Sinopsis
La necesidad de habilitar en poco tiempo más camas hospitalarias para atender a los enfermos de coronavirus ha llevado a tirar de imaginación para buscar los mejores lugares. Centros de convenciones, recintos feriales, pero también trenes pueden servir para ese fin.
Seguramente los ingenieros de la alta velocidad francesa no pensaron que el TGV sería algún día un tren hospital. Pero es en lo que se ha convertido en estas fechas: evacúa a pacientes de París a regiones con más plazas hospitalarias. Este salía de la estación de Austerlitz con destino a Bretaña.
En Londres han construido un hospital de campaña en el centro de convenciones donde normalmente se celebra el salón del automóvil. Tendrá entre 4.000 y 5.000 camas.
Vemos imágenes de España y de Italia... y Berlín se está preparando bien, asegura esta senadora en el centro de exposiciones que la capital alemana está convirtiendo en un hospital de campaña. Tendrá capacidad para mil pacientes.
Serán 700 en Rotterdam, en este recinto donde se iba a celebrar el festival de Eurovision. Y que recibirá. explican sus responsables, a quienes necesiten el ingreso pero no por coronavirus: así liberan las urgencias para los enfermos de Covid-19.
Al otro lado del Atlántico, en la isla de Manhattan, voluntarios de los Samaritanos han levantado un hospital de campaña en Central Park.
En Brasil, el estadio de Pacaembú de São Paulo ya aloja un hospital y en los alrededores del estadio de Maracaná se preparan para instalarlo. El sambódromo de Río alojará a los mendigos de la capital carioca.
Y para los que no tienen sitio en Perú, el ayuntamiento de Lima les ha preparado la plaza de toros de Lima. La arena será el suelo para los sin techo mientras dure el toque de queda.
