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Elogio de la locura

  • Elling, una joya de la literatura escandinava ahora en los escenarios españoles
  • David Serrano y el actor Carmelo Gómez son los iniciadores del proyecto
  • Además, el actor Javier Gutiérrez y el director Andrés Lima
  • 'Mi reino por un caballo' se emite los lunes, a las 20.00 horas, en La 2

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Mi reino por un caballo - 05/12/11

Eva Luna es redactora de la revista especializada en danza y teatro de La 2 de TVE que lleva por título Mi reino por un caballo, citando al gran maestro William Shakespeare.

Mi reino por un caballo es un programa sobre actualidad de las artes escénicas que se emite en La 2 de TVE la noche del jueves al viernes a las 00.45, y también el lunes, a las 19.30, en La 2

Cuando nos planteamos cubrir el estreno de Elling, recordé la película.

Era una peli, no sabía decir si sueca o noruega, que me sonaba que había estado nominada al Oscar, no hará más de una década.

Una historia de superación, de miedos y de lucha contra unos fantasmas que en realidad son los que viven dentro de todos nosotros

Pero lo único que recordaba con claridad (lo único que nunca se me olvida) es que la historia me había parecido muy buena.

Y ahora que he podido disfrutar de la adaptación teatral y que, sobre todo, he conocido la fantástica novela de la que parte, me atrevería a decir que el film se quedó en algo demasiado blanco (imagino que para hacerlo apto para el consumo hollywoodiense).

De la literatura al cine y al teatro

Ingvar Ambjørnsen es el autor de la tetralogía de Elling, una joya de la literatura escandinava contemporánea que fue llevada al teatro con notable éxito en Noruega y en el Reino Unido y que ahora, por fin, también podemos disfrutar en los escenarios españoles.

Los impulsores del proyecto, un grupo de productoras independientes, mano a mano con David Serrano (adaptador del texto) y con el actor Carmelo Gómez.

Después se incorporarían el actor Javier Gutiérrez y el director Andrés Lima, que vuelven a trabajar juntos pero esta vez fuera de su compañía, al margen de Animalario.

Se trata en esencia de una conmovedora comedia sobre la fuerza de la amistad y sobre lo diferente

Se trata en esencia de una conmovedora comedia sobre la fuerza de la amistad y sobre lo diferente: Elling y Kjell, dos locos cuyas patologías desconocemos (pero que bien podrían ser un esquizo y un oligofrénico) son llevados a un piso tutelado por el Gobierno para intentar su reinserción.

Comienza en ese momento su gran aventura, la aventura de demostrar que pueden ser… ¿normales? Una historia de superación, de miedos y de lucha contra unos fantasmas que en realidad son los que viven dentro de todos nosotros.

Porque en este mundo histérico que habitamos ¿dónde esta la delgada línea roja que separa la locura y la cordura? ¿y en qué consiste exactamente eso de "ser normal"?.

ay de aquel que diga que no está loco porque ése es el peor de todos

Lo dice Carmelo Gómez "ay de aquel que diga que no está loco porque ése es el peor de todos". Y lo cierto es que eso de ser un demente debe de tener su lado muy lírico ¿no?¿no dicen que "la locura es la fuente principal de la poesía"?

A destacar, en esta adaptación ibérica encarnada por sólo cuatro actores, la vis cómica de Javier Gutiérrez en la piel de Kjell, el bufón pasado de vueltas, el Sancho Panza desquiciado y desquiciante.

Y, muy especialmente, el impecabilísimo trabajo de Carmelo Gómez dando vida al "Quijote" Elling, un personaje tan lleno de matices que supone todo un reto interpretativo.

El cuidado de la voz

Y es aquí donde servidora debe admitir la "gran-metida-de-pata". Confieso que no pude evitar un cierto prejuicio antes de las entrevistas: Me dijeron que Carmelo no quería ser entrevistado hasta el día siguiente al estreno porque debía cuidar su voz y -sin poder controlar a ese pequeño Hitler que, a ratos, me posee- no pude evitar preguntarme ¿¿¿cuidar la voz??? ¿pero qué es? ¿UN TENOR? (dando por sentado que se trataba de un capricho histriónico).

Estrenaban con doble función, lo que suponía más de cuatro horazas gritando, corriendo y dejándose la piel

Pero entonces me senté en aquella butaca del sevillano Lope de Vega y vi la obra al completo. Estrenaban con doble función, lo que suponía más de cuatro horazas gritando, corriendo y dejándose la piel.

Tremendo "maratón" que nos dejó a todos sin aliento. Y claro, en ese momento yo habría querido cortarme la lengua, pero en fin… eso son los prejuicios ¿no? ya lo dice la palabreja: pre-juicios.

Y afortunadamente el post fue más que estupendo. Para nuestro desconsuelo, al día siguiente Javier Gutiérrez estaba tan afónico que no pudo ser entrevistado pero Carmelo Gómez hizo TAL esfuerzo y se mostró TAN absolutamente exquisito con nosotros, que la jornada acabó convertida en un triunfo total y servidora, feliz.

Le estaré eternamente agradecida por ello y me declaro desde ya su fan fatal hasta los restos. De hecho, en enero, cuando estrenen en la capital, pienso volver a ver Elling. Sin dudar. Porque yo también estoy loquísima, vale, pero, sobre todo, porque la obra lo merece.