Todavía resulta casi imperceptible el repliegue de los invertebrados. Algunos, incluso, nacen estos días, como sucede con una de las mariposas más espectaculares de nuestros montes, la vulcana, que tendrá tiempo de viajar hacia el Norte antes de que el frío la inmovilice o la mate. Capricho viajero que rompe la norma: esa que impulsa hacia el Sur a decenas de millones de aves de todo nuestro continente. Así nos informa fenológicamente Joaquín Araújo en su “Calendario de la Naturaleza” publicado por Tundra.
Bienvenid@s a un bosque que tiene que dejar de estar habitado, o al menos con otra forma de pensar y de actuar, por esa quinta parte de la población mundial que desperdicia, o desperdiciamos aún, el 80 por ciento de los recursos naturales. Es decir, que consumimos y producimos por encima de la capacidad terrestre para renovarse. Así que acudimos a Brenda Chávez, experta en consumo, experta en conciencia ecologista, experta en dar claves, exactamente para un consumo consciente. Objetivo: entrar en los círculos virtuosos del consumo... pero antes hay que salir del círculo vicioso en el que estamos inmers@s. Además, Brenda Chávez es una de las compañeras que integran el potente colectivo de investigación Carro de Combate.
Y bienvenid@s también a un bosque habitado por siete millones de especies que no han sido relacionadas hasta el momento y, que tal vez, ya se han extinguido por cuenta del cambio climático, sin percatarnos de sus aportes a la biodiversidad. Y es que tenemos un ecosistema que nos provee de muchos servicios, pero sólo conocemos un millón de especies. Existe el riesgo que si una de estas piezas se pierde, el ecosistema entero se pueda colapsar, como dice Camilo Mora, que ha intentado calcular el número exacto de especies en el planeta Tierra.
L@s taxónom@s llevan 250 años clasificando las especies descritas, pero solo se ha descubierto el 14% del total y el 9% de las marinas. Para nuestro científico conmovido de hoy, Ángel Lora, doctor en Biología y profesor e investigador en la Universidad de Córdoba, el viento no es sólo el viento. El sonido, el color, el movimiento… no es sólo poesía. Es ciencia, y son realidades ecológicas. A Ángel Llora le conocimos gracias a Mar Verdejo Coto, Paisajista del Alma Verde (con quien también hablamos) y acompañad@s por Pilar Socorro.
Y para potenciar la divulgación científica y conmovida de Ángel Lora y de Brenda Chávez, contamos con las ideas y las creaciones de Edward O. Wilson, Raúl de Tapia que es Raúl Alcanduerca, James Lovelock, Masanobu Fukuoka, Francis Hallé, Carl Sagan y la música Coque Malla y la de un biólogo que no ha dudado en publicar un disco titulado así “Biólogo”, y que no es otro que Amaro Ferreriro. Todo ello texturizado sonoramente a través de las voces del Club de Hojarasca: Álvaro Soto, Laura Barrachina, Laura Martínez, Carolina Alba Castro y José Manuel Sebastián Campo. Además, el plantabosques Natxo Blanchart López de la Asociación Arriba las ramas nos trae en Las ramas arriba a Gema Sánchez, de Viveros Municipales de Madrid.
Y ahora sal al encuentro del viento sin destino, que se cuela por las faldas del amor de un@ soñador@ clandestin@, que se juega hasta la vida para generar vida y crear vida a partir de una brizna de hierba, sin duda, territorio conmovido… ¡Arriba las ramas!
HT: #DudaDeTuConsumoRadio3
