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CientCientíficos estadounidenses desarrollan un nuevo catalizador capaz de convertir el CO2 en combustible

  • Se basa en níquel y hierro, a diferencia del platino, mucho más raro y costoso
  • Obtiene casi el 100% de eficiencia, y emite monóxido de carbono, con el que se pueden fabricar otros productos

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El siguiente paso es probar el nuevo catalizador en plantas de energía que producen grandes cantidades de dióxido de carbono.
El siguiente paso es probar el nuevo catalizador en plantas de energía que producen grandes cantidades de dióxido de carbono.

Un nuevo catalizador descompone el CO2 en químicos útiles más rápido y barato que el método estándar, y sus creadores creen que puede permitir la conversión eficiente de este gas en combustible.

El dióxido de carbono es un gas estable y abundante. De hecho, es demasiado abundante, y el dióxido de carbono adicional en la atmósfera está cambiando el clima del planeta. Sabiendo esto, muchos químicos están trabajando en formas eficientes de convertir el dióxido de carbono en otros productos útiles. Pero la estabilidad del dióxido de carbono hace que esto sea difícil.

La mejor técnica existente para romper electroquímicamente el dióxido de carbono en pedazos que reaccionen químicamente utiliza un catalizador hecho de platino. Pero el platino es un metal raro y muy costoso.

Ahora, un equipo de investigadores dirigido por Yongtao Meng, un exestudiante graduado de la Universidad de Connecticut en el laboratorio del director del Instituto de Ciencia de Materiales Steve Suib y ahora investigador en la Universidad de Stanford, ha encontrado una mejor manera. Han creado una célula electroquímica llena de un catalizador poroso y espumoso hecho de níquel y hierro. Ambos metales son baratos y abundantes.

Cuando el gas de dióxido de carbono ingresa a la célula electroquímica, y se aplica un voltaje, el catalizador ayuda al dióxido de carbono (un átomo de carbono con dos oxígenos) a romper el oxígeno para formar monóxido de carbono (un átomo de carbono con un oxígeno). El monóxido de carbono es muy reactivo y un precursor útil para fabricar muchos tipos de productos químicos, incluidos plásticos y combustibles como la gasolina.

Un 100% de eficiencia

El nuevo catalizador de níquel-hierro no solo funciona bien; en realidad es más eficiente que el costoso proceso de platino que podría reemplazar. La célula electroquímica que utiliza el catalizador de níquel-hierro obtiene casi el 100% de eficiencia.

"Es casi inaudito. Por lo general, en un buen sistema obtendrás del 90% al 95% de eficiencia, pero puede que no sea estable, que no funcione con el mismo bajo voltaje o que no sea barato", dice Suib. Este proceso tiene todo eso.

El laboratorio de Suib utilizó microscopía electrónica de transmisión de barrido para mapear secciones transversales del nuevo catalizador de níquel-hierro, revelando su estructura interna. Técnicamente es un carbonato de hidróxido de níquel hierro, con una estructura porosa que permite que el gas de dióxido de carbono fluya a través de él. El trabajo de microscopía de Suib mostró que el catalizador permaneció intacto y no se degradó con el uso.

El siguiente paso en el proceso es ver si puede ampliarse, fabricarse a granel y probarse en situaciones industriales como plantas de energía que producen grandes cantidades de dióxido de carbono como producto de desecho.