Ramón Rubio, cuarenta y cinco años al servicio del patrimonio cinematográfico español.
Las instituciones las definen y les dan sentido a las personas. Ramón Rubio es corazón, alma y sabiduría de la Filmoteca española. Ha buscado, registrado y negociado mucho de nuestro patrimonio fílmico. Es noble, honrado, buen conversador y nuestro patrimonio ha estado en buenas manos sabiendo que ni ha tenido poder político, ni la última decisión jamás estuvo en sus manos, temporadas que los presupuestos de Filmoteca avergonzarían al país más pequeño del planeta. Ha visto y enseñado el significado de nuestro cine a directores y directoras. Hoy Ramón Rubio en el séptimo vicio, desgranando una vida dedicada al rescate, conservación y restauración de nuestro cine español.
