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Censo e inmigración en Europa

  • Cuatro corresponsales de TVE analizan la  situación de la población inmigrante
  • El funcionamiento del censo varía mucho en Alemanía, Paris, Londres o Italia

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Mundo 24H - Censo e inmigración en Europa (Corresponsales en 24 Horas de TVE)

El programa 'Corresponsales en 24 Horas' de TVE repasa la situación del censo y la inmigración en cuatro países europeos a raíz de la polémica abierta en España por el uso y la función del padrón municipal y si es legal o no empadronar a los inmigrantes irregulares.

Alemania, por Miguel Ángel García

Lo primero que tienes que hacer al llegar a Alemania es acudir al ayuntamiento y hacer esa inscripción. En ella, no sólo se incluye tu nombre o tu sexo sino también das detalles de tu religión, que luego servirá para determinar la cantidad de dinero que tienes que pagar en concepto de impuesto.

Es tan estricto que sólo puedes estar incluido en ese padrón si tienes un visado de turista legal o si eres ciudadano de la Unión Europea. Si no tienes ese papel,  apenas podrás dar un paso en Alemania porque te lo piden hagas lo que hagas: comprar un coche, hacer un seguro, buscar trabajo, alquilar una casa o acceder a la sanidad.

Según la ley, si un inmigrante ilegal acude a un ayuntamiento para inscribirse la autoridad pública tiene la obligación de denunciarle a la Policía para proceder a la expulsión.

Sin embargo, según relatan los inmigrantes ilegales con los que hablamos, y que no tienen ese papel, sí reciben atención médica si van a un hospital de urgencia y es un caso extremo.

En el caso de la educación, en las escuelas los inmigrantes admiten a los hijos de forma irregular para no dejarlos en la calle sin asistencia.

Roma, por Marisa Rodríguez

No tener papeles en Italia es un delito. La clandestinidad, según la ley de seguridad de este país, contempla multas que van desde entre cinco mil a diez mil euros, quien no esté regularizado será inmediatamente expulsado o se arriesga a ir a la cárcel. También hay penas de prisión para  los ciudadanos que alquilen una vivienda a un  inmigrante irregular.

La ley persigue e investiga más de 17.000 casos de matrimonios de convivencia, ya que ningún italiano se puede casar con un clandestino.

Para estar empadronado en el país transalpino hay que tener obligatoriamente el permiso de residencia, que te da acceso a la tarjeta sanitaria, la matriculación escolar, además de poder sacarte el carné de conducir o comprar una casa.

Para votar, los ciudadanos empadronados, con permiso de residencia y procedentes de otro país europeo pueden participar en las elecciones locales, regionales, provinciales o europeas, aunque no en las nacionales.

No es el caso de los inmigrantes que están regularizados, pero proceden de un país extra comunitario, no tiene derecho a voto en ninguna cita electoral.

Todos los inmigrantes regulares e irregulares empadronados en Italia tienen derecho a educación y sanidad.  La gran diferencia es que los que están en el padrón tiene derecho a ser asignados a un hospital, de modo que un médico les haga seguimiento.

Si no estás regularizado no tienes tarjeta sanitaria, puedes acudir a un hospital pero se corre el riesgo de ser denunciado por otro paciente. Por ello los extranjeros 'sin papeles' suelen acudir a ambulatorios que dependen de ONG's.

En el caso de los niños, todos tienen derecho a educación y sanidad, aunque el Gobierno de Berlusconi acaba de aprobar una ley que no permite más de un 30% de niños inmigrantes en las escuelas italianas.

Se calcula que hay entre 750.000  y un millón de ciudadanos irregulares en toda Italia, la mayoría de ellos procedentes del norte de África y o de países del centro y el sur de América.

Paris, por David Picazo

En Francia no se habla de padrón, sino de censo y sólo cumple una función estadística con el objetivo de contabilizar el número de personas que hay en territorio francés, vivan dónde vivan y sea cuál sea su situación legal.

Las autoridades públicas animan a todos los ciudadanos, inmigrantes -legales o no- a inscribirse en este registro, garantizando la confidencialidad.

La asistencia médica es universal, pero los extranjeros en situación irregular sólo son atendidos si peligra su vida y es una situación extrema.

En el caso de la educación -gratuita, universal y obligatoria- los inmigrantes ilegales han de llevar a los niños al colegio y si no lo hace corren el riesgo de delinquir.

En caso de que se descubra su condición de clandestinidad serán expulsados del país, como ocurrió en el 2009 con 29.000 personas.

Según el Gobierno se calcula que en Francia hay entre 200.000 y 400.000 inmigrantes ilegales, aunque las ONG's hablan de medio millón.

Reino Unido, por Ana Bosch

Las autoridades británicas no exigen a los ciudadanos ni un documento de identidad obligatorio, ni un empadronamiento como tal.

Lo que da derecho a los servicios sociales como la sanidad es un documento que demuestre que se está viviendo en el país, puede ser una simple factura o en el caso de los extranjeros un pasaporte.

Queda en manos del ambulatorio el admitirlo o no a ese paciente y nadie le obliga a comprobar cuál es la situación legal del inmigrante.