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Es el 15 de diciembre de 1960. Balduino de Bélgica se casa con la aristócrata española Fabiola de Mora y Aragón en la Catedral de Bruselas. La boda real se retransmite en directo por la red de Eurovisión. En España la ceremonia se puede ver a través de TVE. Castellanos, barceloneses y zaragozanos, los únicos que recibían la señal de televisión, la siguen en los contados bares dotados de receptor o pegados a los escaparates de los selectos establecimientos comerciales. El 18 de marzo se había recibido la primera transmisión internacional a través de Eurovisión: la decisiva segunda parte del partido entre el Eintracht de Francfort y el Real Madrid; este último consigue su quinta Copa de Europa. El primer programa en directo desde España a la red Eurovisión, el partido Real Madrid-Olympique de Niza, se había transmitido el 2 de marzo.

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La programación para los más pequeños comenzó a popularizarse con un espacio que se llamó “Antena Infantil”. Valentina, el Capitán Tan y Locomotoro, “conductor de todo menos del codo”, protagonizaban historias divertidas que los niños veían encantados. Luego comenzó la serie de “Los Chiripitifláuticos”, aunque ya sin Locomotoro.

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“La Familia Telerín” era muy simpática entre los mayores porque con su “vamos a la cama que hay que descansar para que mañana podamos madrugar” mandaba a los niños a la cama y los padres se quedaban, tan tranquilos, disfruntando de la “tele”; pero a los más pequeños no les gustaba nada. Siempre había alguno, como el benjamín de los “telerines”, que intentaba hacerse el remolón o el calladito para quedarse a ver la película de los dos rombos. Naturalmente, era descubierto e iba detrás de sus hermanos entre alguna que otra protesta.

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El 18 de julio de 1964, Franco inauguró las instalaciones de Prado del Rey, en un acto celebrado en el que luego sería famoso Estudio 1, “el plató más grande de Europa” por aquellas fechas. La primera grabación que se hizo en aquel estudio –el sistema de grabación de vídeo había llegado a España en septiembre de 1960- fue la obra de Oscar Wilde “El fantasma de Canterville” realizada por Juan Guerrero Zamora.

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Desde ese emblemático Estudio 1, se ponía al alcance de los espectadores el mejor teatro español, como este “Alcalde de Zalamea” de la foto. Mucho se puede decir de estos “Estudios 1”. Primero se llamaron “Gran teatro” y “Fila cero”. Por sus escenarios pasaron los mejores actores españoles que hicieron populares las mejores obras teatrales clásicas y modernas. Algunas, obviamente, no podían estrenarse debido a la censura de la época, pero esto no restó calidad a las que realizadoron profesionales de la talla de Juan Guerrero Zamora, Pedro Amalio López, Gustavo Pérez Puig, Fernando García de la Vega…Luego siguieron otros como Alfredo Castellón, Gonzalo Vergel, Manuel Aguado, Pilar Miró o Cayetano Luca de Tena.

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Uno de los primeros símbolos del reporterismo internacional en TVE fue Miguel de la Cuadra Salcedo, cuya personalidad envolvió a muchos jóvenes de la época deseosos de imitar sus pasos. Junto a él, muchos otros nombres del periodismo español integran una pléyade de buenos profesionales (periodistas, cámaras, ayudantes de sonido) que en muchas ocasiones se jugaban la vida por ofrecernos una visión de lo que por entonces pasaba por la escena internacional.

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Entonces muy pocos sabían lo que significaba Hi-Fi (Hight Fidelity o Alta Fidelidad) pero el programa que llevaba por título “Escala en Hi-Fi”, se convirtió muy pronto en uno de los más vistos y populares de la televisión. La idea era revolucionaria: utilizar el truco del “play back” (simular que se canta una canción con su sonido original) para evitar la contratación de los cantantes extranjeros que por entonces “pegaban” o estaban de moda. Juan Erasmo Mochi, Luis Varela o Maria José Goyanes supieron poner un toque de modernidad musical a la programación de TVE.

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“La Casa de los Martínez” se mantuvo en antena durante cuatro años. Los rodajes tuvieron siempre el mismo decorado a excepción del verano donde la familia se trasladaba al Valle del Tietar de vacaciones. Los Martínez eran una familia de clase media, amable y dispuesta a abrir la puerta a todo aquel que llamara a su timbre. Como se si se tratara de una visita de amigos, los Martínez entrevistaban a sus invitados, les preguntaban por su vida y proyectos, y al final les obsequiaban con las llaves de su casa. Todos recordamos a Julita Martínez, Eduardo Cautelen, Pepe Rubio, Lali Soldevilla, las Hermanas Hurtado y Rafaela Aparicio, a la que desde entonces se la llamó cariñosamente “la chacha de España”.

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Narciso Ibáñez Serrador y sus “Historias para no dormir” fueron otro de los grandes éxitos de TVE. Su creador y el programa recibieron más de medio centenar de galardones. Títulos como “El último reloj”, "El muñeco", "El tonel", "El trapero", "El asfalto", “El hombre que vendió su risa", "El trasplante", "El Conjuro", dejaron en esta década a muchos españoles faltos de sueño. Junto a Ibáñez Serrador, estaban Waldo de los Ríos, Narciso Ibáñez Menta, Joaquín Dicenta, Manuel Aguado, Ángel Álvarez…

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Cuando un millón de pesetas en la España de entonces te hacía millonario, el programa “Un millón para el mejor” se pasó a ser el más popular de los concursos televisivos, y convirtió a una de sus ganadoras, Rosa Zumárraga Zunzunegui (que superó la difícil prueba de cambiar la rueda de un coche en menos de 5 minutos) en la española más conocida. También recordamos al Alcalde de Bélmez, como gran triunfador. Joaquín Prat fue el primer presentador del programa, y Jose Luis Pécker recogió el relevo.

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“Cesta y Puntos”, con Daniel Vindel, triunfó inmediatamente. Se trataba de un concurso por equipos, basado en las reglas del baloncesto, en el que los colegios españoles ponían a prueba el conocimiento de sus alumnos. Tenía la virtud de congregar a los jóvenes delante del televisor y hacerles participes de las difíciles preguntas que a veces Daniel planteaba en la cancha. Una mesa de árbitros cronometraba los tiempos y resolvía las dudas. Se mantuvo en antena hasta 1973.

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“El Fugitivo” era una de las muchas series norteamericanas que se veían en TVE. Su protagonista, David Cansen que participó en nada menos que 120 capítulos, quedó marcado para siempre como el Dr. Kimble acusado injustamente del asesinato de su esposa. Pero también dejaron huella otras series como “Ironside”, el inteligentísimo abogado en silla de ruedas; “El Santo”, un 007 televisivo, o “Los Invasores” aquellos extraterrestres que querían adueñarse de la Tierra.

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En aquella edición del Festival de la canción de Eurovisión de 1968, en Londres, la cantante Massiel ganaba, por primera vez para España, el primer puesto con la canción titulada “La, la, la”. En segundo lugar, a tan sólo un punto, quedó el inglés Cliff Richards. Aquella edición del festival tuvo su polémica en España, cuando el cantante Joan Manuel Serrat quiso cantar la letra, escrita por Manuel de la Calva, en catalán. TVE se negó y eligió entonces a Massiel para interpretarla. Al año siguiente, Salomé volvió a conseguir el primer puesto. Y, con o sin el voto de Portugal, nuestro país obtuvo luego varios segundos premios.

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“Galas del Sábado” aquel programa musical realizado por Fernando García de la Vega, consagró a Laura Valenzuela y a Joaquín Prat como una de las parejas favoritas de los espectadores. En aquellas Galas participaron los cantantes de moda y los mejores humoristas españoles. Todos recordamos el debut de Tip y Coll que desde entonces formaron una de las mejores parejas de humor de todos los tiempos.

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El 20 de julio de 1969, los astronautas estadounidenses Neil Amstromg y Edwing Aldrich hollaban por primera vez el suelo de la Luna. Aquel viaje, en el que también participó Michael Collins, fue seguido por millones de personas en todo el mundo y, por supuesto, TVE ofreció en directo, en una memorable transmisión de Jesús Hermida, aquella aventura fantástica. Fue de madrugada, hora peninsular, y muchos españoles afortunados pudieron ver desde sus casas este hecho histórico que algunos creyeron una broma.