Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Dos turistas españoles, un hombre y una mujer, han sido secuestrados en Colombia, según ha confirmado este martes el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, quien ha explicado que su departamento ha estado en contacto con el Gobierno de aquel país y con sus familias desde el primer momento.

El secuestro se produjo el pasado viernes en el noroeste de Colombia, en una zona fronteriza con Venezuela, donde pueden haber sido trasladados, según las fuentes policiales colombianas consultadas por Efe.

Los turistas son Ángel Sánchez Fernández, de 49 años, y María Concepción Marlaska Sedano, de 43, han confirmado a Efe las autoridades del país iberoamericano. Ambos son naturales de Avilés, en Asturias, y estaban en Colombia de vacaciones.

Fuentes policiales aseguraron en un principio que la mujer era familia del juez Grande-Marlaska, pero Margallo no ha querido aclararlo. "Ni confirmo ni desmiento", ha señalado el ministro.

El Gobierno de Colombia y la guerrilla de las FARC cumplen seis meses de conversaciones de paz en La Habana sin haber logrado aún cerrar el primer punto de la agenda pactada para el diálogo: la compleja cuestión de la tierra.

Se cumplen seis meses del inicio del proceso de paz en Colombia. Enviando mensajes alentadores, los negociadores han mantenido la palabra "paz" sobre la mesa, aunque el conflicto armado continúa. Por el momento, ambas partes perfilan un posible acuerdo sobre política agraria y, a largo plazo, sobre la incorporación de los guerrilleros a la vida política.

Una historia que dio la vuelta al mundo y que llegó incluso al cine y a la literatura, la de Emmanuel, el hijo que Clara Rojas, la candidata a la vicepresidencia de Colombia secuestrada en 2002, tuvo durante sus seis años de cautiverio. Las FARC obligaron al campesino José Crisanto Gómez a hacerse cargo del niño, enfermo de malaria y leishmaniosis.

En 2007 Crisanto descubrió quién era su madre y lo entregó a las autoridades. Unos meses después, la liberación de Clara Rojas reunía de nuevo a madre e hijo.

Para Crisanto, el final feliz se convirtió en pesadilla. Las FARC le amenazaron de muerte por traidor y la justicia le mantuvo cuatro años entre rejas por colaborar con la guerrilla.

La fiscalía recurrió, y un tribunal superior ha condenado ahora a Crisanto López a 33 años por secuestro, rebelión y falso testimonio. Vuelve a encontrarse entre dos fuegos: los mismos policías que le protegen de las FARC pueden ser los que reciban la orden de detenerlo.

Los negociadores del Gobierno colombiano viajaron el lunes a Cuba para abordar una fase clave en el diálogo con las FARC, en la que está previsto que tomen forma los acuerdos sobre tierras y comiencen a debatir sobre la participación política de los guerrilleros tras una eventual firma de la paz.

La delegación gubernamental que lidera el exvicepresidente Humberto de la Calle partió a La Habana en medio de una gran discreción y sin ofrecer declaraciones, como era habitual en anteriores ocasiones.

Este octavo ciclo de diálogo ha sido aplazado en dos ocasiones y el aplazamiento fue justificado por ambas partes como un periodo necesario para adelantar trabajo en cada delegación y llegar a la mesa de negociaciones con posturas consolidadas que aceleraran la firma de acuerdos.

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, y la guerrilla de las FARC han enviado sendos mensajes al país asegurando que el proceso de paz va bien. Según Santos, en unos meses podría haber algún tipo de acuerdo. Las conversaciones continúan en La Habana con un equipo negociador reforzado por el ala militar de la guerrilla.