El capitán de la selección francesa, Hugo Lloris, ha sido castigado con la retirada del carné de conducir durante 20 meses después de haber duplicado la tasa de alcoholemia al volante.
Además, el Tribunal de Magistrados de Westminster le ha impuesto una multa de 50.000 libras (56.000 euros) a Lloris, que será rival del FC Barcelona en la Liga de Campeones.
La gesta de los "bleus" cobró hoy esplendor popular en París un día después de haberse hecho real en Moscú. Los campeones del mundo comprobaron el fervor que ha provocado en Francia su logro en el Mundial, aplaudido por cientos de miles de personas en los Campos Elíseos camino del palacio presidencial.
La celebración de los franceses por su segunda estrella mundial se trasladó del césped del Luzhnike al interior del vestuario. Allí, los jugadores conataron el 'We are the Champions', besaron sin parar a la Copa del Mundo y, cómo no, ducharon con champange a Deschamps en la sala de prensa.
La celebración por la victoria en el Mundial de Francia han terminado de forma trágica. Dos hombres han fallecido y tres niños han resultado heridos graves tras un atropello mientras festejaban la consecución de la segunda estrella de los 'bleus'. Además, numerosos comercios han sufrido saqueos.
El delantero francés, MVP de la final del Mundial, ha elogiado a sus compañeros en la consecución del título, en la línea de lo dicho después por Deschamps. El seleccionador croata Zlatko Dalic ha lamentado el arbitraje.
En París, epicentro de la fiesta, y en otras partes como en Barcelona, los aficionados franceses han llenado las calles de rojo, blanco y azul para celebrar el Mundial de Rusia 2018. Los croatas también han asumido lo positivo de ser finalistas y no han derramado demasiadas lágrimas.
