Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Podemos mantiene su rechazo al traspaso de competencias de inmigración a Cataluña. La secretaria general, Ione Belarra, afirma que no es una delegación de competencias, sino "una ley abiertamente racista que solo se entiende en el marco de la competición electoral entre Junts y Aliança Catalana". En 'Las Mañanas de RNE', dice que no puede entender cómo Sumar y ERC "se dejan arrastrar por este discurso" e insiste en que son ellos los que tienen que dar explicaciones. Apunta que "solo hay que leer la ley para saber que se describe la inmigración como una amenaza y un riesgo para la convivencia y para la cohesión social. Nosotras no pensamos así".

Belarra hace referencia a este párrafo de la proposición de ley: "La responsabilidad de los gobiernos no consiste solo en atender estas necesidades de manera sostenible, sino también en evitar posibles efectos que puedan representar un riesgo para la convivencia y la cohesión social". Leído por Juan Ramón Lucas, la secretaria general responde: "Es un mecanismo que se llama criminalización, que consiste en asociar la inmigración a cosas negativas. Es lo que se está haciendo en esa ley, por eso no lo podemos votar". Insiste en que lo que es un riesgo para la cohesión social "son los racistas de Vox".

Sobre si Podemos entrará en la coalición Por Andalucía junto a Izquierda Unida, la secretaria general expresa: "¿Qué proyecto vamos a construir? En este momento tenemos a IU siendo parte de un Gobierno que ha apostado por el mayor rearme de la historia de nuestro país". Belarra asegura que la izquierda tiene que ser capaz de cambiar las cosas y "no podemos estar plegados al PSOE".

La riera que cruzaron las dos víctimas en Cataluña normalmente no lleva agua, pero con las fuertes lluvias de domingo alcanzó casi tres metros de altura. En episodios de lluvias torrenciales la recomendación es siempre no cruzarlas, porque con tan solo 15 centímetros de agua pierde adherencia.

Según los expertos, si un conductor llega a un tramo inundado no hay que intentar atravesarlo, porque si el agua cubre solo una parte de la rueda el conductor ya se encuentra en riesgo extremo. Según el suboficial de Bomberos de Madrid, Ángel Núñez, explica que "a partir de 15 centímetros de agua no perdemos la adherencia del coche, perdemos el control y a partir de 30 centímetros para arriba el coche empieza a flotar y nos arrastrará la corriente".

En estos casos extremos lo más recomendables es abandonar el vehículo inmediatamente. Si no se puede abrir la puerta hay que romper la ventanilla. Según Núñez, hay que sacar "el reposacabezas y con la zona punzante romper la ventanilla y siempre saldremos por el lado contrario de la corriente y subir al techo del coche para que nos socorran".

Por último, es importante no confiarse por mucho que se conozca el camino. La corriente puede cambiar la orografía del terreno y un socavón o una alcantarilla pueden convertirse en trampas inesperadas.

Imagen: GETTY