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Curiosidades históricas del capítulo 5

Juana de Avis, embarazada de otro

  • ¿Qué pasó con Juana cuando se quedo embarazada de Don Pedro?
  • ¿Cómo fue la relación de Isabel y Gonzalo?
  • ¿Quién era Gutierre de Cárdenas?¿Sintió de verdad Enrique la muerte de Alfonso?

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Isabel - Juana de Avis embarazada de otro

Isabel está llena de política y de intrigas palaciegas, pero también hay espacio para las pasiones, para las decepciones y para el amor...¡y todo basado en hechos reales! En el reportaje de esta semana sobre curiosidades históricas te queremos contar cómo fue la relación de Juana de Avis con Don Pedro ¿Qué pasó con ese embarazo que escandalizó al reino de Castilla? Además queremos centrarnos en esa relación tan especial entre Gonzalo e Isabel ¿amor o lealtad y cariño?

Juana de Avis embarazada de gemelos

Juana tiene que elegir entre ser reina o dejarse llevar por alguien que la quiere

Juana de Avis ha pasado de ser una reina con mucho carácter, e incluso temida, a pasar por sus horas más bajas.  Apartada de la corte, lejos de su hija y ahora embarazada. Javier Olivares, jefe de guión, nos asegura que se encuentra en una encrucijada: "Juana tiene que elegir entre ser reina o dejarse llevar por alguien que la quiere".

Ecándalo en la corte, la reina embarazada de un bastardo

¿Pero quién es ese Pedro que ha aparecido en su vida y la ha cambiado su destino? Se lo preguntamos a Óscar Villarroel, del Departamento de Historia Medieval de la UCM,: "No sabemos exactamente cómo se conocieron ni podemos llegar a saber si se enamoraron tal y como hoy lo comprendemos, los sentimientos y mentalidades han cambiado con el tiempo, además de que las fuentes no nos los transmiten. Lo cierto es que él era canciller de la Casa de la reina, es decir, encargado de la documentación que debía emanar de su Casa."

No hay constancia, efectivamente, de que detrás de aquella historia hubiera amor, pero Teresa Cunillera, asesora histórica de Isabel, cree que hay indicios que pueden indicarnos que sí que hubo cariño entre los dos: "Juana, claro, tuvo que abandonar la corte y se sabe qué el permaneció junto a ella y se hizo cargo de los niños que tuvieron."

Sabiendo cuál era la moral imperante en el siglo XV y el papel de la mujer en aquella sociedad hemos querido saber si hubo algún castigo para la reina adúltera. Teresa Cunillera asegura que castigo físico no hubo, pero que sí que la apartaron de la corte, la rechazaron y que perdió su categoría de reina y añade: "Eso ya era una pena muy fuerte".

Enrique no dudó en reconciliarse aparentemente con ella al reconocer a Juana como hija

Pero, ya lo sabemos, la historia da muchas vueltas y el tiempo lo relativiza todo. Óscar Villarroel nos adelanta que pasará con el matrimonio de los reyes: "Años después, tras el matrimonio de Isabel con Fernando,  Enrique no dudó en reconciliarse aparentemente con ella al reconocer a Juana como hija, aunque no permanecieron juntos mucho tiempo. En cuanto a la relación de Juana con sus hermanos, la desconocemos. Sí conocemos la de Isabel, que se preocupó porque fuesen atendidos y mantenidos."

Los abortos en el siglo XV

El embarazo de la reina nos ha dado la posibilidad de ver cómo se practicaban los abortos en la Edad Media. Cunillera nos explica que es una práctica que ha acompañado al hombre en todas las épocas, que llegaba a ser incluso un método para controlar la natalidad.

"Había una discusión en cuanto al aborto, no era algo unánime. Muchos consideraban que en el momento de la concepción, el cuerpo que se estaba gestando aún no había recibido el alma. Para los varones, esa infusión del alma llegaba en 40 días. En el caso de las mujeres, como podéis adivinar, no era así, resulta que tardaba más, de 80 a 90 días. Pero eso tampoco justificaba moralmente el aborto porque consideraban que ese cuerpo ya era un proyecto de vida que iba a formarse."

Nuevo fichaje en la corte: Gutierre de Cárdenas

Óscar Villarroel nos lo sitúa en la historia. Nos cuenta el historiador que era un noble de segunda fila que entró en la corte por su relación familiar con Gonzalo Chacón (en la serie hemos visto que es sobrino de Doña Clara, su esposa). Alguna documentación y algunas crónicas le dan muchísimo protagonismo en el acuerdo de la boda de Isabel y Fernando, junto al arzobispo Carrillo.

Chacón elige sucesor

Y es que como nos adelanta Teresa Cunillera, Gutierre de Cárdenas será un personaje muy importante: "Entró en la corte como todos. Allí se llegaba como un criado o, como mucho, como un maestro de sala. Hoy en día, eso nos podía parecer denigrante, pero, por ejemplo, ser camarero o, incluso, el que partía la carne era un gran honor. Poco a poco iban subiendo de categoría. Él fue de los que más ascendió y luego será uno de los más poderosos al final del reinado de Isabel: rico, influyente y con muchas tierras." De hecho, Villarroel señala que su hijo recibió el título de Duque de Maqueda.

La pena de Enrique IV por la muerte de su hermano Alfonso

Dos reyes, un solo trono y un reino dividido que se desangra en una guerra fraticida. En este escenario,  la muerte de Alfonso tendría que haber sido un alivio para el rey Enrique, una oportunidad única para acabar con el bando rebelde.

Pero de nuevo, el personaje interpretado por Pablo Derqui, da un giro que nadie se espera y, lejos de alegrarse, siente profundamente la muerte del joven. ¿Es real ese dolor tan grande que manifiesta en la carta que envía a toda Castilla?

Para Enrique IV primaban los sentimientos y la familia

Teresa Cunillera cree que sí: "Para Enrique IV primaban los sentimientos y la familia. Tenía una personalidad muy peculiar que nadie en la época entendía. Esa carta... es algo en lo que no puedes engañar, cuando tú escribes algo de todo corazón ahí queda reflejado."

Villarroel, por el contrario, cree que probablemente no fuera esa carta la que evitara la guerra: "Lo que realmente primó en ese momento era que Pacheco era consciente de que la guerra no tenía salida. Su bando había ido debilitándose poco a poco, con más y más nobles que atemperaban su posición y buscaban la negociación. Y eso mismo hizo él. Isabel se mostró siempre heredera de su hermano Alfonso, y como tal escribió a las ciudades mientras éste agonizaba. ¿Por qué no tomar el título de reina? Posiblemente ella también era consciente de que no tendría mucho futuro, más si sabía que Pacheco también se aprestaba a la negociación."

¿Hay amor entre Gonzalo e Isabel?

Desde el capítulo dos hemos visto al personaje de Peris Mencheta, Gonzalo Fernández de Córdoba, suspirar por Isabel. Los guionistas ya nos han reconocido en el reportaje que hemos hecho contándote cómo se hizo el capítulo cinco, que esta parte ha sido la más difícil de plasmar en diálogos porque es la que más ingredientes de ficción tiene.

¿Qué siente Isabel por Gonzalo?

De Gonzalo hay poca documentación, solo se sabe que debió de tener una muy buena relación con Isabel porque siempre fue leal a la reina. Teresa Cunillera dice que no podemos saber qué hacían a todas horas, pero que por los indicios históricos que se tienen, no es descabellado pensar que sí hubo una historia de amor.

Villarroel se muestra más escéptico: "Él era un segundón de una familia nobiliaria cordobesa. La ciudad y el entorno de Córdoba llevaba mucho tiempo en disputa entre dos familias emparentadas, y Gonzalo era un segundón de una de ellas. Sirvió como paje a Alfonso y, a su muerte, a Isabel. Sabemos que en la guerra civil tuvo alguna acción destacada, pero no sería hasta la Guerra de Granada cuando llegase despuntar. Sin embargo sí se hizo presente a ojos de Isabel, en el sentido de preocuparse por el destino de uno de sus servidores. Esto es así porque en 1476, estando prisionero en Córdoba por uno de sus primos, fue liberado por intercesión de los reyes. Como vemos ya estaba lejos de la corte y más preocupado por los conflictos cordobeses, pero se intervino en su favor. Desde mi punto de vista la relación que, de momento, apunta la serie entre Gonzalo e Isabel es fantasiosa y un recurso para atraer público. "

Son recursos de la ficción histórica para llegar a los espectadores. Los hemos conocido en los libros de historia, pero ahora, gracias a Isabel nos los imaginamos fuera de la política. Juana de Avis, Beltrán de la Cueva, Pacheco, Isabel, Fernando... todos dejan de ser solo nombres que memorizar para ser historia que casi, casi, se puede tocar.