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En Madrid, se investiga un nuevo caso de bebés robados. Lo hace el mismo juez que acaba de archivar, por defunción, el caso en el que estaba imputada la religiosa María Valbuena. Ahora se trata de aclarar qué pasó con un bebé prematuro, del que no existe documentación.

Hasta ahora y desde que comenzaron los desenterramientos en los casos de supuestos bebés robados, nunca se había visto trabajar a antropólogos y facultativos de criminalística cuando llega un féretro. TVE ha entrado por primera vez en el laboratorio del Instituto Nacional de Toxicología de Madrid donde se analizan todos los restos de esas exhumaciones.

Familiares de supuestos casos de niños robados se han manifestado hoy ante la sede de la Fiscalía General del Estado en Madrid. Convocados por las asociaciones Anadir, ADN-D, Aberoa y SOS Bebes Robados, han pedido que se reabran los casos archivados.

Su muerte podría suponer el archivo de los dos casos de bebés robados en los que María Gómez Valbuena estaba imputada por detención ilegal. Uno se refería a una niña desaparecida en 1982, y otro, a unas gemelas, un año antes; los dos en la Clínica Santa Cristina de Madrid.

La religiosa Sor María ha fallecido en Madrid a los 87 años. El abogado de uno de los casos en los que estaba imputada la religiosa Sor María por el presunto robo de bebés ha señalado que la muerte de la religiosa no frena la investigación porque en el juzgado hay abiertas más diligencias. El letrado Alipio Barbero ha explicado que la responsabilidad penal se extingue con el fallecimiento, pero resalta que el caso seguirá adelante. Es el abogado de Purificación Betegón que acusaba a sor María de haberle robado a las gemelas que dio a luz en la Clínica Santa Cristina en 1981. Sor María estaba citada a declarar por este caso el pasado 18 de enero pero no se presentó por motivos de salud. Días después falleció.

El presidente de Anadir, Antonio Barros, ha afirmado tras conocer la muerte de sor María, la única religiosa imputada por ahora en el caso de niños robados, que hay "muchas más monjas implicadas que han colaborado en adopciones irregulares y robo de bebés". Desde esta asociación aseguran que tienen las pruebas.

Se ha exhumado el féretro de un bebé presuntamente robado en los 60. Se trata de la primera exhumación a través del nuevo protocolo aprobado para los casos de bebés robados. Ha sido en San Sebastián. Los primeros análisis realizados esta tarde en el anatómico forense confirma que los restos óseos son de un recién nacido. Ahora intentarán determinar si son compatibles con sus progenitores. El nuevo protocolo se seguirá en todas las comunidades autónomas.

El Fiscal General del Estado ha ordenado que se investiguen a fondo todos los casos de supuestos bebés robados. Para ello los fiscales podrán ordenar exhumaciones y practicar pruebas de ADN sin una orden judicial. Son algunas de las medidas que ha comunicado a todas las fiscalías españolas en una circular para unificar la respuesta judicial en los casos de niños robados.

89 niños rescatadas y más de 300 personas detenidas. Son las cifras de la última operación contra el robo y tráfico de niños en China, en la que han participado departamentos policiales de nueve provincias. Ahora las autoridades rastrearán el ADN de los niños para devolverlos a sus padres. Desde 2009 se han desarticulado 11.000 mafias, que secuestran a cerca de 3000 miles de niños, según cifras oficiales. En las zonas más pobres, las familias venden a sus hijos por 3.000 euros. Pese a las duras sentencias, los elevados beneficios y la política del hijo único ha producido un aumento del tráfico de menores en los últimos años.

Felisa llevaba años esperando este momento, poder contarle al juez porque cree que su hijo nacido hace 34 años no murió tal y como le dijó una monja llamada Sor María poco después del parto.

Ocurrió el 26 de mayo de 1978 en la Casa de la Madre de Madrid. Ni ella ni su marido pudieron ver al bebé muerto. El abogado de la acusación también señala otras irregularidades como que la licencia de enterramiento este en blanco, o que no se utilizaran los modelos oficiales para certificar su muerte. También sospechan del enorme interés que demostró una monja llamada Sor María por el bebe que iba a tener Felisa.