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Crónicas. "Badajoz 1936"

  • Crónicas se suma al 75 aniversario del comienzo de la Guerra Civil Española
  • Emitimos dos reportajes: Badajoz 1936 y Paracuellos en la memoria
  • Violencias de diferente signo con un nexo común: el sufrimiento de los inocentes

Por
Crónicas - Badajoz 1936

FICHA TÉCNICA

Guión: Reyes Ramos

Realización: Carlos Gómez López

Imagen: Ismael García

Sonido: Aurora Álvarez

Postproducción: Ricardo Lago

En Crónicas nos sumamos al 75 aniversario del comienzo de la guerra civil española con dos reportajes: “Badajoz 1936” y “Paracuellos en la memoria”.

Hablan de dos grandes matanzas en los primeros meses de la contienda con un nexo común: el sufrimiento de los inocentes.

Badajoz 1936: a sangre y fuego

El 17 de julio de 1936 estalla, en el Marruecos español, la sublevación contra la II República. Un día después, los militares rebeldes dan el golpe de estado en la Península.

En nuestro reportaje, viajamos al verano del 36, cuando las columnas militares procedentes de África pasan a sangre y fuego por la provincia de Badajoz. Su meta es Madrid, que sigue siendo republicana.

Aquellas tropas de legionarios y regulares, las mejor preparadas para la guerra del ejército español, utilizaron el terror como arma de guerra, asesinando a cualquier sospechoso de ser republicano.

Su forma de actuar: saqueos, violaciones y muerte, era la misma estrategia de la guerra colonial.

Encarna no puede llorar

Llerena fue uno de los pueblos de la provincia de Badajoz donde los sublevados pusieron en práctica la estrategia de eliminar al contario ideológico.

Encarna Ruiz tenía 16 años cuando asesinaron a su madre. Tuvo que tragarse las lágrimas, porque el dolor les delataba, y desde entonces no puede llorar.

Heridas cerradas

Su madre se llamaba María Morgado y es una de las víctimas de la represión que la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Extremadura exhumó de la fosa de El Romanzal.

Una tierra que nunca se cultivó

El uno por ciento

Las columnas rebeldes mataban, al entrar en una localidad, al uno por ciento de la población. Primero, políticos republicanos, sindicalistas, maestros…Si habían huido, sus padres, hermanos, amigos…

Es lo que pasó en Zafra, pese a que allí no hubo resistencia y el alcalde socialista, José González Barrero, protegió la vida de los presos de derechas. La represión que ha documentado el historiador José María Lama, fue feroz.

Símbolo de memoria y desmemoria

Las tropas abandonaban los pueblos a las pocas horas de conquistarlos, pero quedaba la represión.

Las autoridades obligaban a las familias de izquierdas a colgar un cuadro en la puerta de su casa para ser identificadas.

Los cuadros de la vergüenza

Las letras pendientes de pago de una máquina de coser

Las letras de una Singer que se dejaron de pagar en el verano de 1936, han servido al historiador Francisco Espinosa para rescatar la historia de la maestra de Villafranca de los Barros. Los sublevados le aplicaron el bando de guerra, la enterraron en una fosa común y ensuciaron su memoria.

Historia de una maestra

La masacre de Badajoz en la prensa internacional

Los sublevados tomaron la ciudad de Badajoz a mediados de agosto de 1936. Uno de sus errores de estrategia fue autorizar la entrada en la ciudad de periodistas internacionales, que se convirtieron en testigos de una de las mayores masacres de la guerra.

Las crónicas hablaron de un número incontable de muertos en las calles, de republicanos asesinados en la arena de la plaza de toros…

El reportero francés René Brut consiguió filmar centenares de cadáveres carbonizados en el cementerio viejo de San Juan. Sus imágenes, dieron la vuelta al mundo.

El holocausto español, como lo ha llamado Paul Preston, se hizo visible fuera de nuestras fronteras.