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Puigdemont, a la comisión del 155 del Parlament: "La venganza del Estado aún dura"

  • Comparece por videoconferencia desde Bruselas y acusa al Estado de "forzar la Constitución" con el 155
  • Defiende la DUI como una "opción digna" ante la "falta de garantías" del Gobierno central

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Puigdemont dice que no se "podrá pasar página" del otoño de 2017 hasta que el Estado "pida perdón"

El expresidente catalán Carles Puigdemont, huido de la justicia española, ha comparecido este martes por videoconferencia en la comisión de investigación de la aplicación del artículo 155 de la Constitución que se celebra en el Parlament. En ella, ha acusado al Estado español de perpetrar en Cataluña "un golpe de Estado" en octubre de 2017 que "desató una operación de venganza que aún dura".

"En octubre de 2017 España volvió a ser oscura y tenebrosa, la de siempre, que erróneamente habíamos creído sepultar en una lápida de cuatro décadas de democracia ejemplar", ha afirmado Puigdemont desde Bruselas al Parlament catalán, donde hace una semana comparecieron también los exconsellers presos. En esta ocasión tampoco han participado los diputados autonómicos del PSC, Ciudadanos y PP.

Ha acusado al Estado de "resolver las disidencias a golpe de fuerza" con las cargas policiales por el referéndum ilegal del 1-O y de hacer "un golpe de Estado" y de desatar "una operación de venganza que aún dura".

En su intervención, ha acusado a los "constitucionalistas" -en referencia a PP, PSOE y Ciudadanos, que apoyaron la aplicación del 155- de "forzar la Constitución" y de llevar a cabo una "aplicación anticonstitucional" de este artículo por el que se intervino la autonomía catalana y se disolvió el Govern de la Generalitat. Considera además que la aplicación del 155 ya estaba decidida antes del 1-0.

Acusa al Estado de "forzar la Constitución" con el 155

Porque, expone, la Constitución "obliga al procedimiento de dialogar" mediante un requerimiento al presidente autonómico para buscar una solución y que solo si hubiese fracasado la vía del diálogo, entonces estaría justificada la aplicación del 155. "No estuvo entonces ese requerimiento y esa vía del diálogo. Ni antes ni después permitieron que el Govern estuviera representado por nuestro delegado en Madrid, Ferrán Mascarell".

Hacer elecciones a cambio de evitar el 155 hubiera ahorrado mucho dolor

Puigdemont ha explicado que "hubiera convocado elecciones anticipadas" para evitar el 155 "si el Estado hubiese dado las garantías": "Hacer elecciones a cambio del 155 hubiera ahorrado mucho dolor y nos hubiese permitido reunir fuerzas para culminar el 'procés'".

"La de las elecciones era la opción responsable, aunque hay quien quiere hacer creer que la actitud responsable era la que lideraba -el expresidente del Gobierno- Mariano Rajoy", ha criticado Puigdemont, quien ha añadido que "para la historia quedará muy claro que, si se echó de menos la responsabilidad, fue en quien más debía ejercerla, el Estado español".

La DUI era una opción digna y democrática

Ha justificado que, al no haber garantías del Estado, la declaración unilateral de independencia (DUI) del 11 de octubre -y su ratificación en el Parlament el 27 del mismo mes- "era una opción digna y democrática para continuar el camino, porque el Estado no pretendía la renuncia a la independencia, sino la humillación a los millones de personas que votaron el 1-O y a los que salieron a manifestarse el 3-O".

"Quedó claro que el Estado quería castigarnos porque le dejamos en evidencia el 1-O", ha incidido el expresidente catalán, que ha acusado al Estado de "xenófobo" por "querer perjudicar a todo un pueblo".

No se podrá "pasar página" hasta que no "pidan perdón"

Puigdemont considera que no se podrá "pasar página" de los hechos acontecidos en el otoño de 2017 en Cataluña hasta que el Estado "pida perdón" por la activación del 155 y la "represión".

"No se puede pasar página inocentemente sin asumir responsabilidades (...) Ya se hizo con error con el régimen del 78. Se pidió lo mismo: pasemos página, no hace falta que investiguemos los crímenes del franquismo, no hace falta que restituyamos los derechos que se pisaron de tantas familias", ha dicho.

El 'expresident' ha incidido en que la autodeterminación es "irrenunciable" y clave para superar la "cultura del 155": "Solo nosotros podemos decidir nuestro futuro, no porque seamos mejores que nadie, sino porque todos los catalanes somos un sujeto político con derecho a decidir su futuro".

Ha considerado, sin embargo, que "solo una minoría muy minoritaria de catalanes" defiende que Cataluña es una región de España. Aún así: "Me encantaría perder un referéndum de independencia; sería la constatación que se han respetado nuestros derechos, que hemos ejercido el derecho de autodeterminación". Por último, ha criticado que "España ha aplicado un 'brexit' judicial en la Unión Europea" por el conflicto que ha habido en las últimas semanas con las sentencias españolas y las europeas respecto a los líderes del 'procés'.