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El Gobierno euroescéptico del Movimiento Cinco Estrellas y la Liga asume el poder en Italia

  • Giuseppe Conte ha jurado el cargo de primer ministro, junto al resto del gabinete
  • Es el quinto jefe del Gobierno consecutivo que no ha sido votado en las urnas
  • Luigi di Maio, líder del M5S, y Matteo Salvini, de la Liga, son vicepresidentes
  • Ambos han tenido que moderar sus propuestas para fraguar el Ejecutivo

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Italia ya tiene nuevo Gobierno, sostenido por el Movimiento Cinco Estrellas y la Liga

Después de tres meses de bloqueo político, Italia ha logrado salir del marasmo en que se hallaba sumida por el fragmentado resultado las elecciones generales con la toma de posesión este viernes del Gobierno euroescéptico pactado por el Movimiento Cinco Estrellas y la Liga, que han tenido que moderar sus posiciones para llevar a buen puerto el pacto pero, en última instancia, han logrado abrir una nueva etapa en el país.

Con todo, el Ejecutivo recién formado repite una constante de los últimos años: Giuseppe Conte, el profesor universitario sin experiencia política al que los dos partidos han elegido para que sea primer ministro, no era ninguno de los candidatos que se presentaron en marzo para el cargo y abunda en el perfil tecnócrata de los últimos mandatarios.

De hecho, Conte es el quinto primer ministro consecutivo que no ha sido votado como candidato en las urnas, tras Mario Monti (2011-2013), Enrico Letta (2013-2014), Matteo Renzi (2014-2016) y el actual primer ministro en funciones, Paolo Gentiloni, que lleva en el cargo desde finales de 2016. El último jefe del Gobierno italiano elegido directamente fue Silvio Berlusconi en su segundo mandato, de 2008 a 2011.

Juramento ante el presidente

Conte ha prestado juramento como nuevo primer ministro de Italia a primera hora de la tarde ante el jefe del Estado, Sergio Mattarella, quien frenó su primera intentona al no aceptar la composición del gabinete, y en concreto, la presencia de Paolo Savona, un economista contrario al euro, como ministro de Economía.

Tras ese frenazo, el presidente de la República estaba decidido a formar un gobierno de transición para repetir las elecciones, lo que llevó a Luigi di Maio y Matteo Salvini, líderes del Movimiento Cinco Estrellas y de la Liga, a ceder en sus pretensiones: este jueves acordaron desplazar a Savona a una cartera de Asuntos Europeos y proponer como ministro de Economía a Giovanni Tria, también euroescéptico pero de perfil más moderado.

Esa concesión abrió la puerta al nuevo Gobierno, para el que Di Maio y Salvini han prestado juramento como vicepresidentes, el primero como ministro de Desarrollo Económico y Trabajo y el segundo como titular de la cartera de Interior. Los dos llevarán el verdadero peso político del Ejecutivo, pese a que Conte ostente la jefatura.

El M5S y la Liga acuerdan un nuevo ministro de Economía para conseguir formar gobierno en Italia

Traspaso de poderes

Tras Conte, Di Maio y Salvini, el resto de ministros, hasta 17, han jurado su cargo ante Mattarella: "Juro ser fiel a la República, observar lealmente a la Constitución y a las leyes y ejercitar mis funciones a favor del interés exclusivo de la nación", han repetido ante el jefe del Estado, quien ha firmado los nombramientos y les ha estrechado la mano.

El acto, celebrado en la Sala de las Fiestas del palacio del Quirinal, la sede de la Presidencia, ha terminado con una foto de familia de Mattarella y los nuevos ministros, que han acudido, a continuación, al traspaso de poderes de manos del Gobierno en funciones.

Así, Conte ha sido recibido por un piquete de honor en el palacio Chigi, la sede del Ejecutivo, y, tras pasar revista a los militares, ha acudido a la conocida como Sala de los Galeones, donde Paolo Gentiloni le ha entregado la campana que se emplea para abrir y cerrar los Consejos de Ministros en la tradicional 'ceremonia de la campanilla', que simboliza el traspaso de poderes.

Primer Consejo de Ministros

Ninguno de los dos ha pronunciado palabra en público, pese a que han mantenido un encuentro previo a puerta cerrada. Después, Gentiloni ha abandonado el palacio, entre aplausos del personal y con honores, y Conte ha celebrado su primer Consejo de Ministros.

El nuevo Gobierno, en cualquier caso, debe someterse en los próximos días a una doble votación de investidura en la Cámara de Diputados y en el Senado, aunque ese trámite parlamentario se da por descontado puesto que el Movimiento Cinco Estrellas y la Liga suman mayoría suficiente en ambas cámaras.

Por el momento, el nuevo primer ministro y el resto de su Ejecutivo ha sido invitado ya a la recepción que esta misma noche ofrece el Quirinal por la Fiesta de la República del 2 de junio. A partir de entonces, comenzará lo más difícil, gobernar Italia.