Subtitulado por TVE.
Tengo una pasión,
una pasión que siempre me acompaña
y con la que he aprendido
a escuchar, a llorar, a sentir,
a reír, a amar, a vivir,
la ópera.
Una pasión sin límites
que me llena día a día;
una pasión en la que siempre
he encontrado una respuesta,
una pasión que me lo ha dado todo
y que necesito y quiero compartir
con todos vosotros,
porque la ópera es la vida,
y compartida...
siempre es mucho mejor.
Para todos los que buscáis
la felicidad
y pensáis que la encontraréis
en el dinero y en el consumismo,
para todos los que creéis
en el espejismo de que el éxito está
en la fama y en el reconocimiento
público, para todos vosotros
esta es... vuestra ópera.
Hoy vamos a jugar
a ser ricos y famosos.
Vamos a hacer todo el programa aquí,
en el Paseo de Gracia de Barcelona,
la avenida más famosa y más cara
de mi ciudad.
Esta calle es el escaparate
de grandes obras modernistas
de Gaudí, pero también el escaparate
de la moda y el gran lujo.
Un lugar en el que sin duda, Manon,
la protagonista de nuestra ópera
de hoy, se hubiese sentido
como pez en el agua,
porque esta calle tiene
todo lo que ella deseaba, lujo,
dinero y riqueza.
Manon es una mujer compleja,
exactamente igual
que Holly, la protagonista
de la novela de Truman Capote,
"Desayuno en Tiffanys",
interpretada en el cine
por la carismática Audrey Hepburn.
Una mujer un poco alocada
que cautiva a los hombres
para que satisfagan
todos sus caprichos.
A la protagonista de nuestra ópera
le pasa lo mismo;
ambas consiguen el lujo que desean,
el problema es que, aún así,
no encuentran la felicidad.
Estoy convencido
que millones de veces
os habéis preguntado
qué es la felicidad,
o tal vez,
o que más os hayáis preguntado es
cómo se consigue.
Sí, claro, ya lo sé,
existen miles de respuestas
a esta pregunta
pero estoy convencido que la clave
para dar con la respuesta exacta
es saber si en realidad somos
como queremos ser.
Por eso tengo una pregunta,
la misma pregunta
para todas las mujeres, sean
de la edad y nivel social que sean.
¿Qué mujer te gustaría ser?
Me gustaría ser Angelina Jolie
por la fuerza y personalidad
que tiene.
Mirad, aquí lo tenemos. Esta son
las tres mujeres escogidas:
Actrices y cantantes;
mujeres todas ellas
que comparten una característica:
son mujeres ricas y famosas.
Es curioso que nadie haya escogido
por ejemplo,
a una científica como Marie Curie,
o una escritora tan distinguida
como Virginia Woolf,
tampoco hay ni un solo voto
para madre Teresa de Calcuta
o para Indira Gandhi
o para Evita Perón,
pero lo más curioso de todo,
nadie ha dicho: yo no quiero ser
nadie más que yo,
yo soy yo, y punto.
Parece evidente
que muchas personas
comparten el mismo sueño
que nuestra protagonista.
El sueño de ser ricas y famosas.
Esta es, como ella misma dice,
"es la historia de Manon Lescaut".
Esta es la primera aria de Manon,
Massenet nos descubre
a la protagonista. Una chica
algo ligera de cascos
a la que su familia
pretende encerrar en un convento.
Quieren frenar la fascinación
que siente
por todo lo que la rodea.
Manon vive obsesionada
por el glamur que ve en las revistas
Es joven y quiere vivir la vida.
Basta escuchar lo que canta
para ver sus ganas
de comerse el mundo.
Ante tantas cosas nuevas
creía tener alas
y volar hasta el paraíso.
Para hablar de esta ópera
instalaremos un piano
en la coctelería más lujosa
del Paseo de Gracia;
un lugar muy emblemático;
era la sede de un antiguo banco.
Mirad, todavía se conservan
las cajas de seguridad.
¿Que mejor lugar
para hablar de Manon
que la sala donde se guardaban
muchas de las fortunas y las joyas
de esta ciudad.
Ya sabemos quién es Manon,
ahora lo que quiero explicaros
es la música de Massenet.
Una música que es alucinante,
una música que os envuelve,
pero sobre todo,
y estoy seguro
que no os ha pasado desapercibido,
es una música que suena...
cómo decirlo, suena...
muy francesa, una música que tiene
un aroma muy francés.
Es lo que se conoce en el mundo
de la música como...
el "toc masseneti".
Para entenderlo mejor imaginemos
que el ritmo que voy a hacer ahora
con la mano izquierda son
unas fresas. Voy a tocar un ritmo
que no es de Manon,
es de otra ópera de Massenet,
una ópera muy conocida que se llama
"Thaïs", y voy a tocar el ritmo
con la mano izquierda.
Este ritmo, atención,
para que lo entendáis,
son como unas fresas. Mirad.
¿Lo veis? Son unas fresas
que de por sí ya son muy dulces,
son muy deliciosas.
Pero ¿qué es
lo que hace Massenet?
Massenet añade azúcar
a estas fresas, y ¿cómo lo hace?,
lo hace con la mano derecha,
creando una melodía que es
totalmente francesa,
una melodía que, si me lo permitís,
podríamos decir que es
la quinta esencia
del afrancesamiento musical.
Mirad, lo toco ahora junto,
las fresas con la mano izquierda
y el azúcar con la mano derecha.
Escuchad.
Relojes, joyas, bolsos,
zapatos...
Todas, absolutamente todas
las grandes marcas de lujo
del mundo tienen sus tiendas
en el Paseo de Gracia de Barcelona.
O sea, sin duda la calle ideal
para Manon,
su paraíso.
Me la imagino paseando y gastando
sin freno alguno.
Quería una pamela,
estaba mirando pamelas,
porque claro, son muy bonitas.
Sí, muy bonitas todas.
Muy lujosas; son preciosas.
Todo esto será un poco caro ¿no?
Bueno, un poquito, un poquito.
Esta pamela más o menos
¿qué podría valer esto?
Ya.
Bueno.
Bueno es igual, oye,
un día es un día.
Me llevo esta ¿sí?
De acuerdo.
Es la vida a la que aspira Manon,
la vida que cree que le hará feliz;
y Massenet nos la cuenta
con una música extraordinaria
que te envuelve casi casi
como este regalo. Bonito ¿verdad?
¿Para quién es el regalo?
Para Manon.
Muchas gracias.
Manon cumple su deseo.
Junto a un hombre rico
consigue todo lo que siempre
había soñado, riqueza
y notoriedad. La gente la admira,
y eso a ella le encanta.
Está exultante y va cantando
con su espectacular pamela.
"Soy tan buena
que consiento que admiréis
mi encantadora persona".
Y después hace una exaltación
de la juventud
y de vivir sin pensar
en las consecuencias.
Es la famosa "Gavotte" de Manon.
¿Y qué es esto de la "Gavotte"
de Manon? Pues la gavotte
es una música antigua francesa
que de hecho empezó siendo
un baile, un baile con un ritmo
muy fácil, muy elemental,
que es el cuatro cuatro
o el dos cuatro,
que suena de este modo. Esto es
el ritmo típico de la gavotte.
Un, dos, tres, cuatro,
un, dos, tres, cuatro,
un, dos, tres, cuatro,
un, dos, tres, cuatro.
Y del mismo modo que Manon
tiene una historia muy apasionante,
la historia de la gavotte
también es muy curiosa,
porque de algún modo,
la historia de la gavotte
como si de un cuento se tratara,
es la historia de cómo la ópera
llegó a Francia.
Así que... erase una vez,
hace mucho tiempo...
había un niño italiano,
Giovanni Baptiste Lully,
que a los diez años viajó a Francia.
Ya era bailarín y violinista
de la corte de Luis XIV,
el Rey Sol, pero era tan bueno
que rápidamente se convirtió
en el director musical
de la familia real.
Giovanni convenció al rey
para que tuviera su propia ópera,
un invento italiano
que a los franceses no les gustaba.
Fue así como Giovanni
empezó a componer óperas,
y para hacerlo se acordó
de la música que había oído
en su viaje de Italia a Francia,
la "gavotte",
una música tradicional
que incorporó en todas sus óperas.
Y así nació la ópera francesa;
lo más curioso es que fue de la mano
de un italiano.
Y colorín colorado...
este cuento se ha acabado.
La glamurosa vida de Manon me lleva
hasta este exclusivo hotel,
el Hotel Majestic.
Preparaos para visitar
la suite principal, considerada
una de las mejores suites
del Paseo de Gracia.
Hola, ¿cómo estás?
Bienvenidos al Majestic.
Muchas gracias. Vamos a ver
esta maravillosa suite que tenéis.
Vamos a enseñaros la suite
Antonio Machado, que es...
nuestra habitación más espectacular,
en la novena planta.
Es uno de los ten house que tenemos
en el hotel, en una planta privada
exclusivamente
para estas habitaciones.
¿Es aquí?
Sí, es esta.
Muchas gracias.
¡Guau!
Bueno, les presento la suite
Antonio Machado.
Es una habitación, como os decía,
está en la novena planta,
y que tiene 75 m2 de habitación
y otros 75 m2 en el exterior,
que luego los veremos.
Y aquí, a la derecha,...
Seguimos por aquí.
...tenemos el vestidor,
un vestidor bastante amplio.
Cómo bastante amplio, es gigante.
Tengamos en cuenta que los clientes
que vienen a este tipo de habitación
traen muchas maletas...
¿Sí? Podemos así, entre nos,
¿qué vale la habitación?
Tiene un precio de 5.000 euros.
Cinco mil euros la noche.
Sí, correcto.
Ahí queda eso.
Bueno, para una ocasión especial ¿no?
Bueno, muy especial.
Tenemos clientes que celebran
ocasiones especiales a menudo.
El baño es espectacular.
Vamos a ver la terraza que me dices.
Claro que sí.
¡Guau! ¡Qué terraza más increíble!
Qué Sol.
Qué auténtica maravilla,
y qué vistas.
Podemos ver por la derecha
el Tibidabo, la torre Collserola...
toda la parte de Montjuic...
Y vemos incluso el mar,
vemos incluso el mar.
Santiago, no sé si me vas a dejar
que me quede un momentito aquí
curioseando cositas.
Claro que sí, la habitación
es para disfrutarla.
Muchísimas muchísimas gracias.
Igualmente.
Gracias.
Lujo, lujo y más lujo.
Toda la ciudad a nuestros pies.
A Manon le hubiese encantado
dormir aquí, pero seamos francos,
¿a quién no?
Y es que la televisión
no hace más que mostrarnos
lo bien que viven las personas
que, supuestamente,
han triunfado.
Por ejemplo,
Tener dinero es sinónimo
de tener éxito,
y de algún modo eso nos lleva
a querer ser como Manon,
o como Paris Hilton, la heredera
el imperio hotelero Hilton.
Todo el mundo la conoce
por sus excentricidades,
como gastarse 300.000 dólares
en una casa para sus perritos;
o esta otra, Jacqueline Siegel,
conocida como
la reina de Versalles,
porque junto a su marido,
el millonario, David Siegel,
quisieron construir la casa
más grande de América. Se inspiraron
en el majestuoso palacio francés;
una casa con cines, teatros,
piscinas
y más de... dormitorios.
La vida de Jacqueline
me recuerda muchísimo a la de Manon,
porque, igual que nuestra
protagonista,
la reina de Versalles
es una chica de clase media,
de un pequeño pueblo de Nueva York,
que empezó a trabajar de informática
Pero quería más.
Así que, se hizo modelo,
ganó el concurso de Miss Florida
y se convirtió en multimillonaria
al casarse con un hombre
31 mayor que ella.
Pero llegó la crisis financiera
del 2008,
y su sueño de vivir en un palacio
estuvo a punto de desvanecerse.
Pero...
mejor que nos lo cuente ella.
Hola.
Hola, Jacqueline. ¿Cómo estás?
Estoy muy aquí, en Florida,
con el Sol brillante.
Jacqueline, quizás nos puedes contar
lo de este proyecto de Versalles.
¿Cuál era tu sueño con esta casa?
¡Versalles, madre mía!
La verdad es que es un sueño
compartido entre mi marido y yo.
Queríamos construir una casa bonita.
Hicimos un viaje a Francia,
vimos Versalles
durante nuestra luna de miel.
Mientras, nuestra familia
iba creciendo y mi marido me dijo:
quiero construirte una casa
en América, y la llamaremos Versalles
Pero yo no sabía que él pretendía
construir un palacio de verdad.
Y todo esto,
Versalles, el lujo,
los jets privados,...
todo este tipo de cosas,
quiero decir...
Tu pasado estaba muy alejado
de todo esto ¿no?
¿Cómo pasas...
de trabajar como informática
a ser la reina de Versalles?
Sí, era ingeniera informática
para City Bank,
y tenía un trabajo como modelo
en Nueva York.
Solía ganar más en un día
o en una hora como modelo
que en toda una semana trabajando
como informática.
Y así no tardé en atar los cabos.
O me quedo aquí sentada
y me siento terriblemente aburrida,
o salgo allí fuera
y viajo por el mundo
y hago de modelo y de actriz,
y conozco a gente interesante
y fabulosa.
O sea, que solo tardé unas semanas
o una semana en decidirme.
Y elegí lo más divertido,
el que mejor pagaba.
Era como...
era un poco como una sorpresa.
Voy a pellizcarme y a ver,
pero no quiero despertarme,
quiero quedarme en el sueño.
y estás viviendo tu sueño.
Fantástico ¿no?
Sí, ha evolucionado
hasta convertirse en mi sueño.
Volvamos a Manon por un momento.
Ella cree
que la felicidad solo se encuentra
en el dinero.
Está equivocada.
¿Qué le podemos decir a la gente
que piensa así?
La felicidad no se encuentra solo
en el dinero.
El dinero te facilita la vida,
y mucho, está claro,
pero el amor es muy importante.
Quiero decir, la vida puede ser
muy solitaria en un castillo grande
si estás muy triste ¿sabes?
Entonces
¿seguro que elegirías el amor?
El amor, pero no me enamoraría
de una persona que es un gandul.
Me gustan los hombres que tienen
éxito y una carrera profesional.
Sé que mucha gente
como Manon o como Jacqueline
harían locuras para llegar a ser
ricas y famosas.
Para mí, este es un mundo
totalmente desconocido,
pero no lo es para el fotógrafo
Jorge Represa.
Durante años ha sido el fotógrafo
más deseado por las estrellas,
y con su cámara ha retratado
a más de mil celebrities
de todo el mundo.
Jorge ¿cuántos años
haciendo fotos a famosos?
Pues sí.
Celebrities ¿se dice?
Pues casi dos décadas fotografiando
la fama, el éxito, la vanidad...
Tú tienes estos magníficos libros,
este que pone "Retratos",
y vemos fotografías fascinantes
de personalidades...
Pero esta me encanta,
esta fotografía de Javier Bardem.
Me encanta también esta otra
que tienes aquí de Naomi Campbell.
¿Naomi Campbell es un poco Manon?
Puede ser la aspiración de Manon.
Puede ser aquel... sí, el espejo;
lo que Manon quisiera ser.
Sí.
Siempre pienso que la vanidad es
el pecado favorito del diablo,
y que todas estas celebrities,
todos estos famosos
tienen siempre este punto de vanidad
Sí.
He hecho más de mil personajes
famosos, pero siempre con un perfil
de grandes profesionales,
de gente que es famosa por su trabajo
por la calidad y el compromiso
con su trabajo.
Hoy la fama es mucho más fácil,
es mucho más barata, es mucho más...
menos interesante.
Decimos que hay dos tipos de fama.
Sí, hay artistas...
que como consecuencia
de su dedicación y de su trabajo
adquieren la fama, y en muchos
de los casos conviven mal con ella.
Podríamos decir que al final
da igual que sean celebrities
o que sean famosos
o que sean anónimos...
¿la fotografía es igual?
La fotografía es igual
y la vanidad es igual.
Todos quieren salir guapos,
todos quieren salir favorecidos,
todos quieren salir interesantes;
todos ocultan o tratan de ocultar
algo al fotógrafo. Son las mismas
dudas, los mismos miedos,
las mismas ambiciones...
No hay diferencia.
No hay diferencia.
No hay diferencia.
Por lo tanto, la aspiración de Manon
de querer ser...
La más guapa.
...la más guapa, la más admirada,
la más bella, la que tiene
el bolso más caro,
la que tiene el vestido más caro,
en realidad es un sinsentido,
porque todo el mundo al final es
más o menos igual.
No depende de que sean famosos o no
para tener esa ambición.
Exacto. No depende de que sean...
No tiene nada que ver.
¿Y vosotros?, ¿qué haríais
si tuvierais que escoger?
¿Escogeríais el dinero o el amor?
Hemos hecho un pequeño experimento
que ya veréis que es clave
para entender nuestra ópera de hoy.
¿Qué creéis que escogerá la gente?
Ya lo veis. Casi nadie
puede resistirse al dinero.
Es lo mismo que le pasa...
a Manon.
Este es el dilema que tiene cuando
aparece el caballero Des Grieux,
el amor.
Un hombre que la quiere,
que le canta sueños preciosos,
sueños en los que solo falta
una cosa, Manon.
Es un momento muy difícil
para el tenor;
fijaos en la delicadeza de su canto;
alguien capaz de cantarle así
a una mujer merece sin duda
ser correspondido, pero...
Des Grieux lo pasará muy mal,
porque para Manon
tiene un pequeño defecto,
no es rico.
Un buen recuerdo.
Una maravilla ¿no?
Gracias.
¿Cómo consigues cantar así?
Esta aria es muy delicada,
porque en realidad,
no se debe cantar así,
hay que encontrar la atmósfera,
y esa es la dificultad,
ya que se puede cantar por ejemplo
con una...
pero si consigues crear esa atmósfera
funciona.
Y esa es la magia de esta aria;
y después hay que intentar
encontrar también la dulzura,
pero al mismo tiempo la virilidad,
ya que es difícil que un hombre
pueda llegar a realizar
esos falsetes,
esa voz mixta.
Se tiene que controlar
para que todo sea homogéneo.
Esa es la dificultad de esta aria.
Porque estás diciendo
cosas muy hermosas.
Su sueño, es el sueño de Des Grieux
que dice: "mira...
Siempre es un sueño.
...ahí está nuestra casa,
te imagino allí...
Es fantástico.
Él dice: si cierro los ojos
puedo ver todo nuestro mundo futuro.
Se debe encontrar así.
Una "melonet" es una casita;
podría decir una casa
pero dice una casita; no es lo mismo.
Si dices una casita no puedes decir:
"una maison".
No, no funciona.
Entonces, el canto,...
sobre todo el tenor,
el tenor francés creo,
debe ser al mismo tiempo viril
pero...
Delicado.
Por ejemplo, en este pasaje
del "Fausto",
esta es el aria del "Fausto"
de Gounod, cuando dice:
Exacto.
Siempre de forma delicada.
Delicado pero... con la posibilidad
de ir después
hacia un sonido más ligero,
homogéneo.
¿Podemos decir que este sería
el modo auténtico de realizar
este repertorio francés?
Yo creo que el modo auténtico
no existe, no existe. Digamos...
que todos los cantantes
han intentado encontrar
la atmósfera adecuada
que sentían dentro de ellos mismos.
Esto es lo importante.
Como decía Verdi: "la interpretación
nace del instante".
Cuando cantaba este...
sueño con la Netrebko en Viena,
yo me encontraba en una situación
muy difícil,
tanto personal como de salud,
y por tanto, para mí ese sueño
era también mi sueño:
el sueño de Roberto, y pensaba:
¿qué va a ser de mí ahora?,
porque no sabía lo que tenía;
me habían encontrado algo
y pensaba que quizá sería el fin
de mis días, no solo de mi carrera
si no de mi vida.
Lo canté como si fuera...
casi una diosa la vida, y casi
como una esperanza de ese futuro.
¿Qué será de mi futuro?
Y después de dos años
me descubrieron un tumor
en la cavidad sinusal,
y cuando canté... "Manon",
de Massenet,
me encontraba
en el momento más trágico
de la evolución del tumor
que tenía aquí. Ya no...
ya no sentía nada,
ni la vibración,
ni ni ni la entonación.
Nada.
Era una dificultad, por lo que cuando
cantaba esta aria
en ese momento yo era Des Grieux,
me encontraba solo
frente a ese futuro.
¿Qué futuro me espera?
El escucharte aquí no solo estamos
escuchando a Des Grieux
sino también a Roberto.
Y Manon dice:
Sí, ya que muchas veces el sueño
es una locura.
¡Pero ella lo abandona!
Sí, porque dice que es una locura;
porque quizás en realidad ella
tiene los pies en la tierra,
más de lo que nosotros creemos.
Porque...
sabe que en realidad todo eso
no tiene importancia.
Lo importante
es disfrutar del momento, vivir.
Esta también es una filosofía,
vivir el momento presente,
sin pensar en el futuro,
y lo que tenga que venir vendrá,
solo que es una locura.
Este es un momento clave.
Mirad.
Manon parece tener remordimientos
al tomar la decisión
de dejar el amor de lado.
En este breve momento de lucidez,
Manon siente la llama del amor
por Des Grieux,
pero no puede evitarlo,
su obsesión por la riqueza y el lujo
es para ella lo primero.
Se debate entre dos deseos,
dos pasiones que la atormentan.
Una elección difícil
ante la cual
muchos habréis estado alguna vez.
Pero ¿cómo funciona nuestro cerebro
a la hora de elegir?
Como Manon, muchas veces
nos sorprendemos eligiendo
lo que aparentemente
menos nos conviene.
El especialista en Neuromarketing,
Antonio Casals, nos cuenta porqué.
Cuando yo pregunto a la gente
oye ¿tú que prefieres?, ¿prefieres
la riqueza, la fama...
la notoriedad,
el dinero, el lujo?,
¿o prefieres
una vida más tranquila, el amor,
los valores tradicionales,
la familia? Todo el mundo
me contesta esta segunda opción.
Lo más importante es el amor.
¿Contestamos esto porque es
lo que tenemos que contestar
o porque es lo queremos?
Contestamos aquello que deseamos,
y deseamos aquello que nos hace
más guapos, más bonitos, directos,
más atractivos a los demás.
Pero muchas veces no contestamos
lo que realmente sentimos.
Es más, muchas veces no sabemos
qué es lo que hemos decidido,
lo que realmente queremos
porque nuestra parte racional
no controla más que una pequeña parte
de lo que pasa en nuestro cerebro.
O sea, que nuestra parte racional
nos hace contestar un tipo de cosas.
O contestamos un tipo de cosas
que no corresponden con la realidad.
¿Y este cerebro que tienes encima
de la mesa nos ayudará a explicar
porqué contestamos una cosa u otra?
Sí, tenía este cerebro aquí
por contaros simplemente,
y tangibilizar un poco
lo que estoy diciendo.
Esta parte de aquí fuera
es lo que nos hace Homo Sapiens,
que es el neocortex,
y por aquí pensamos.,
pero realmente no tomamos decisiones,
influimos en la toma de decisiones.
Y escondida aquí dentro
tenemos...
Te presento al cerebro reptil.
Es muy importante;
es el más rápido,
es el de los automatismos.
Perdona que te interrumpa. Cuando
dices es el de los automatismos
¿esta parte del cerebro sería
la que nos hace tomar la decisión
instantánea?
Exactamente; es el que nos hace
tomar la decisión instantánea
cuando este, que es un poco más lento
ni siquiera ha entrado en proceso.
Pero cuando tenemos más tiempo,
porque el racional es más lento,
¿nuestra opinión sobre un tema
puede cambiar?
Claro, porque evidentemente,
el primitivo es el de los instintos,
el de los reflejos....
El de verdad, el que nos da la...
la decisión correcta,
la más instantánea.
Al menos aquella que de algún modo
va a ocurrir de verdad.
Mientras que con el...
racional... lo pasamos por un tamiz.
Por un tamiz.
Tenemos que de alguna manera
desedecar, ser racionales,
porque eso es lo que auténticamente
queda bien,
y tenemos que justificar
todo lo que hacemos
porque si no parecemos raros ¿no?
Pero a la hora de la verdad
justificamos muchas cosas
que no sabemos porqué las hemos hecho
Y el experimento que vamos a hacer
¿en qué va a consistir?
Va a consistir en ver
cómo descubrimos
estas decisiones del reptil,
y luego al final veremos
si conseguimos ver,
con las seis Manon que hemos elegido,
si el personaje de Manon
tiene sentido o no tiene sentido.
Pues fantástico. Si te parece
me llevo todas estas
partes de cerebro y empezamos
con el test. ¿Te parece?
Para nuestro experimento
nos ayudarán unas cuantas chicas
que podrían ser la protagonista
de nuestra ópera.
Primero les proponemos que elijan
entre dos fotografías
que reflejan dos situaciones
bien distintas.
Tienen que responder rapidísimo,
en una milésima de segundo,
sin pensar. Tiran una tarjeta
y escogen con qué foto se quedan.
Quien actúa es el cerebro primitivo,
el de las decisiones instantáneas.
Vamos a la segunda parte. Verán
otra vez las mismas fotografías
pero ahora tienen todo el tiempo
que quieran para elegir,
para pensar.
Es el turno del cerebro racional.
¿Escogerán lo mismo?
Antes has elegido el otro.
-¿Ah, sí?
Izquierda también.
-¿Has elegido derecha?
No lo sé.
Porque en la imagen de la izquierda
están pasándolo realmente bien.
Te llamó la atención
el dinero salir del bolsillo.
-Sí.
¿Por qué estás gastando más
de lo que deberías?
Bueno, sí.
-Bueno, porque el dinero
siempre va bien ¿no?
Pero el romanticismo
también es importante.
Sí, son dos partes...
-El lujo.
Esto es la diferencia de criterio
entre el test inconsciente,
cuando han tendido que escoger
con muchísima rapidez,
y con el test de la segunda parte,
cuando han tenido tiempo
para pensar.
Exacto.
Esto significa que hay una persona,
la cuarta, que incluso ha tenido
más de un 80 % de discrepancias
entre el primero y el segundo test.
Exactamente; que de forma consciente
es muy distinta
que de forma inconsciente.
Pero esto es una barbaridad.
Pero es que incluso todas, 40, 50...
Sí, hay unas diferencias importantes
Lo vamos a ver al gráfico final,
que es un 57,58 %.
Esto sería la tarta
de la gente tendencia Manon.
O sea, la tarta de las chicas
que tienen la tendencia
más por el glamur, por el dinero...
De forma inconsciente.
O sea, que el cerebro primitivo,
el cerebro reptil
del que me hablabas al principio,
aquí está actuando
y está demostrando que realmente
lo que decimos
o lo que somos en realidad
no es exactamente lo mismo.
Exactamente. La puesta es que...
las Manon que hemos elegido,
de media
tenderían a actuar de forma similar
Que la protagonista de nuestra ópera
Exactamente.
La vida está llena
de decisiones difíciles.
¿Quién no ha roto algún corazón
en su vida como Manon?
O al revés. ¿Quién no ha sufrido
por un amor no correspondido
como le pasa al pobre Des Grieux?
Estamos rodeados
de historias de amor.
Quién sabe, a lo mejor,
entre estas personas encontramos
a alguno de los protagonistas
de nuestra ópera.
Un día,
fruto de la casualidad,
vi a una chica y me quedé prendado.
Me gustó, fue...
muy de película.
La familia no entendió esta relación,
porque yo tenía que... para vivir
con esta persona, irme, dejarlo todo.
O sea, que cuando llegó el momento
de decidir entre...
por decirlo simple,
el dinero y el amor,
que en tu caso no coincidían...
Yo hice la elección en su momento,
tiré para adelante y bueno,
han pasado 20 años
y bueno, ahí está.
¿Todavía estás con la misma persona?
Sí, todavía estoy con la misma.
¿No te arrepientes?
Para nada.
El sentimiento es el momento,
y hay que responder a ese sentimiento
en el momento
con lo que tú crees
que tienes que hacer.
¿Y qué pasa si el sentimiento...
es el sentimiento
de lo que tengo que hacer es
ir a por la fama, por la riqueza,
por la notoriedad?
¿Es válido?
Es válido, porque te puedo decir
que en mi caso
he sentido una gran pasión
por el trabajo, mi vida profesional,
y muchas veces he dejado de lado
aspectos familiares
que luego te arrepientes. Pero bueno,
es que la pasión por el trabajo
también existe, y de alguna manera
es la realización
como persona.
¿Y qué pasa con Des Grieux? Pues
que queda absolutamente destrozado,
y decide hacerse sacerdote,
hacerse cura.
Él lo que quiere es apartar a Manon
de su vida, apartar a Manon
de sus pensamientos, pero no puede,
no puede dejar de pensar en ella.
La imagen de Manon vuelve
una y otra vez a su mente,
insistentemente;
vuelve con esta música. Mirad.
Esta música es Manon,
es la imagen de Manon,
que vuelve una y otra vez,
insistentemente
a la mente de Des Grieux. Una música
que contrasta totalmente
con esta otra música.
Mirad, escuchad.
Esta es la música del convento,
es la música
que suena en el convento
antes del oficio, antes de la misa.
La música que simboliza el olvido
que quiere alcanzar Des Grieux,
que quiere olvidar a Manon.
Con estas dos músicas tan distintas,
Massenet nos muestra
el conflicto interno de Des Grieux,
que tiene que escoger
entre dos caminos distintos;
por un lado Manon,
y por otro lado la fe,
el olvido.
Dos caminos, dos sonoridades,
dos músicas distintas:
Manon y la fe del olvido.
Esta es la terrible lucha
de Des Grieux,
que intenta olvidar a Manon.
Mirad lo que dice,
atención.
Solo quiere alejar de su mente
un nombre,
el nombre maldito de Manon.
Es un sollozo de dolor,
el dolor de alguien
a quien han roto el corazón.
En estas estancias
del Teatro Real de Madrid
Manon se sentiría como una reina.
Fue inaugurado en el reinado
de Isabel II, quizás también
una Manon de su época.
El abate Prévost escribió la novela
"Manon Lescaut" hace mucho tiempo,
en el siglo XVIII,
pero, como vemos,
su historia nunca pasa de moda.
Esta historia fue escrita
hace siglos,
pero todavía sigue siendo...
tremendamente actual.
Sí, ya que trata de la propia
naturaleza humana.
Es la condición humana, como escribió
Balzac, como lo escribió Dante,
como lo han escrito tantos otros.
Se dice, no lo sé,
que quizás para encontrar
la inspiración,
Masssenet fue a terminar la ópera,
allí, en el mismo lugar
donde el abate Prévost
escribió la novela.
Sí, es verdad, porque la inspiración
proviene siempre de algo.
Parece ser que algunas experiencias
que se narran aquí
son verídicas.
Seguramente, ya que para un abad
de la época
este libro fue todo un escándalo,
e incluso se llegó a quemar.
¿Lo quemaron por ser un escándalo?
Fue un escándalo,
porque hablar con esa frivolidad,
de ese modo un tanto erótico,
para un abad era hecho un poco...
escandaloso.
Así que la historia de Manon
podría suceder hoy en día.
Ocurre todos los días.
Todos los días, sí, es verdad.
Pero la belleza está aquí,
en la escritura,
en el estilo del escritor,
y después en el del compositor,
porque ha recuperado esta historia...
Pero no solo Massenet,
sino también Puccini.
También Puccini.
Puccini compuso una ópera
un poco diferente de esta otra,
más pasional,
aún más a la italiana.
Sin embargo, en "Manon" de Massenet
se habla de la juventud,
de los errores de la juventud.
Ella al final le pide perdón.
¿Por qué?
¿Se da cuenta que se ha equivocado?
La juventud te da...
ese modo de pensar
de que todo es eterno,
de que todo seguirá igual,
de que nada tiene importancia,
pero cuando te acercas a la muerte
o a la madurez, entonces...
entiendes el valor verdadero
de la verdad,
de los sentimientos, del amor.
Que la cosa más importante
en el mundo es el amor.
No sé si podemos decir que ella,
Manon, ama a Des Grieux.
Seguramente sí que ama a Des Grieux;
el problema está en su naturaleza,
que en el momento de la muerte,
cuando ella mira la Luna,
las estrellas, todavía sigue viendo
un diamante,...
Exacto.
...porque ama todo lo que brilla;
ama...
lo bello.
Así este libro, que es un libro
100 % francés, se convierte
con Massenet en una ópera...
universal.
Universal porque...
los sentimientos son humanos,
como ya he dicho antes,
y por tanto universales,
y siempre está el amor.
Por este motivo, cuando tienes
la suerte de conocer en tu vida
un instante, un momento de amor,
has de agradecer al cielo,
a la Naturaleza, a Dios,
a todo lo que quieras,
porque es algo que parece sencillo
pero no lo es.
Des Grieux abandona la fe
y vuelve con Manon.
Pero él sigue teniendo un defecto
a los ojos de ella,
sigue sin tener el dinero suficiente
para satisfacerla;
por eso Manon le lleva a un casino
y le obliga a jugar.
Cegado por su belleza
a lo Marilyn Monroe,
Des Grieux juega mientras ella canta
"más oro para Manon",
"aún más oro, oro",
esa será su apuesta final,
y también su perdición,
por romper con dinero
lo más vivo, el amor.
Y llegamos al final de la ópera.
Des Grieux ha sido detenido
acusado de hacer trampas en el juego
y Manon ha sido condenada
a ser deportada a Luisiana
por su vida repleta de excesos,
por su vida libertina.
En la cárcel, Manon, enferma,
finalmente se da cuenta
que se ha equivocado, que su vida
ha sido un error; ¿por qué?
porque siempre ha antepuesto
la fama y la riqueza
a aquello que realmente importa,
el amor. Cuando llega
el momento de la muerte
todo desaparece,
se queda sola,
y una única persona está a su lado,
la persona que siempre, siempre
la ha amado, Des Grieux,
que le repite las mismas palabras
que ella le dijera un día.
Y Manon aquí, justo antes de morir
en los brazos del hombre que la ama,
dice su famosa última frase:
Lo dice en francés
Una mujer que incluso
en el momento de su muerte
quiere levantarse, bailar,
brillar, y sobre todo
vivir.
Manon, cuando llega al final
de la vida se encuentra
que todo por lo que ella
había soñado es un "bluf";
todo se le...
desaparece ante sus ojos...
y se encuentra totalmente perdida.
Bueno, es que el...
el amor siempre triunfa.
Creo que al final
es lo que perdura en el tiempo,
el dinero
no da la felicidad, lo da el amor,
el estar bien,
enamorado de una persona ¿no?
-Es importante el dinero,
pero a veces tienes mucho dinero
o tienes todo solucionado
pero hay un malestar dentro de ti
que no vives. O sea,...
dejas que la vida te lleve,
y hay que llevar el control.
Solo uno.
¿Y cuándo pasa hay que cogerlo?
Es la historia
de Manon Lescaut.
Una historia como cualquier otra
que tiene un principio y un final.
Como nuestro programa,
ya terminó.
Hoy hemos jugado exactamente igual
que Manon, a ser ricos y famosos.
Un juego muy peligroso, un juego
que no tiene mucho sentido,
porque ¿de qué sirve tener
todas las riquezas del mundo
si para conseguirlas
tenemos que pervertir
nuestro propio corazón?
¿De qué sirve tener
todas las riquezas del mundo
si para conseguirlas
tenemos que romper,
tenemos que arruinar el corazón
de la persona que más nos ha amado?
Creedme,
no sirve absolutamente de nada.
La pobre Manon nunca entendió
que la única cosa que puede hacernos
inmensamente ricos
no es el dinero,
es...
el amor.
Subtitulación realizada por
Yolanda Fernández Gaitán.
Añadir comentario ↓
No puedo ver los programas en Panamá. No se cargan. Qué puedo hacer? Gracias
Una pena que falle el streaming de este programa. Por favor revísenlos.
No se pueden ver los vídeos onlne.
No puedo ver los programas en Colombia. ¿Porqué?
Es ópera, música,historia, arte, psicologia, todo ello contado y cantado, con sencillez, y mucho....mucho gusto. Hoy, no pude acudir a la cita del programa, pero....!gracias internet! no me lo pierdo. !Maravilloso!!