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¿Soy un príncipe o una coliflor? La Cenerentola de Rossini, en directo desde el Teatro Real

  • La ópera no es aburrida, sobre todo cuando el protagonista exclama '¿Soy un príncipe o una coliflor?'
  • 'La Cenerentola', el cuento de la Cenicienta en clave de humor y con música de Rossini, llega al Teatro Real
  • Te contamos por qué no te la puedes perder este jueves, a las 19:25h en directo en La 2 y en RTVE Play

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La Cenerentola, de Rossini, en el Teatro Real de Madrid

'¿Soy un príncipe o una coliflor?', exclama el chico casadero. La ópera de Rossini que veremos este jueves en La 2 y en RTVEPlay es de todo menos aburrida. Es una de las óperas cómicas más populares y además, esta versión del Teatro Real tiene cambios respecto al cuento de la Ceniencienta que todos conocemos. Os vamos a dar ocho razones irrfutables por las que no os la podéis perder.

1. Es una obra cómica y divertida

Gioachino Rossini era un experto en hacer reír, en la ópera cómica o 'buffa'. Y en el patio de butacas, el público aficionado a la ópera, acostumbrado a tragedias, sacrificios y dioses malignos, agradece divertirse y soltar la carcajada.

El encargo llegó al compositor con prisas: le exigiero a Rossini y su libretista, Charles-Guillaume Etienne, terminarla en solo 24 días. ¡Y lo lograron! Cuando se estrenó La Cenerentola en Roma, el 25 de enero de 1817, cosechó un gran éxito. En unas décadas, que antes todo era muy lento, esta obra llegó a los teatros de ópera de medio mundo: de Constantinopla a Buenos Aires, a Calcuta y hasta Sidney.

2. No hay madrastra, hay madrastro

En el cuento de La Cenicienta de Charles Perrault que nos han contado de pequeños, a la hermana guapa y esbelta su mandrastra y sus hermanastras feas la obligan a limpiar toda la casa y cargar con las tareas difíciles del día a día. En esta versión de Rossini no hay madrastra mala, sinó padrastro, malo y mezquino. El compositor se vio obligado a realizar este cambio en el reparto para poder incluir una voz masculina entre tantas mujeres.

3. Tampoco hay zapato

No veremos en el Teatro Real a La Cenerentola perdiendo y probándose un zapato, sinó un brazalete. Es así porque en la época en que se escribió esta ópera estaba mal visto que una mujer se descalzase en público.

4. ¡Ni calabaza!

Tampoco tendremos calabaza que se convierte en carroza. Ni ratones que se transformen en lacayos y conduzcan a nuestra bella protagonista al baile vestidos con librea. El autor del libreto Charles-Guillaume Etienne y el de la partitura, Gioachino Rossini, lograron así un efecto más realista y romántico.

5. Para rematar, tampoco hay hada madrina

Romanticismo, coros masculinos, sin zapato de cristal... No es de estrañar que nos quedemos sin ver una espléndida hada madrina de rostro dulce y barita mágica. En el escenario del Real no veremos hada madrina, sinó 'hado madrino'. El papel lo asume un personaje que actúa de consejero, filósofo y asesor del príncipe. Él es el encargado de buscarle pareja entre las mujeres más humildes del reino.

6. Rossini era tacaño, pero le salió bien

Para Gioachino Rossini era muy importante no gastar más de lo estrictamente necesario y para ahorrar eliminó el coro femenino. De un plumazo. Con un par. Sin embargo, el resultado es espectacular.

7. Dmitry Korchak es el tenor

Encabeza la representación que veremos en La 2 y en RTVEPlay el prestigioso Dmitry Korchak. El cantante ruso tiene mucha experiencia en obras rossinianas e incluso ha dirigido algunas de sus obras frente a la orquesta. Juanto a el, actuan Florian Sempey, Renato Girolami, Rocío Pérez, Carol García, Karine Deshayes y Roberto Tagliavini.

La Cenerentola, de Rossini, en el Teatro Real de Madrid

8. El amor es un tema universal y si encima te ríes mucho, mejor

La historia de una chica humilde que se convierte en princesa no es un invento de Perrault ni de su siglo, el XVII, sinó un argumento que ya encontramos en la antigua Grecia, en los cuentos de China del siglo VII y e incluso en Las mil y una noches, los cuentos tradicionales del Oriente Medio. Todas las versiones anteriores han triunfado gracias a las ocurrencias, los chistes, triquiñuelas y chascarrillos de sus personajes. De si es comida de conejos o un heredero del reino se pregunta el protagonista, que no encuentra su lugar en el mundo, hasta que la dulce jovencita les tomará de la mano y le guiará al trono.

Así que estamos seguros que también la váis a disfrutar. Es una Cenicienta que ni es al uso ni os va a a dejar indiferentes. Y se además retrasmite en directo, este jueves, 23 de septiembre, desde el Teatro Real de Madrid, a las 19:25h, por La 2 y RTVEPlay.