2002-2005
¿Para qué sirve? -Para reírnos un rato.
¿Para qué? -Ya lo verás.
No seas impaciente.
Cuando te diga "vamos", salimos corriendo todas.
¿Qué pasará? -Ahora verás.
¡Guille! ¡Álex! -¡Guille! ¡Álex!
¡Guille! ¡Álex! -¡Guille! ¡Álex!
La adoraba.
Bueno. ¿Estoy guapo?
A Carmen le gustaba que fuera siempre de punta en blanco.
No puedo presentarme ante ella sin estar impecable.
Ya es la hora.
¿Temes que nos pongamos sentimentales?
Esperadme en la puerta.
Enseguida estoy con vosotros.
TODAS: "¡Guille! ¡Álex!"
¿Qué? -Tenemos algo para vosotros.
Cuando diga "vamos", sal corriendo detrás de nosotras.
Que no te pillen.
¡A por ellas!
Vaya por Dios. Estamos buenas.
Vámonos. -¡Adiós, tía!
¿Adónde vas?
Estas chicas...
¡Os vamos a freír!
No hemos sido nosotros. -Ha sido...
¡Papá! -¡No es justo!
Jopé.
Ana.
¿Puedo utilizar tus cremas?
Sí.
Nos la hemos cargado por su culpa. -Es la guerra.
No hay tregua. -Que se preparen.
Les cortamos el pelo mientras duermen.
O les damos con el tirachinas.
No es justo, no es nuestra culpa.
Papá nos ha echado la bronca a nosotros en vez de a ellas.
Siempre nosotros.
Esta vez no. -Papá se ha enfadado.
¿No les podemos cortar a esas el pelo por la noche?
¿Y tirarles piedras?
No.
Sí.
Muy bien.
Ya estoy aquí. Vámonos.
A por ellas.
¡Y el ganador, el mejor doble de Elvis,...
...el único, el rey!
¡Bruno!
¿Elvis?
Dirás Jesús.
¿Eh?
Nada.
Elvis.
Ah, Elvis.
Sí.
Ah.
Por eso el disfraz.
Qué bueno.
Qué bien. Pues creo que vas a ganar.
Claro que sí.
¿Coñac?
Yo no he bebido nunca, Bruno.
¿Y por qué lo sabes?
Ah. Pues mira, te he engañado. Porque bebo un montón.
Bueno, bebía. Sí, pues...
...anís, moscatel...
Güisqui.
¿Qué hermanas?
Sí, mis once hermanas. Es verdad.
A veces con ellas y otras veces no.
¿Por qué te ríes?
Pues sí.
Voy a por el coñac.
Gracias.
Mi futuro depende de ti.
Mira que exageras.
Es como te dije. Es un exagerado.
¿Exagerado? Ya me gustaría verte a ti.
Estoy aquí porque Sharon me lo ha pedido como un favor.
Vamos a solucionarlo.
Todo en esta vida tiene solución.
Esto no. Bueno, que no vuelva a pisar esa casa.
Esa es la solución. -Eres un hombre.
No te dejes ganar por niños.
No lo planteemos como una guerra.
¿Cómo que no? Una guerra declarada de ellos hacia mí.
Necesito armas para defenderme. -Mira lo mal que está.
Además, necesita ese trabajo.
No debes ser ni demasiado autoritario...
...ni demasiado blando.
Jamás les pongas etiquetas negativas.
Usa palabras positivas.
Nunca ser negativo. -Eso es.
No soy negativo.
Soy realista.
Hazles pensar que eres miembro de su grupo,...
...pero no uno más, sino el jefe.
Así lograrás que te sigan hasta donde te propongas.
¿Y ya está? ¿Eso es suficiente?
Seguro, no hay niño que no termine sucumbiendo a esta práctica.
Estos niños son, para no insultarlos,...
...un poco especiales.
No hay niño especial, hay educador poco capacitado.
No veas lo negativo siempre.
Y paciencia, mucha paciencia.
Antes de meter la pata, cuenta hasta diez.
O hasta veinte.
Depende.
Pero nunca pierdas los nervios.
Que no noten que pierdes el control.
¿Has oído? No perder el control.
No perder el control.
Seguro que si lo pones en práctica podrás con ellos.
Sí.
No les vamos a hacer daño.
No, nada que un cambio de ropa no pueda arreglar.
¡Venganza!
¡Venganza! -Vamos al jardín a por barro.
Genial.
Gracias.
Estoy acostumbrada.
Pero ¿de Elvis?
Ay, sí, vale.
¡Qué asco!
Ay, pero ¿qué es esto?
Rápido, que vienen.
¡Ah!
Mira lo que habéis hecho.
Hala. -Lo siento, Catalina.
Qué mal huele.
Desde luego.
Venga, marchaos y no piséis, que ya lo recojo yo.
Si quieres, te ayudamos.
No, prefiero hacerlo sola.
Estoy empapada.
Si quieres, me puedo quedar a ayudarte.
Que no, mi vida, que no hace falta.
¿Qué miras, qué pasa? -Molas mazo, tía.
Ay. Te quiero mucho, mi niña.
Y yo también.
Venga, corre.
¡Vámonos, que nos van a pillar!
¡Qué asco!
¡Bruno!
¡Bruno!
¡Que están llamando a la puerta!
Ay, Jesús.
Hola.
Buenos días. -Tú debes ser...
Catalina. ¿Y Uds.?
Soy Pedro, el hermano del difunto padre de María.
Ella es mi mujer. -Leonor.
Los... Vaya.
No me habían avisado de que venían.
Hemos preferido venir de improviso. -Ya.
¿Está la pequeña María? -Sí, claro, pasad. Pasen.
Gracias.
Vamos a la cocina. No.
Está muy sucia. Huele muy mal.
Qué bien que vengan a visitar a María.
Queremos saber cómo está. -Perfectamente, ¿cómo va a estar?
Ya. -Ya.
Pasen por aquí, por favor.
Pasa, pasa.
No caerán en su propia trampa. -¿Y si caen?
Si caen, nos partiremos de risa.
Hay que guardar la escalera.
Entonces trabajas aquí. -Sí, de cocinera.
Ya. ¿Qué estás, todo el día?
Sí. Bueno, no, depende.
¿Tienes contrato fijo? -Sí, tengo un contrato.
¿No venían a ver a María? -Pues nos encantaría, la verdad.
Voy a llamarla, ¿vale?
¿Desean tomar algo? -Pues sí, dos cafés, gracias.
Ahora vuelvo. -Muy bien.
¿Has visto qué pinta tiene? -Sí, y apesta a alcohol.
¿No había sido monja de clausura? -Claro que sí.
Se habrá dado a la mala vida. En cuanto salen del convento, hala.
Al desmadre. Desde luego...
¿María?
¡María!
Baja, que han venido a verte, corre.
¿Quién?
Tus tíos Pedro y Leonor.
Son tontos.
María, que son tus tíos.
Venga, ven a saludarnos.
No, espera, ponte algo más... Ponte el conjuntito malva, ¿vale?
Lucía, péinala un poco antes de bajar.
Pero ¡tía!
Por favor.
Vale. -Venga.
Yo te ayudo.
No puedo comprender cómo una mujer así puede ser familia nuestra.
Es tan vulgar.
Y que lo digas, mi vida. -Cocinera.
Nuestra sobrina está siendo educada por una cocinera.
Qué alegría me da verlos.
La verdad, solo nos hemos visto dos veces.
Sí, pero no dejan de ser familiares.
Claro. Este para ti...
Gracias. -Este para ti.
Y este para mí.
Pero ¿esto qué es?
Esto es coñac.
Ay, perdón, ese es el mío. Yo no bebo, pero el mayordomo...
...me ha dicho que es lo mejor para el resfriado.
¿Hay mayordomo en esta casa? -Sí, un hombre muy serio.
Y muy responsable. Y quiere un montón a María.
De espaldas, mira.
Es Bruno.
El mayordomo.
¿El mayordomo?
Los tíos de María.
¿Dónde se habrá metido esta niña?
Cuando se pone a estudiar y a hacer los deberes, se concentra tanto...
...que no oye nada.
¿Y quiénes son? -Mis tíos.
¿Tienes primos? -No tienen hijos.
¿Y por qué te caen mal?
Mis padres decían que eran unos estirados.
Pues vaya.
Y cada vez que venían, me tenían que vestir de repollo. Ahora otra vez.
¡Ha caído, ha caído! -¡Ha caído!
¡Genial!
Os habéis pasado.
¿María está en el ambiente adecuado?
Claro, ella es muy feliz.
Yo creo que estaría mejor con nosotros.
Mi marido tiene un trabajo estable, podríamos darle lo mejor.
La niña está bien y está en las mejores manos.
Perdónenme, no se ofendan, pero no necesita nada.
Siempre es necesario un padre.
¿Tú estás casada, Catalina?
No, pero la quiero con locura, y eso es lo que importa.
Además, sé que está perfectamente cuidada conmigo.
Tía.
Pero ¿qué te ha pasado, mi niña?
Pobrecita.
¿Qué te han hecho? Voy a bañarla y a cambiarla.
No es necesario, ya hemos visto bastante.
Voy a por una toalla.
Pero ¿qué te han hecho?
Los gemelos.
Te tratan muy mal aquí, ¿no?
¿No prefieres estar donde no tuvieras que compartir nada...
...y nadie se metiera contigo? -Tendrías juguetes.
Bueno.
Creo que es tarde, nos vamos.
¿Ya? Pero... -Sí. Yo creo que sí.
Adiós, pequeña.
¿Tan pronto? -Tendrás noticias de nosotros.
Creo que aún no estoy preparado.
Os espero en el coche. Dejadme a Nico.
Si está dormidito. Toma.
Llévaselas de mi parte.
No os preocupéis.
Nico y yo nos iremos un ratito de juerga.
Se han pasado mogollón.
Iremos a por ellos, ¿no?
Se van a enterar. -No te muevas.
¡No me he movido! -Sí.
Echémosles cacas de perro.
Mola. -No haréis nada.
Se acabó. -¡Tía!
He dicho que se acabó. Te vas a quedar aquí castigada.
¿Me oyes? -Pero...
No. ¿Me has oído?
¿Me puedo quedar con ella? -Haz lo que quieras.
¿Por qué te ha castigado? ¿Qué le pasa?
No lo sé.
Mis tíos, los tontos.
No sé, me han dicho que con ellos iba a tener muchos juguetes.
Que nadie se iba a meter conmigo.
Nada.
No. ¿Es que me tengo que ir con ellos?
Estás muy guapo, Bruno.
¡Ay, no!
¡Pero bueno!
¡El coche!
¡Me han robado el coche!
¡Nico! ¡Se han llevado a Nico!
Sí, he perdido los nervios, solo eso.
Sí, perfectamente.
Sí, es que me he puesto nerviosa, Bruno, gracias por preguntar.
Dígame.
Genial, Chorbi. ¡Qué golpe!
¡Qué pedazo de coche le hemos birlado al viejo!
¡Se ha quedado que no sabía qué hacer!
Qué máquina, tronco, cómo mola.
Tiene de todo. -Ya te digo.
Pero de todo, tío.
AMBOS: "¡Ah, un bebé!"
Si el coche es lo de menos, inspector.
Lo importante es que había un bebé dentro del coche.
Nico.
No creo que se trate de un secuestro.
Pero no lo sé. ¿Quién sabe?
¿Volver a casa lo antes posible por si se ponen en contacto?
Sí, dejaré libre la línea de casa.
Mi móvil estaba también dentro del coche.
Oiga. Oiga.
Maldita sea.
¡Será posible! No tengo una mísera moneda.
¿Qué hacemos? -Yo qué sé.
¿Cómo no te has fijado, tío?
No lo he visto. -Menudo marrón.
Nos está sonriendo.
Qué rico.
Me toma el pelo. -Que es un bebé, tío.
¿Ahora qué hacemos? -No pasa nada.
¿Cómo que no pasa nada? -Yo tengo la solución.
Vuelve, Chorbi, que es muy pequeño.
Dentro de dos horas vendrá el inspector del Tutelar de Menores.
Ha recibido una denuncia de que María no está bien conmigo.
Si él lo cree, me quitarán a María y se la llevarán con sus tíos.
No puede ser, es mentira. Aquí está perfectamente.
Ellos lo vieron todo muy mal, y luego la niña con el barro,...
...y yo apestando a alcohol, y...
...ellos están casados y yo no.
Y tú, de Elvis.
¿Qué?
¿Crees que eso funcionaría?
¿Lo harías por mí?
Gracias, Bruno.
Pero ¿dónde están? Maldita sea.
Te lo juro, tronco, tenía un culo que no veas.
Tú siempre pensando en lo mismo. -Sí, en lo mismo.
Buenas.
Hola. ¿Y papá?
Con Ana y con el abuelo. No venían a comer.
¡Bien! -Invitemos a un par de pibas.
No hay que forzar la situación.
La situación.
Tengo que decirte algo.
¿Qué? -Una cosa muy importante.
Ya será menos. A ver, ¿qué?
Anda, ven. -Ahora, por gañán, me la llevo.
¡Corre, corre!
Vamos.
¿Qué? -Lo que has oído.
Pero vamos, que...
¿Qué? -La verdad es que no sé.
¿Quieres que se la lleven? -No.
¿Pues entonces?
Joder, menudo marrón.
Van a venir dentro de un rato, así que tienes que decidirte.
¿Sí o no?
Vale, sí.
Pero lo hago porque soy muy buena gente.
Muy buena gente.
Vale, lo eres.
Dilo bien.
Muy buena gente. ¿Vale?
Ahí.
Geniales, tronco.
Tus ideas son geniales. -Quería quedarse solo.
¿Cómo va a querer quedarse solo? Es que tiene hambre.
Míralo.
Anda, dale de comer. -¿Eh?
¿No ves que está canino? Dale algo.
¿Qué hago?
Lo que sea, pero dale.
Pues nos vamos a un supermercado y le mango...
...un choricito. -Picante.
¿Cómo vas a darle eso?
Los bebés toman potitos. -Potitos.
¿Y dónde se manga un potito?
Toma, ponle el babero.
Aquí está el potito. -Vamos a comer.
Aquí está el potito. -Ay, qué bueno.
Qué rico. -Ahora te lo da el tío Chino.
Ahí va. -¿Cómo se llamará?
Y yo qué sé.
Si nos lo vamos a quedar, tendremos que ponerle un nombre.
¿Cómo te lo vas a quedar? -Cómo come.
Míralo qué carita tiene. -¿No será malo que coma tanto?
Coño, es verdad. Se lo dejamos para luego.
Ahora no puedo quedarme, tengo que encontrar a nuestro nieto.
Pero te prometo que, en cuanto esté preparado,...
...vendré.
Te quiero.
Te has tirado un pedo, tío.
Qué guarro eres. -Esto no es mío.
Ni tuyo. Esto va a ser del niño.
El niño.
Ahora la culpa la va a tener él.
¡Uf!
Ya puedes cambiarlo. -Vaya morro, colega.
¿Qué pasa? -Yo le he dado de comer, te toca.
Es que yo no... -¿Que tú no qué?
Yo no sé... -No tiene misterio.
Le quitas el pañal, le limpias y le...
...pones otro. -Nunca lo he hecho.
Venga, yo lo cambio, pero por lo menos entretenlo.
¡Soy un ladrón!
Vendrá un inspector, y si nos portamos mal...
...y piensa que esta no es la casa adecuada, se la llevarán.
No. -Jopé.
Vaya palo. -Cerramos la puerta.
Vale. -Le podemos echar de casa.
¿Estáis tontos? -No queremos que se vaya.
Nadie quiere que se vaya, pero solo hay dos opciones: portarnos bien...
...o que crea que ella tiene novio. -¿Por qué?
Así creerá que tiene padre.
Claro. -Busquémosle pareja a Catalina.
No hace falta, ya se la he buscado. -Buenas.
Tengo que hablar con mis hermanos. -Después de la clase.
Después. -Luego seguimos.
¿Qué os pasa? ¿Estáis enfermos?
Estamos perfectamente.
Ya. ¿Ocurre algo, Lucía?
¿No te importaría ser el novio de Catalina...
...un rato? -¿Qué?
Genial, hermanita. -Qué bueno.
Por fin os encuentro, ¡qué lío!
Nos lo han robado con Nico dentro.
Oí un golpe...
Coges la varilla y la metes entre los cristales del buga.
Y, ¡zas!, lo abres y a correr.
Anda que vaya animal. ¿Cómo le enseñas eso al bebé?
Le enseño a ganarse el pan cuando sea mayor.
Robando coches. -Es una profesión buena.
Anda, toma.
Vaya pastel, tío.
¡Ah, qué asco!
A mí no te me acerques.
Pero, tío. -Toma.
¿Y ahora qué? -¿Ahora qué de qué?
Que qué hacemos.
Habrá que darle un nombre al colega.
Forma parte del equipo.
El Chino, el Chorbi y el Llorón.
Dios mío.
¿Es un truco? ¿Una trampa, una broma?
Es verdad.
No. No me lo creo.
Si no lo haces, se llevan a María.
Que sí. -¿De verdad?
De verdad. -Haremos una cosa.
Yo hago de novio de Catalina y vosotros os portáis bien durante...
...los próximos tres, no seis.
No, mejor, nueve meses.
Tampoco te pases. -Son nueve meses.
Mogollón de tiempo.
Vale.
¿Vale? -¿Queréis que se lleven a María?
¿Cómo vamos a quererlo? ¿Con quién nos meteríamos?
¿Hace o no hace?
Vale.
Cuando te digo que me lo han robado es que me lo han robado.
¿Está bien?
Es él, ¿verdad? No es otro.
Míralo, si podríamos habérnoslo quedado.
Tú estás muy mal, Chorbi.
¡Pero si yo le caía de puta madre!
¿Sabes qué te digo? -¿Qué?
Estoy pensando en decirle a la parienta que tengamos un pañales.
¡Que no me lo he inventado, de verdad!
Buenos días.
Inspector Bermúdez, del Tribunal Tutelar de Menores.
Vengo a ver a Catalina Morales.
Muchas gracias.
Hola. Catalina Morales.
Bermúdez, del Tutelar de Menores.
Encantada. ¿Quiere ver a la niña?
Antes quiero hablar con Ud.
Preferiría que fuera a solas, si no le importa. ¿Dónde?
En la cocina.
Perdone.
¿Ha dicho que está con Catalina desde hace años?
Eso ha dicho.
¿Llama Ud. estable...
...a una relación de semanas?
Ya.
Voy a...
...abrir.
Buenas. -Hola.
No, no, no.
Mierda.
Casi, casi.
Pero ¿qué?
¿Hola?
¿Hay alguien? ¿Me oye alguien?
Ay, Nico, vaya susto que me he llevado.
Digas lo que digas, han robado el coche.
No estoy chocheando.
Yo no. Habrán sido los ladrones.
Te digo que han sido ellos. -Buenas tardes.
Ahora vuelvo y les tomo nota.
Mira, hace el mismo gesto que tú cuando eras bebé.
¿Para beber?
No.
Hay cerveza.
Venga, pásala.
Qué manía con las chuletas.
No pasa nada. Yo tengo un sistema que nunca falla.
La falda plegada.
Eso suena muy bien.
Se pone aquí...
Paula, ¿podrías repetirlo otra vez?
Se pone aquí... Pues no, tío listo.
¿Quieres que vayamos en faldita al examen?
A mí con tal de aprobar el examen no me importa.
Vosotros veréis, pero con el catedrático no aprobamos.
Qué poca imaginación.
Anda, ya habló la lista. -¿Tú eres tonto?
Ser enfermera tiene muchas posibilidades.
¿Y qué tiene que ver con aprobar un examen?
¿Lo veis? Ni idea.
Fonti, tío. -¿Qué?
Que te pongas las pilas. -Ah, sí.
¿Qué pasa? -Quiere que le arregle una cosa.
Hala.
¿Tiene titulación académica? -No.
¿Propiedades? -No.
¿Acciones? -¿Acciones? No.
¿Alguna experiencia en el mundo de la enseñanza?
Sí, con mi sobrina.
¿Aparte de eso?
No.
¿Alguna relación sentimental estable? ¿Ha estado casada?
¿Pareja de hecho? -Sí.
Con el mayordomo. Somos novios.
Hola, Catalina.
Hola. -Veníamos a hacerte una pregunta.
¿Vas a prepararnos la comida que nos haces todos los días...
...con tanto cariño?
Sí, claro.
¿Y nos vas a cuidar tan bien como siempre?
Claro que sí. -Gracias, Catalina.
Si no fuera por ti, no comeríamos. -Eres una madre.
Eso.
Bueno, chicos, adiós.
Adiós.
Ud. primero.
No, por favor, Ud. primero.
No, insisto. -Yo también insisto.
Insisto yo más. -Y yo todavía más.
Adiós.
Lo hemos hecho genial.
Seguro que María se queda para siempre con Catalina.
Bien.
¿Ana? -Carolina.
Tía, ¿qué haces en el baño de Ana?
Ayúdame. -¿Qué?
¿Qué haces aquí?
Ana me ha dejado utilizar sus cremas y se me ha caído el anillo.
Al ir a cogerlo, se me han pillado los dedos.
¡Qué tonta!
A mí no me hace gracia.
Vale, lo siento, tienes razón. ¿Cuánto llevas así?
Años. Os he estado llamando y no me oíais.
A ver, patosa. -¡Ay!
Lo siento, no sale.
No me digas, no lo sabía.
Creo tener la solución. -¡Espera, no...!
¿Por dónde íbamos? Ah, sí. ¿Su pareja es?
Bruno. -Bruno, el mayordomo.
Buenas.
Hola, Fermín. -Oye.
A ver cuándo volvemos a cenar.
¿Para cenar? Tú y yo nunca hemos cenado juntos.
¿Cómo que no?
Vale, te juro que no te volveré a dar comida basura.
La llevé a cenar a una hamburguesería...
...y normal que se mosqueara.
Una cena romántica en un burguer... Pero nunca más.
Adiós, Fermín.
¿Qué pasa? ¡Qué prisas!
¿El baño, por favor? -Sí, al fondo a la derecha.
¿Y este? -¿Qué más te da?
Díselo tú. -Hola.
Hasta luego.
Me voy ya.
Ya está.
¿Vamos a merendar aquí?
Para tus dedos.
Lo he intentado con jabón y no ha funcionado.
Pasaré aquí el resto de mi vida, no ligaré, moriré soltera.
Exagerada. Venga, que te saco.
Qué asco.
No seas quejica. -Voy, ¿eh?
Qué bruta eres, Carolina. -No sale.
No me digas, no lo sabía.
Bonita, ¿te dejo aquí y te apañas tú sola?
Maravillosa. Una idea maravillosa. ¿Por qué no ha funcionado?
Qué pelota.
Ya sé. -¡No me dejes sola otra vez!
Vaya pinta de tieso tiene el tío ese.
Parece un palo. Y qué bobo es.
Creerse que somos tan estirados... -Sobrados.
¿Crees que se lo habrá tragado? -Sí.
Le olía el aliento a pedo. -Pues si se tira un pedo,...
...huele a...
...agua de colonia.
A rositas. -Pongamos en marcha el plan B.
Va siendo hora de hablar con la pequeña, ¿no cree Ud.?
Voy a buscarla ahora mismo.
¡Hola, mi amor! -¿Qué?
Sí, tu amor. -¿Eh?
Pero, Fonti, ¿qué haces?
¿Qué pasa? ¿Estás celoso?
La Catalina va a ser que es mi chica.
¿Su chica? -¿Tu chica?
¿Tu chica?
Sí, mi chica. -¿Es su chico?
Sí. Digo ¡no!
¿Entonces, el mayordomo? -¿El mayordomo?
¿Te ha vuelto a molestar?
¿Y Ud. qué relación mantiene con ella?
Pues parece que ninguna.
¿Que tú qué? Huy, que aquí se va a liar.
¿Me deja? -Espere un momentito, don...
...inspector de niños. El único novio de toda la vida soy yo.
¿Verdad, cariño?
Sí, digo sí, digo...
...¿sí?
¿Qué?
Así no hay manera de que yo tenga una relación estable.
¡Bruno!
¡Ay, ahora sí... -...que la hemos cagado!
¡Qué tortazo!
Ya verás como todo sale bien.
Seguro que el inspector dice a tus tíos que te quedas.
¿Sí? -Lo tenemos planeado, saldrá bien.
Todo.
Entonces, ¿no me llevarán con mis tíos?
Que no, tú tranqui.
No los aguanto, no me quieren. -¿Por qué no le decimos eso?
No bastaría. Bueno, tú...
...tranquila, que todo va a salir bien.
Tranqui.
¿Tienes algún problema?
No, ninguno.
¡Ah, qué frío!
No seas quejica.
¿Qué haces? -¿No has estudiado ciencias?
El calor dilata las cosas y el frío las contrae. Si te echo hielo...
Espero que salga. Despacito, cuidado.
Casi casi. -Ay, muchas gracias.
Gracias.
De verdad, gracias. -Cuidado la próxima vez.
De verdad, hay que ser tonta.
Mierda. ¡Será posible que...!
¿Seré tonta?
Ay, que no puede ser.
¿María?
¡Amalia!
¿Alguien me oye?
Así que la semana que viene nos ayudas.
Sí, hombre, está chupado.
Yo todo esto lo veo un poco arriesgado.
Que va a salir bien, de verdad. -Me parece genial.
Chicos, habrá que celebrarlo, digo yo.
¿Qué? -Claro.
Tío, ¿qué haces? -Me estás empapando.
¿Se encuentra bien? -¿Cómo quiere que me encuentre?
Fatal.
¿Una cervecita?
Quiero hablar con María.
Con la pequeña.
Yo le acompaño. -Sí, por favor.
Ánimo. -Vamos, don inspector.
Anda que...
¿Mejor ya? -Uf.
Por aquí. -Prefiero ir solo.
Quiero salir vivo de aquí. -Pero...
Insisto.
Prefiero ir solo.
¿Por dónde, por favor?
Subiendo las escaleras, el pasillo a la derecha.
Gracias.
Catalina.
Yo ya me voy, ¿eh?
Lo siento, mujer, me acabo de enterar, no tenía ni idea de esto.
Ya. Adiós, Fermín.
¿Sabes lo que nunca falla en estos casos?
¿Qué?
Es infalible.
Pero ¿qué?
Qué susto.
Perdón, ¿eh?
Hola.
Hola. -Tengo que ir al baño, tío.
Ya, ya.
Me voy a la biblioteca a disfrutar un habano...
...a la salud de Carmen.
Ah, no te he preguntado por el banco.
Verás, María, yo soy... -¡Ya sé quién eres!
Chica lista.
Quieres llevarme con mis tíos y alejarme de mi tía.
Solo llevarte al sitio más adecuado.
Lo mejor para tu bienestar. -¿Mi qué?
Quiero que estés bien. -Pues me quedo aquí.
Eso no va a poder ser. Tienes que acompañarme.
Salgamos de este manicomio.
¡No! -María, por favor.
¡No! -Por favor.
No me lo hagas más difícil. -¡No quiero!
¡Vámonos, por favor!
¡Se quieren llevar a María, se quieren llevar a María!
¡A por él!
¡Ah, ah! ¡Socorro!
¡Quita! ¡No, ahí no!
¡Socorro!
Los denunciaré.
¡Se quieren llevar a María! -¡Yo no me quiero ir!
Apártese, señora.
No me lo haga más difícil...
...y quite de en medio.
Joder.
Tranquila, ya verás como se arregla todo.
Yo no me quiero ir.
Si no van a ser ni dos días. Es como unas vacaciones cortas.
Bien. Tendrán noticias mías muy pronto.
Esto nunca falla.
Perdone. Tengo 2000 euros ahorrados.
¡Y encima intento de soborno! Se le va a caer el pelo.
Vámonos. -¡Yo no me quiero ir!
Nada me hará cambiar de opinión.
Hable.
No, si ya, ya.
¡Mi churri!
¡Mi rellenito de nata! ¿Dónde estabas?
¿Qué?
¡Alberto! Pero...
...¿será posible? ¿Cómo...?
Buenas tardes. ¿Es aquí donde ha desaparecido un bebé?
¿Eh?
Pero...
Pero bueno, ¡mi coche! Pero ¿será posible?
¡Me han robado el coche!
¿No los abres? -Sí.
Soy Catalina. -¿Cuándo vuelvo contigo?
Todavía no. -Yo quiero volver.
¡Me han robado aquí mismo! ¡Un enano con una cheira así!
Me van a llamar... -Buscad otra cocinera.
Vuelvo allí de donde no debí salir nunca.
Podemos secuestrar. -Y pedir un rescate de millones.
La hemos buscado. -¿Qué pasa?
¿No la tendrá Catalina? -María no aparece.
¿Qué?
Hoy mismo me voy a un sitio donde...
...ella nunca me volverá a ver.
Los tíos de María hacen una visita a la casa. La mala suerte hace que el aspecto de Catalina y no sea el más adecuado. Los tíos, escandalizados, llaman a un inspector de menores para que les de la custodia de la niña.
Ante la noticia de que el inspector visitará la casa, los niños decidirán hacer todo lo que este en su mano para que María se quede, incluyendo intentar aparentar una educación excesivamente formal y buscarle un novio ficticio a Catalina. Idea que más de uno tendrá creando las consiguientes confusiones y equívocos ante los ojos del inspector.
Añadir comentario ↓
Adriana. Un favor serían tan amables de subir los capítulos que faltan, yo veía la serie por internet, pero me tengo que ir a trabajar y la busco cuando llego a casa, y me encuentro que siguen los mismo capítulos, yo sigo la serie desde México, la verdad ya se me hace muy cansado el estar esperando que pongan los capítulos faltántes, lástima ya no los seguiré, buscare otra serie. Saludos desde México.
Por favor, acaben de poner ya la serie a partir del capítulo 80. Tengo unas ganas de que se acabe la serie ya, no la serie en sí que la extrañaré muchísimo, sino por no tener que seguir detrás de ustedes mendigando un capítulo todos los días. Les debería dar pena lo informales que sois. No vuelvo a ver una serie de la uno ni aunque me la regalen en DVD. Suban los capítulos por favor. Gracias.
cuando van a subir los capitulos que faltan?
El capitulo que toca,por favorrrrr .Esto es el cuento del nunca acabar.No podéis ser más serios??