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Rivera invita a que "presenten un partido" quienes quieran investir a Sánchez y reivindica un 'no' "sin tutelas"

  • Defiende estar en la oposición: "Nos toca tragarnos a Sánchez una legislatura o comernos a Sánchez una década”

Los dirigentes afines a Rivera arropan al líder en el Consejo General de Ciudadanos en medio de su crisis interna

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Rivera responde a los que presionan para abstenerse en la investidura de Sánchez que presenten otro partido político

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, se ha reafirmado en su actual estrategia de no permitir la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno y anclarse en una "oposición firme al sanchismo" que hace oídos sordos a las "tutelas" y "presiones" internas y externas. Se ha dirigido "a quienes hablan de sentido de Estado: lo que hoy es una cuestión de Estado es que haya una oposición firme al sanchismo", ha zanjado, negando dar aliento al "sanchismo" apoyando un gobierno del PSOE. Y también ha lanzando otro aviso a los que quieren que Sánchez "campe a sus anchas", a quienes ha invitado a montar un partido.

En su intervención frente al Consejo General de Ciudadanos, el máximo órgano del partido, que se ha reunido este viernes por primera vez desde las pasadas elecciones generales, Rivera ha roto su silencio de las últimas semanas, con Ciudadanos inmerso en una crisis de identidad por las tensiones que provocó la semana pasada el abandono de su portavoz económico, Toni Roldán, debido al giro a la derecha del partido y la oposición visibilizada de otros cuatro dirigentes para revisar el "no" a la investidura del líder del PSOE.

Llamada a la unidad y mensaje a los críticos

Rivera ha hecho un llamamiento a la unidad interna entre las corrientes socialdemócratas y más liberales del partido: "Es posible venir de afluentes distintos, pero estamos juntos". "Todos los que queráis remar en esta dirección somos compañeros y lo seguiremos siendo", ha añadido, mientras que en un mensaje general que engloba también a sus críticos ha dicho que "si algunos piensan que el sanchismo tiene que campar a sus anchas que presenten un partido político".

Con el crecimiento electoral como aval de su postura, esta ha sido la respuesta de Rivera en la tormenta interna surgida por la dimisión de Roldán y el eurodiputado Javier Nart de la dirección del partido y del líder en Asturias, Juan Vázquez. Aunque en los últimos días no ha habido nuevos abandonos y la tormenta interna se ha amortiguado de cara al exterior, dos dirigentes de peso como el eurodiputado y responsable económico del partido, Luis Garicano, y el candidato de Castilla y León, Paco Igea, siguen defendiendo negociar una abstención con Sánchez.

El desafío de Rivera en lo que respecta a sus críticos ha sido replicado de inmediato por Toni Roldán vía Twitter. El ex secretario de Programas, que ya no tiene nigún cargo en Cs y dimitió como diputado, ha dicho que "no hace falta crear un partido, solo hay que sentarse, exigir reformas, regeneración y que no haya pactos con nacionalistas".

"Un partido de valientes", "sin tutelas"

Rivera rechaza las presiones de "Sánchez y sus tentáculos" para abstenerse en la investidura

Rivera ha defendido el derecho de Ciudadanos a decidir con autonomía su posición política, reivindicando la "libertad para crecer, para hacerse mayores" y tomar sus propias decisiones, así como la "responsabilidad" para asumirlas, al margen de "presiones de partidos y medios de comunicación". "Este es un partido de valientes, de gente sin tutelas, de gente autónoma", ha enarbolado.

Así, ha expuesto que su ambición de gobernar España y no ser un mero "partido bisagra" que apoye gobiernos de PP o PSOE pasa hoy por hoy por mostrar que "una oposición distinta a la del bipartidismo es posible".

"España necesita una oposición fuerte, moderada, liberal, constitucionalista, europeísta", ha proclamado. "Ese proyecto que estamos construyendo es la España que viene, la España del mañana". De esta manera, según Rivera, la alternativa que quiere ser en el futuro Ciudadanos pasa por ser ahora la "nueva oposición", "una oposición firme que pueda gobernar cuando termine la legislatura".

"Lo mejor para España hoy es que haya una oposición centrada y moderada", ha dicho. Para Rivera, apoyar a Sánchez hoy equivaldría a perpetuarlo en el poder, por lo que plantea su estrategia como respuesta a un dilema: "Nos toca tragarnos a Sánchez una legislatura o comernos a Sánchez una década", ha planteado.

Rivera defiende su 'no' a Sánchez: "Lo mejor para España hoy es una oposición centrada y moderada"

Villacís y Aguado piden defender a Rivera de "presiones"

Rivera ha estado precedido en este cónclave por dos de sus actuales lugartenientes, la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, y el candidato de Ciudadanos a la presidencia de la Comunidad, Ignacio Aguado, que han llamado a apretar filas en torno al líder y defender al partido de las "presiones" para no "defraudar" ni "decepcionar" a los cuatro millones de votantes que les apoyaron en las últimas elecciones generales y ante quienes se prometió día tras día que no pactarían con Sánchez.

En su intervención en un acto previo al Consejo General de Ciudadanos, Aguado ha definido a Ciudadanos como "el partido que más capacidad para condicionar gobiernos tiene de toda la historia de la democracia", y ha advertido de que quienes votan a la formación naranja no lo hacen para que sea "un partido pequeñito, un partido bisagra".

Sin embargo, ha insistido el candidato, Ciudadanos está destinado "a ser la alternativa de gobierno", y ha pedido "seguir defendiendo los principios" de la formación y a proteger el liderazgo de Rivera, "el único capaz de mantener firme el timón" a pesar de "la tempestad y la tormenta que están ahí fuera".

Villacís ha afirmado que "a día de hoy Ciudadanos es el partido que necesita España", y que "la única presión" a la que debe hacer caso es la que ejerzan las personas que les votaron. "Entre presiones y democracia elegimos siempre democracia", ha señalado la vicealcaldesa de Madrid.