'Grandes famillias' y 'Entre amigos'

El cine francés insiste en dejar constancia de su insaciable vocación de gran industria colonizadora. Como espectadores a veces tenemos suerte y otras menos. Esta semana llegan dos comedias muy diferentes. La primera es el regreso después de una década del veterano Jean-Paul Rappeneau, conocido sobre todo por su ya lejana "Cyrano de Bergerac". Ambientada en el presente, "Grandes familias" mira hacia el pasado con melancolía, al calor de unas cuantas desavenencias entre herederos y allegados, con un estupendo reparto intergeneracional con Mathieu Amalrica a la cabeza. Sobresale la habilidad del cineasta en el manejo de situaciones corales y su paso de unos escenarios a otros. En un registro muy diferente se mueve "Entre amigos", una comedia tan ambiciosa como previsible. Un reparto encabezado, por Daniel Auteill, con un puñado de estupendos secundarios, y el atractivo suplementario de alguna de sus actrices, son las bazas con las que pretende convertir en rentable espectáculo de masas su tópica aventura marina.