- Hasta el lugar del incidente se ha desplazado el presidente de República Dominicana, Luis Abinader
- En la sala se celebraba un concierto del cantante de merengue Rubby Pérez, cuyo destino se desconoce
RTVE entra en la mina del Pozo María, en Caboalles de Abajo (León), una mina de carbón de principios del siglo 20 que estuvo en activo hasta el año 2000. Es un poco vertical que llegó a tener 300 metros de profundidad.
Sacaban 600 vagones al día. Un trabajo duro y con un enemigo silencioso: el gas grisú. En 1979 ocurrió un accidente que mató a diez mineros. Un episodio que han rememorado ahora con la tragedia de la mina asturiana de Cerredo.
Belarmina Díaz, consejera de Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico del Principado de Asturias, ha estado en Las Mañanas de RNE con Josep Cuní hablando de la tragedia de la mina de Zarréu, en Asturias, que ha acabado con la vida de cinco trabajadores y ha dejado cuatro heridos graves. "Estamos muy conmocionados porque el grisú es un gas muy imprevisible, que explota a una concentración determinada y con un comportamiento a veces muy traidor", explica Díaz, que también es ingeniera de minas. Además, tiene una visión clara sobre este tipo de accidentes: "Desde nuestro punto de vista cualquier accidente debería de evitarse y puede ser evitado".
La consejera explica que el protocolo a seguir es que un vigilante entre con un detector de grisú en la mina, y que entiende que esa medida de seguridad se habría aplicado. A consecuencia de la tragedia, el sector ha convocado dos días de huelga por las condiciones de riesgo que atraviesan en las minas, aunque la entrevistada afirma que "antiguamente había muchos accidentes muy graves, pero en los últimos tiempos no se estaba detectando esa fuerte incidencia". Díaz especifica que la mina tenía un permiso hasta el 11 de abril para retirar material, máquinas o vías, de manera que se pueda producir el cierre definitivo del piso tercero, pero que aún no han podido esclarecer si esas eran las labores que se estaban realizando en el momento de la explosión.
- El polideportivo municipal de Villablino, en León, acoge la capilla ardiente de cuatro de los cinco mineros
- Las víctimas tenían entre 32 y 54 años, y eran vecinos de las comarcas leonesas de Laciana y El Bierzo
Asturias y Castilla y León siguen este martes de luto por la muerte de cinco trabajadores —en su mayoría leoneses— a causa de una explosión en el interior de una mina en la localidad de Cerredo, en el concejo de Degaña, mientras continúa la investigación del siniestro, con la principal hipótesis de que podría haberla provocado una bolsa de gas grisú. El polideportivo municipal de Villablino (León) acogerá la capilla ardiente de cuatro de los cinco mineros que este lunes han perdido la vida en la explosión en una mina de Cerredo (Asturias), mientras que el quinto fallecido será enterrado en Torre del Bierzo, también en la provincia de León. Foto: Carlos Castro / Europa Press.
Al menos cinco muertos y cuatro heridos en un accidente en la mina asturiana de Cerredo. Una bolsa de grisú es la principal hipótesis que barajan las autoridades como causa del accidente. En el informativo 24 horas de RNE, hemos hablado sobre ello con José Luis Merayo, minero jubilado, que ha explicado que la mina se caracteriza principalmente por ser muy peligrosa. Ha asegurado que en esta profesión "se ha invertido mucho en seguridad", pero que aún así "muchos accidentes son inevitables" y ha confesado que él mismo sufrió uno muy grave. Sobre el grisú, ha explicado que "es muy traicionero porque no lo detectas", aunque ha añadido que "tampoco explota así porque sí, se tienen que dar ciertas circunstancias", pero ha recalcado que "no lo ves venir."
- El Consejo General de Arán había lanzado para este domingo un aviso naranja por riesgo de aludes en la zona
- El siniestro se produjo cuando el copiloto Andreas Lubitz estrelló de manera deliberada la aeronave en los Alpes franceses
- En España, el acto se celebró un día antes, el domingo, en el recinto del Aeropuerto de Barcelona
Hoy se cumplen 10 años de la tragedia aérea del vuelo de Germanwings 9525, en el que fallecieron 150 personas, 144 pasajeros y 6 tripulantes, entre los que se encontraba Andreas Lubitz, el copiloto de la aeronave. Este se encerró en la cabina, tomó el control del vuelo y lo estrelló en los Alpes franceses. La investigación determinó que padecía problemas psicológicos y que se los había ocultado a la aerolínea, por lo que se trata de una catástrofe que cambió los protocolos de seguridad aérea. "La normativa alemana era poco específica en ese momento en cuanto a la jerarquía entre confidencialidad médico-paciente y seguridad pública", explica Ángel González, piloto y subdirector del Departamento Técnico del Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) en Las Mañanas de RNE con Josep Cuní.
El piloto explica que a raíz del accidente se establecen recomendaciones que pasan al reglamento europeo en algunos casos: "La primera recomendación que surgió del informe preliminar es que haya siempre dos personas en cabina, lo que entra en conflicto con estudios de viabilidad, ya que hay algunos fabricantes que están estudiando la posibilidad de reducir de tres a dos pilotos y de dos a un piloto en cabina", cuenta. González incide en que desde Sepla priman la seguridad y se oponen a estas medidas. "La segunda recomendación que se estableció es el desarrollo de programas de apoyo a las tripulaciones que es de obligado cumplimiento desde el año 2017", prosigue el piloto, que añade una tercera recomendación a la lista, que es la evaluación psicológica de las tripulaciones de vuelo.
- El 24 de marzo de 2015, un avión que volaba de Barcelona a Düsseldorf se precipitó sobre los Alpes con 150 personas a bordo
- La investigación reveló que el copiloto, Andreas Lubitz, estrelló deliberadamente la aeronave
- Se han precipitado en el paso de la Escupidera, cerca de la cumbre del Moncayo, según ha informado la Guardia Civil
- Nueve de los heridos han sido trasladados a diferentes centros sanitarios, uno de ellos al hospital de Mollet
- El autobús se ha salido de la vía en el punto kilométrico 88 de la C-33 y las causas se están investigando
Varios heridos al volcar un autobús del Imserso en la A-7 a la altura de Cabezo de Torres, en Murcia
- 20 personas de las que viajaban en el autocar que ha sufrido el siniestro en la A-7 han resultado heridas, cinco de gravedad
- Un minuto después de haber despegado, la aeronave hizo un viraje y cayó al mar
- Socorristas de varias instituciones y voluntarios participan en las labores de rescate
Cuatro jóvenes han muerto tras despeñarse su coche por una ladera en el puerto de Lunada, Cantabria. El coche en el que viajaban se salió de la vía y cayó por una ladera a 300 metros de altura. Los cuatro jóvenes, del madrileño barrio de Vallecas, dos chicos y dos chicas de entre 20 y 21 años, iban a celebrar el cumpleaños de uno de ellos a una casa rural con más amigos, que viajaban en el vehículo que iba atrás. La Guardia Civil sigue investigando las posibles causas del accidente.
- El teléfono de uno de los jóvenes que murió en un siniestro el sábado en Cantabria avisó automáticamente a Emergencias
- Los últimos modelos de iPhone detectan accidentes graves y contactan con el 112 en caso de que la víctima no pueda hacerlo
Seis personas han muerto este domingo en dos accidente de tráfico en Cantabria y Murcia. Cuatro de ellos, dos chicas y dos chicos de 20 y 21 años han perdido la vida después de que el coche en el viajaban se saliera de la vía y se despeñara por una ladera de 300 metros de altura en el puerto cántabro de Lunada. Los otros dos han fallecido en un choque entre dos vehículos en una carretera del municipio murciano de Caravaca de la Cruz. Hay dos heridos, uno de ellos de gravedad. Foto: REMITIDA / HANDOUT por 112 CANTABRIA
- Los ocupantes del vehículo eran dos mujeres y dos hombres de 20 y 21 años naturales de Madrid
- Otras dos personas han muerto en una colisión entre dos coches en Caravaca de la Cruz, Murcia
- ¿Estamos preparados para una emergencia? Pedro Ruiz revela a Rtve.es los errores más frecuentes y cómo evitarlos
- "Tenemos que identificar en qué zona nos encontramos y saber cuál es la exposición al riesgo", asegura el experto
- Los cuatro fallecidos —dos búlgaros y dos checos— son los conductores de los camiones siniestrados y sus copilotas
- La colisión frontal ha tenido lugar a las 3:58 de este miércoles en el kilómetro 10 de la N-113 que une Pamplona y Madrid