-Inocente. Tontorrón.

(LLORA)

-Bob Esponja, estaba bromeando. Vosotros sabéis que era una broma.

¿Verdad?

-¡Vaya! Pobre chico.

-Ese tipo tiene algún problema.

-Inocente... ¡Idiota! -Esperen, no se vayan.

-Apestas.

-Esperen, esperen. Era una broma.

¿Por qué siempre que quiero divertirme salen las cosas mal?

No pretendía hacerle llorar. Creo que esto significa que...

...será mejor que vaya a decirle a Bob Esponja que lo siento.

Creo que eso significa que debo disculparme.

Esto va a ser más duro de lo que pensaba.

Bob Esponja, Bob Esponja, sal.

Tengo algo que decirte. Bob Esponja.

¡Huy!

Bob Esponja, he estado pensando en lo de hoy y parece que quizá...

...yo deba... Tengo una especie de...

Como contigo, yo creo que...

Esto no lo hago normalmente, así que escucha con atención.

Estoy a punto de decirte que lo... Que yo... ¡Eh!

¡Patricio! ¿Qué estás haciendo aquí?

-Cavando.

-¿Por qué llevas ese sombrero? -No lo sé.

-¿Dónde está Bob Esponja? -En casa. Está muy afectado.

-¿Por qué? -No lo sé, pero debe haber sido...

...algo bastante grave para hacerle llorar de ese modo.

-Bob Esponja, Bob Esponja, déjame entrar.

Será mejor que me dejes entrar, no quiero tener que utilizar esto.

(TOCA EL CLARINETE) -¿Qué quieres?

-Sólo quiero decir que yo lo...

-¿Qué? -Estoy intentando decir que lo...

(REBUZNA) -¿Qué?

-Estoy intentando decir que lo...

Tiene que haber una manera más fácil de hacer esto.

¿No vas a abrirla? -No puedo. No tengo abridor.

-Bob Esponja, yo... (SUSURRA)

(Sierra)

-Bob Esponja, lo que intento decirte es que yo lo...

:-* Lo siento, Bob.

Ya está. -No lo he oído.

-No importa, yo lo he dicho. Mi conciencia está tranquila.

"Debe haber sido algo grave para hacerle llorar de ese modo."

"Inocente... ¡Idiota!"

"Apestas."

-¡Madre! Muy bien, muy bien. Lo siento, lo siento. Lo admito.

No pretendía herirte, me caes muy bien.

Me gusta vivir a tu lado. Me gusta oír tu sirena de...

...madrugada y tus risitas por la noche. También me gustan Gary,...

...Patricia, Arenita, Don Cangrejo y todas las demás personas con...

...las que tengo que relacionarme a diario. Yo creo que...

-Calamardo, ¿todo eso es verdad? -Sí, Bob. Todo es verdad.

-¿Incluso lo de la persecución de coches?

-Sí, lo que sea. Pero tienes que prometerme no decírselo a nadie.

-Lo prometo. -¿De verdad?

(TODOS) -¡Inocente!

-Inocente. Tenéis razón. Inocentes, os he engañado a todos.

(RÍE)

-¿Qué haríamos nosotros sin Calamardo?

LA ESPÁTULA DE NEPTUNO

-¡Oh! -¡Oh!

-¡Uh! -¡Oh!

-¡Oh! -¡Uh!

-¡Uh! -¡Oh!

-El no va más en utensilios de cocina: la espátula de oro.

-Bob Esponja, mira lo que pone aquí.

(LEE) "Muchos han intentado sacar la espátula de esta grasa...

...antigua y todos han fracasado." -¡Oh!

(LEE) "Sólo un cocinero digno del Rey Neptuno puede empuñar la...

...espátula de oro." (AMBOS) -¡Guau!

-Sácame una foto con la espátula. Vale, estoy listo.

-Disculpe. ¿Sabe dónde está la sección del menú?

-¿La sección del menú? Eso es fácil. Está por ahí.

-¡Dios mío! -Anda. ¡Eh, la luz ha cambiado!

-Eh, Patricio. -Espera, ya casi está.

(Risas)

-¡Sí! Por fin alguien digno de ser el cocinero real.

¿Quién ha sacado la espátula de la grasa?

-Yo, señor Neptuno. Bob Esponja.

(RÍE)

-Muy gracioso, chico. No eres más que una humilde esponja amarilla.

Enclenque, insignificante... Un plebeyo.

Nunca podrías ser el cocinero de un dios,...

...por eso es muy gracioso.

Échate a un lado mientras busco al verdadero cocinero.

Tú, no; tú, tampoco; tú eres demasiado bajito. ¡Eh!

-Pero, pero... -Un proveedor de comida.

Tú debes ser mi nuevo cocinero. -Lo siento, Rey Neptuno.

Yo no los hago, sólo los vendo. -¿Quién ha sacado la espátula?

-Lo hizo él.

(RÍEN)

-Es incluso muy gracioso.

Tú, crustáceo. -¿Quién, yo?

-Tienes el físico de Atlas. -Gracias, me entreno.

-Haz poses conmigo. -Vale.

-¿Sacaste la espátula de la grasa? -No, fue Bob Esponja.

-Esto ya ha ido demasiado lejos. ¿Dónde está mi cocinero?

Tú, con tu prodigioso contorno, deberías saber quién puede...

...hacer una hamburguesa que complazca un paladar real.

¿Esperáis que me crea que esta criaturilla es un cocinero real?

Supongo que no tendréis ninguna prueba.

Esta cosa no sirve ni para limpiar la aleta real. Además,...

...no es suficiente con sacar la espátula de una plancha de grasa.

Hay ciertas cualidades que debe tener un cocinero real.

-¿Por ejemplo? -Debe ser... zurdo.

-Soy ambidiestro.

-El cocinero real lleva calzoncillos rojos.

No azules.

La cartera del cocinero tiene... Sus zapatos son...

Tiene seis...

-Él es el nuevo cocinero real y usted lo sabe.

Hace calor aquí, ¿no? -Patricio. Usted ha hecho daño...

...a mi amigo. Usted no es un rey, es un matón y un mentiroso.

-Pequeño, ¿crees que tienes agallas para ser mi cocinero?

Te demostraré que no vales.

Tendrás que superar un desafío.

-¡Adelante! Bob Esponja puede superar lo que sea.

¡Ay! -La arrogancia de tu amigo...

...te costará cara. Tendrás que superar dos desafíos.

-¿Sólo dos? ¿Qué son dos desafíos para alguien como Bob Esponja?

-Tres desafíos. -¿Tres?

Tres desafíos no son nada, podrían ser hasta 500.

-Se acabó.

-Con uno estará bien. -No habrá más que un desafío.

Te enfrentarás a mí en el desafío final.

-Aceptaré su reto, si cuida a mi amigo.

-¡Ah, sí! El redondito, lo repararé.

-¡Bob Esponja, Bob Esponja, Bob Esponja! Estás aquí.

-¿Cómo estás? -Bien. ¿No estás más alto?

-Y ahora, aquí tienes el destino que te espera.

Si por casualidad superas el reto, tu recompensa será magnífica.

Observa. -¡Eh!

-Ahora, contempla esto. Mi querida casa de la Atlántida.

Un premio digno de Apolo. Vivirás aquí en este glorioso lugar.

Cocinarás sólo para mí y serás un dios.

-Eso suena muy bien. -Si no ganas,

deberás dejar de cocinar para siempre.

¿Qué me dices?

-Estoy listo. -Entonces, al estadio Poseidón.

"Damas y caballeros, bienvenidos al desafío final."

(EL PÚBLICO APLAUDE)

-El primero que haga 1.000 Cangreburgers, gana. Daos la mano.

-Que gane el mejor. -Volved a vuestros rincones...

...y empezad a cocinar cuando suene la campana.

Tengo total confianza en ti. ¡Todo a Neptuno!

-No soy bueno para cocinar en la Atlántida, Patricio.

No debería haber aceptado el reto. -No abandones tu sueño, Bob.

La gente solía decirme: "Patricio, nunca llegarás a nada,...

...siempre tendrás la cabeza en las nubes". Y mírame ahora.

A por ellos, tigre.

(Campana)

(RÍE)

-Érase una vez...

(RÍE)

-Perfecta.

-¡Gané!

(TODOS APLAUDEN)

-Perdiste.

¡Cangreburgers gratis para todos!

(TODOS ESCUPEN)

-Pero bueno, ¿no tenéis gusto? No les pasa nada.

Están deliciosas.

(TODOS) -¡Come, come, come!

-De acuerdo. No están buenas.

¿Qué os hace pensar que la suya estará mejor? Dame eso.

Está tan buena que creo que me gustaría probarla otra vez.

-Señor, ¿qué opina? -La tuya es superior.

Por tanto, te lo concedo, Bob Esponja. Tú ganas.

-¡Sí, hurra! -Vamos a la Atlántida.

(Risas)

¿Qué le hace gracia?

-Tú, Bob Esponja. ¡Esa cosa repulsiva en mi palacio!

-¿Quiere decir que él no puede venir?

(RÍE)

-Por supuesto que no. -¿Y mis amigos?

-El único amigo que necesitarás es la parrilla real.

-Me ha alegrado mucho conocerte, amigo.

(LLORA) -Lo siento, Cangrejo.

Yo también le echaré de menos. -He perdido mi apuesta.

-Vamos, Bob. Coge tus cosas. Es hora de partir...

...hacia la Atlántida. (TOCA EL TIMBRE)

-Yo... Yo... (LLORA) No quiero ir.

-Ya es demasiado tarde. No puedo vivir sin tus hamburguesas.

Vas a ser un dios y te gustará.

Quizá tengamos un problema. -Espere, Neptuno. Tengo una idea.

-Buenos días a todos. -Hola, Patricio. ¿Qué vas a tomar?

-¡Ah! ¿Me disculpas?

-Esta maldita cocina me ha quemado el dedo.

Sufrirás mi cólera, cocina. -¿Qué te he dicho sobre...

...utilizar tus poderes, aprendiz? -Las Cangreburgers perfectas...