Garbanzos, un amor de verano

En agosto son típicos y habituales los amores de verano, pero Ángeles ha querido ir más allá y se ha ido a Ávila en busca de amores de campo. Allí se ha encontrado con Toribio, un viejo conocido, y sí, lo ha intentado, por si sonara la flauta. Pero lo que ha sonado es la vaina y, tanto machachar, tanto machacar, nuestra reportera ha conseguido que no le de calabazas, sino garbanzos.