El Senado de Estados Unidos ha confirmado este lunes, ocho días antes de las elecciones presidenciales, a Amy Coney Barrett como nueva jueza del Tribunal Supremo, y consolida así la mayoría conservadora en la corte más importante del país.
Barrett ha sido confirmada con 52 votos a favor -todos de senadores republicanos- y 48 en contra -todos los demócratas y la conservadora Susan Collins-.
La confirmación de Barrett este lunes en el Senado llega tras un apresurado y polémico proceso que se inició el 18 de septiembre pasado con la muerte de la jueza progresista Ruth Bader Ginsburg a los 87 años.
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