La deriva continental

En 1910 el geólogo Alfred Wegener observó cómo se rompían los témpanos de hielo en Groenlandia e intuyó que la tierra es más inquieta de lo que aparenta. Con el tiempo su intuición se convirtió en una teoría fundamental de la Geología: la deriva continental. Wegener sospechó que los continentes se movían, pero como no fue capaz de explicarlo sus colegas le menospreciaron. En 1960 se encontró la respuesta en lo que hoy se conoce como tectónica de placas.