La difícil conciliación familiar en el estado de alarma

A medida que avanzan las fases, son muchas las personas que se tendrán que ir reincorporando a los trabajos, algunas ya lo están haciendo, pero los niños no van a volver al colegio hasta septiembre. Y todavía no se sabe cuántas horas y de qué manera van a ir a clases presenciales. He hablado con algunas madres y padres que están intentando conciliar trabajo y familia. Y no está siendo fácil. Este tipo de conversaciones son habituales estos días.

Incertidumbre sería la palabra que viven muchas familias estos días porque nadie sabe cómo será la nueva normalidad ni en los colegios ni en los trabajos. Cada familia es un mundo y las circunstancias cambian pero estas son familias con suerte porque siguen trabajando de una forma u otra. En el caso de las familias monoparentales la situación todavía se complica más porque no hay con quien turnarse para trabajar y cuidar a los niños si no existe una red de apoyo familiar extensa.