Maestros a medida

Todos los sábados, los alumnos matriculados en el Instituto Hondureño de Educación Radial (IHER) acuden a sus centros de referencia para asistir a clases presenciales y recibir apoyo de los tutores.

El jardín de infancia “Con flores a María” es uno de los 22 centros educativos que forman parte del programa “Madres maestras”. Un proyecto pensado para niños de tres a cinco años que viven en zonas empobrecidas. Las voluntarias de este centro tienen doble mérito. En San Pedro Sula, dentro del conflictivo sector de la Rivera Hernández, está el barrio de Cerrito Lindo. Aquí las bandas de jóvenes delincuentes mantienen una guerra por el territorio. Es lo que se conoce como “zona de traqueteo”. El jardín de infancia ha quedado en tierra de nadie y las familias temen los tiroteos. El centro llegó a tener 50 niños. Pero a medida que el conflicto de la colonia se endurecía, el miedo hizo descender el número de alumnos. En la actualidad apenas una docena acuden cada mañana a este jardín. La pobreza y el miedo van de la mano. “Madres maestras” es una iniciativa reconocida por el Ministerio de Educación hondureño. Más de medio millar de niños reciben formación preescolar y una comida diaria. El sostenimiento económico se debe, casi en su totalidad, a la familia claretiana y a la ong española PROCLADE. Los 22 centros educativos de “madres maestras” en Honduras están animados por 170 voluntarias. Mujeres que no lo han tenido fácil en la vida y han encontrado aquí un espacio de libertad, esperanza y dignidad.

El maestro en casa

Todos los días, Radio Subirana entra en las casas de los hondureños para contar noticias, hablar de derechos humanos, salud, ecología y de Dios. “El maestro en casa” es uno de sus programas. Gracias a este modelo de educación a distancia el año pasado 55.000 niños y jóvenes pudieron seguir estudiando. “El maestro en casa” es un modelo de educación a distancia que nació en las islas canarias y se ha extendido con mucho éxito en América Latina. El Instituto Hondureño de Educación Radial ofrece a los alumnos la posibilidad de cursar la Primaria de un modo acelerado. De este modo los que abandonaron el sistema pueden cursar los primeros seis años en sólo tres. La Secundaria, sin embargo, sigue el mismo ritmo que en los colegios. Todos los sábados los alumnos matriculados en el IHER acuden a sus centros de referencia para asistir a clases presenciales y recibir apoyo de los tutores. De este modo los alumnos tienen la posibilidad de hacer consultas, solventar dudas y hacer sus exámenes.

La Milagrosa

La población de Tela no llega a los 50.000 habitantes. El colegio La Milagrosa es uno de los más reconocidos en la ciudad. En él estudian alrededor de 900 chicos y chicas en turno de mañana y de tarde. Un niño que entra en preescolar con tres años puede cursar en el colegio la primaria y la secundaria antes de ir a la universidad al cumplir los 18 años. El colegio ha hecho una opción preferencial por los más pobres. 80 de sus alumnos están becados por el propio centro. La atención a los niños con necesidades educativas especiales es otra característica propia de La Milagrosa. Este curso son 25 niños integrados en aula con atención preferente. La Milagrosa cumplió 52 años en mayo. Muchos de sus profesores son antiguos alumnos. Es un colegio vivo y abierto a los nuevos tiempos. Atento a las necesidades de la sociedad a la que sirve. Un centro integrador. Una escuela familiar en la que caben todos.