Vidas de tantos - Arthur Cravan

Desde niño sintió una admiración irresistible por su desgraciado tío Oscar Wilde. Como él, quiso ser poeta, rebelde y, por ello, heterodoxo. Cravan medía dos metros, pesaba 120 kilos y experimentó el orgullo de ser un coloso. Poeta excéntrico, creía que el talento es una exudación del tamaño del cuerpo. Admiraba a los hipopótamos y a los pesos pesados del boxeo. Viajó por medio mundo como marino mercante o como jornalero de cosechas varias. Casi cien años después, permanece el misterio de la muerte del sobrino más estrafalario de Oscar Wilde.