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El presidente del gobierno llegará en las próximas horas a España de vuelta de su viaje oficial a Seúl. En la Cumbre de Seguridad Nuclear ha mantenido varios contactos, entre otros con el presidente Obama. La visita la ha cerrado con el presidente surcoreano.

La Cumbre de Seúl ha concluido con una declaración que insta a minimizar el uso de uranio enriquecido para 2013. Barack Obama ha tenido que explicar su conversación con el presidente ruso que captó un micrófono abierto y ha dicho que no tiene nada que esconder sobre sus negociaciones con Moscú por el escudo antimisiles europeo.

Los líderes de 53 países reunidos en la Cumbre de Seguridad Nuclear de Seúl han llamado a minimizar el uso de uranio altamente enriquecido para finales de 2013 y renovaron su compromiso de tomar medidas de protección de su material atómico para 2014. En un comunicado emitido al término del encuentro, los dirigentes han instado además a la adhesión a los instrumentos multilaterales relacionados con la seguridad nuclear y han subrayado el "papel central" del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) en este terreno.

Los micrófonos de la II Cumbre sobre Seguridad Nuclear, que se clausura este martes en Seúl, han jugado una mala pasada al presidente de EE.UU., Barack Obama, al captar una conversación privada entre él y el presidente saliente ruso, Dmitri Medvédev. En esa conversación, Obama indicaba que tendría "más flexibilidad" para tratar con Rusia sobre los desacuerdos entre los dos países acerca de la defensa antimisiles tras su reelección.

Por ello, pedía a Medvédev que transmitiera a su sucesor, el ex presidente Vladimir Putin, que le diera "espacio" hasta las elecciones de noviembre. "Estas son mis últimas elecciones. Después de las elecciones, tendré más flexibilidad", ha asegurado el mandatario estadounidense, a lo que su homólogo ruso replicó que lo entendía y que transmitiría la información.

Esa conversación ha desatado una tormenta política en Estados Unidos, donde los aspirantes republicanos a la presidencia de EE.UU. han acusado a Obama de preparar una política más blanda hacia Rusia en el futuro sin informar a la población.

Por su parte, el presidente estadounidense ha optado por tratar de restar importancia al suceso y ha bromeado con Medvédev mientras ambos esperaban el comienzo de la sesión plenaria en la cumbre. Con una sonrisa, Obama puso la mano sobre el micrófono mientras intercambiaba unas breves frases con el líder ruso en la sala de reuniones.

En la capital surcoreana representantes de más de 50 países y organismos internacionales discuten cómo prevenir el tráfico ilícito de material nuclear y combatir el denominado "terrorismo atómico". Barack Obama ha aprovechado la cita para proponer más reducciones de los arsenales nucleares.

De momento el presidente del gobierno no ha comentado los resultados de las elecciones. Mariano Rajoy siguió la noche electoral en la sede del PP. Hace unos minutos acaba de aterrizar en Seúl, donde va a participar en la cumbre internacional sobre seguridad nuclear.

Los líderes de 53 países y cuatro organizaciones internacionales han iniciado con una cena de trabajo la II Cumbre de Seguridad Nuclear que se celebra hasta el martes en Seúl, y que buscará acciones para prevenir el terrorismo nuclear.

Medio centenar de mandatarios, entre ellos los de EEUU, Barack Obama; China, Hu Jintao; y Rusia, Dmitri Medvédev, se han sentado alrededor de la misma mesa para una cena en la que evaluaron los progresos logrados desde la primera cumbre, celebrada en Washington en 2010.

Antes del inicio de la cumbre, el presidente de EEUU, Barack Obama, y su homólogo chino, Hu Jintao, se han encontrado para tratar, entre otros asuntos, sobre el programa nuclear norcoreano.

Obama busca persuadir a Hu, cuyo país es el principal aliado de Corea del Norte, para que presione a Pyongyang y este régimen renuncie a su amenaza de lanzamiento de un satélite de observación sobre un misil de largo alcance el mes próximo, en conmemoración del centenario del fundador del país, Kim Il Sung.

En declaraciones a la prensa al comienzo de la reunión, Obama ha indicado que "ambos tenemos interés en asegurarnos de que las normas internacionales que rodean la no proliferación" se respetan.

Más de medio centenar de jefes de Estado y de Gobierno se dan cita en Corea del Sur para asistir a la II Cumbre de Seguridad NuclearII Cumbre de Seguridad Nuclear. Una reunión en la que se abordará, cómo no, el desafío que suponen los programas de Irán y Corea del Norte, pero donde también se hablará de seguridad: de cómo evitar accidentes como el de Fukushima y asegurar que el material nuclear está a buen recaudo, y no acaba en manos de terroristas.

Hablamos con Vicente Garrido, director de INCIPE (Instituto de Cuestiones Internacionales y Política Exterior). Vicente Garrido, director de INCIPE (Instituto de Cuestiones Internacionales y Política Exterior).

La Cumbre, explica, significa repasar los compromisos a los que se comprometieron los Jefes de Estado y de Gobierno, hace dos años en Washington. Verificar si los Estados han hecho sus deberes y "lo primero que vamos a constatar es que se va a renovar la concienciación, hacia el peligro que puede representar el robo de este tipo de materiales y la protección de las instalaciones nucleares".

Esta Cumbre no se ocupa de la proliferación de armas de destrucción masiva, pero "hace ya unos meses Obama sí señaló esta cuestión cómo una amenaza inmediata y extrema de la seguridad global".

El peligro ahora mismo está en Pakistán, que preocupa mucho. En el asunto de Corea del Norte estamos viendo que el programa nuclear se está utilizando como un elemento de chantaje que le está dando muy buen resultado.

Lograr un mundo sin armas nucleares. Es el objetivo de esta Cumbre de Seguridad Nuclear. Los más de 60 líderes mundiales que acuden a Seúl esperan que, de aquí, salgan medidas concretas. Compromisos para reducir al mínimo el uso de material nuclear como uranio y plutonio enriquecido y que ese material no caiga en manos de grupos terroristas.

Israel ha recibido con cautela la posibilidad de que se vuelva a negociar con Irán. Aunque respalda la opción diplomática, su núcleo más duro desconfía y advierte que retrasar un ataque supondría un importante riesgo para Israel. Ya hay precedentes de ataques israelíes a otros reactores nucleares.

Los republicanos han acusado a Obama de mantener una postura débil ante Irán. Creen que a Teherán le debe quedar claro que están dispuestos a atacarle si es necesario. El presidente estadounidense les pide que no frivolicen sobre la guerra. La agencia internacional para la energía atómica, que iba a estudiar hoy la última propuesta iraní de permitir la visita de los inspectores al complejo militar de Párchin, ha postpuesto su decisión hasta mañana. Los inspectores quieren comprobar si en esas instalaciones del ejército se ha experimentado con armas nucleares o si realmente el programa nuclear iraní es civil como asegura Teherán. .

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, insiste en el derecho de Israel a defenderse y dice que el tiempo para frenar el programa nuclear iraní se acaba. El presidente de Estados Unidos asegura que su país siempre cubrirá las espaldas a la nación judía, aunque aún confía en que la diplomacia y las sanciones funcionen. Netanyahu ha añadido que su pueblo "no puede vivir bajo la sombra de la aniquilación", y todo esto bajo los focos del principal foro judío de Estados Unidos.