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No habrá mucho margen para la improvisación: estos días los partidos pactan de qué se hablará en el debate, en qué orden y durante cuánto tiempo. Pero hay temas por los que cualquiera apostaría, como la situación económcia. Los partidos nos avanzan los temas...de la negociación: el PP afirma que quiere hacer un "amplio debate sobre economía y empleo". Algo en lo que coinciden los socialistas, que quieren que también se hable de políticas sociales. En la calle, estas son también las prioridades.

  • Los dos candidatos tienen a sus espaldas una trayectoria paralela
  • Ambos han sido ministros de Educación y del Interior
  • Han sido vicepresidentes primeros y portavoces de sus gobiernos

Quedan 6 días para el cara a cara Rubalcaba-Rajoy y PSOE y PP siguen negociando. Faltan detalles importantes como los temas o los bloques que abordarán. Pero en estos debates hay otras cosas de las que estar pendientes. ¿Cómo hay que vestirse? ¿De qué color debe ser la corbata? y el traje?. ¿Cortarse el pelo antes?. Esas cosas que parecen banales tendrán también su importancia el próximo lunes en el cara a cara entre Rajoy y Rubalcaba que verán aquí en la 1 de TVE.

Dentro de siete días, el próximo lunes, los candidatos a la presidencia del gobierno del PSOE y el PP se enfrentarán en un cara a cara televisado. El debate entre Mariano Rajoy y Alfredo Pérez Rubalcaba podrán verlo aquí, en la uno de Televisión Española. Esta semana ambos partidos trabajan con expertos en comunicación política para prepararlo todo, porque en estos duelos se cuida hasta el último detalle.

El Comité ejecutivo del Partido Popular ha aprobado hoy por unanimidad el programa con el que se presentan a las elecciones del 20 de noviembre. Un programa centrado en la creación de empleo y, según Rajoy, sin promesas imposibles. El líder del PP ha enumerado las grandes propuestas y mañana la web del partido colgará el documento completo.

"No prometeré nada que no vaya a cumplir". Con estas palabras ha presentado el candidato del PP a las elecciones generales del 20N, Mariano Rajoy, el programa electoral con el que concurre a los comicios. "No comprometeré cosas que nos gustaría hacer pero que no tengo claro que se puedan hacer", ha añadido. El líder del PP ha presidido este lunes en Santiago de Compostela el Comité Ejecutivo Nacional en el que se ha aprobado el programa electoral que defenderán los 'populares' para obtener la confianza de los ciudadanos en las urnas. "Lo que no vamos a hacer es lo que hicieron otros, que hicieron lo contrario a lo que prometieron y ahora prometen lo contrario a lo que han hecho", ha señalado, en referencia al Gobierno socialista. "Quienes crearon el problema no pueden ser la solución", ha aseverado.

Mariano Rajoy se dirige a los españoles desde el balcón de la sede nacional del PP, en la calle Génova de Madrid, tras perder las elecciones del 14 de marzo de 2004 frente a José Luís Rodríguez Zapatero. Rajoy reconoció que este último había sabido hacerse "acreedor" de la "confianza" de los españoles y elogió la alta participación de los ciudadanos tras los atentado del 11M de Madrid.

Después de que durante 15 años no se hubiera celebrado ningún debate electoral en España, José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy protagonizaron dos debates en la campaña electoral de 2008. Así se vivió en los bares y en las calles aquel debate electoral, que se convirtieron en uno de los programas más vistos de la historia de la televisión.

El PP ha incluido en el programa con el que se presentará a las próximas elecciones generales el compromiso de no negociar con los terroristas "ni por la presión de la violencia ni por el anuncio de su cese". Añaden los populares en su programa, a cuyo resumen ha tenido acceso RNE, que ese compromiso será, si gana Mariano Rajoy los comicios, "un principio básico de la política de seguridad del Estado".

Mariano Rajoy se dirige a los españoles desde la sede del PP, en la calle Génova de Madrid, después de haber perdido sus segundas elecciones frente a José Luís Rodríguez Zapatero el 9 de marzo de 2008. Rajoy pronunció un enigmático "adios" junto a su mujer, Viri, que fue interpretado como el anuncio de su marcha. Finalmente decidió seguir y presentarse al Congreso de Valencia para ser ratificado como líder.